EL BOXEO NO ESTÁ MUERTO

Así que le boxeo está desapareciendo, ¿no? Que digan lo que quieran.
Estoy tan cansado de escuchar esas sandeces de personas que sólo quieren pegarle al boxeo simplemente porque es un blanco fácil. Pero lo cierto es que esas personas son estúpidas, no tienen idea o son demasiado perezosas para hacer su tarea, al igual que aquellos que repiten lo que dicen otros o los payasos que hablan en la radio y ni siquiera saben lo que es un gancho izquierdo. Hace años que esto es así.
En otros países el negocio del boxeo es fuerte. A Bob Arum de Top Rank le encanta hablar de los ratings televisivos que el boxeo tiene en México, en donde hasta le gana al fútbol. En Alemania, numerosas cadenas televisivas transmiten boxeo y los estadios grandes por lo general se llenan para ver las tarjetas. En el Reino Unido, este deporte sigue siendo muy popular. Lo mismo en Japón. En Filipinas, el ícono nacional no es un cantante ni un político, es el rey del peso-por-peso, Manny Pacquiao.
Si en los Estados Unidos el boxeo está muriendo, ¿entonces por qué el campeonato por el título del peso welter el sábado entre Shane Mosley-Antonio Margarito en el Staples Center de Los Angeles fue un evento tan importante?
La pelea atrajo a 20,820 fanáticos en un estadio metropolitano importante en medio de una difícil crisis económica. El número público, dicho sea de paso, fue el mayor en la historia del edificio en cualquier evento que haya hecho.
Lo anterior significa que hubo más personas que para cualquier partido de los Lakers, concierto o cualquier acontecimiento. Nada mal para un deporte que está en extinción, ¿no?
Las promotoras, Golden Boy y Top Rank, pusieron precios razonables (desde $25 hasta $300 dólares) y las ganancias fueron de alrededor de $1.4 millones de dólares.
En cuanto a la televisión, la pelea también consiguió números sorprendentes. Según mis fuentes en HBO, la transmisión generó un rating de 3.9 en vivo el sábado por la noche. Y la repetición del domingo hizo 1.3, algo sobresaliente.
A la pelea le fue mejor que a cualquier otra pelea televisada por HBO en todo el año pasado con la excepción del combate de Oscar De La Hoya ante Steve Forbes en mayo, que fue la primera de De La Hoya que no era PPV por HBO desde 2001, y la pelea Joe Calzaghe-Bernard Hopkins en abril.
Uno de los aspectos que hizo que Mosley-Margarito sea tan entretenida fue que las personas que asistieron al evento fueron los verdaderos fanáticos, no los invitados del casino. Te podías dar cuenta de eso porque el lugar estaba lleno antes de que tuviese lugar el evento principal, algo que nunca ocurre en las grandes peleas de Las Vegas.
Dejando de lado la lluvia en Los Angeles, fue un gran evento y esperemos que haya sido el comienzo de un año repleto de grandes encuentros.
Un par más de pensamientos sueltos post-Mosley-Margarito:
Teniendo en cuenta el resultado, esto es lo que me gustaría que ocurra (y también a los ejecutivos de HBO): Que Mosley defienda el título ante Floyd Mayweather (vamos, saben que volverá de su retiro) este verano y que el ganador enfrente al ganador de la pelea del dos de mayo entre Ricky Hatton-Pacquiao, a fin de año.
Si las acusaciones sobre Margarito según las cuales él o alguien de su equipo intentó llenar sus guantes con una sustancia parecida al yeso son ciertas, ¿No tendríamos que cuestionar la validez de sus grandes victorias ante Miguel Cotto, Kermit Cintron y Joshua Clottey? el rincón de Cintron ya ha enviado una carta a la comisión de California pidiendo que se siga de cerca esta cuestión para ver cuáles son sus opciones si se llegara a comprobar que Margarito intentó hacer trampa.
Ya que Margarito recibió una gran golpiza ante Mosley, ¿Eso no significa que el "Tornado de Tijuana" ahora pasó a ser una simple "Brisa de Tijuana"?
Creo que la animación, los gráficos y el diseño general del nuevo "Campeonato Mundial de Boxeo" de HBO es increíble. Le da al show un aire más moderno. Pero debo decir que me llevará un tiempo acostumbrarme a la mueva música. Nunca voy a entender por qué modificaron algo que era perfecto, no puedes modificar temas que son característicos. No les han cambiado la música a clásicos de la televisión como MASH, Dallas o The Jeffersons.
Es cierto que faltan 11 meses para que termine el 2009, ¿Pero alguien tiene dudas de que Nazim Richardson será uno de los candidatos para quedarse con el premio al Entrenador del Año? Con sus objeciones por la manera en la que estaban los vendajes de Margarito, seguida por la estelar performance de Mosley, tiene que estar a la cabeza en la carrera para quedarse con ese premio.
Arum dice que a pesar de la terrible derrota aún tiene pensado hacer que Margarito enfrente a Cotto en una revancha en junio, siempre y cuando Cotto salga en buen estado de la pelea que tiene programada para el 21 de febrero con Michael Jennings. Creo que muchos quieren ver Margarito-Cotto II, pero a mí no me interesa, el combate perdió mucho brillo después de ver a Margarito recibir tantos golpes. Me gustaría ver Cotto-Mosley II. De todos modos, puede que Arum no tenga opción si Margarito llegase a terminar suspendido.
Margarito ganó cerca de $2.4 millones de dólares para enfrentar a Mosley. ¿Crees que Margarito y sus managers, Sergio Díaz y Francisco Espinoza, están dudando si aceptar o no la oferta de $4 millones que les hizo el promotor Dan Goossen, para que Margarito enfrente a Paul Williams en una revancha?
Creo que Mosley habrá estado distraído por todos los problemas afuera del ring, ¿no?
Una apreciación personal. Le doy un portazo al Grand Wilshire de Los Angeles. Fue el hotel de la pelea, en donde se hospedaron los integrantes de los medios de prensa, los púgiles, sus rincones y los promotores. Me he hospedado en todos los hoteles de costa a costa para cubrir las peleas, y este ha sido el más flojo de todos, en especial en cuanto al servicio. Después de la pelea, me fui a dormir alrededor de las 2:45 a.m. con un largo viaje por delante al día siguiente, de modo que mi idea era dormir bien antes de tomar el vuelo de las 9:40 a.m. desde Los Angeles hacia Charlotte, para después hacer combinación en un vuelo a Washington. Bien, pedí que me despertaran a las 7:30 a.m. y me dormí. Me despertaron a las 5:30 a.m, algo que como sabrán no fue para nada de mi agrado.