LAS VIBRACIONES DE LOS MARIACHIS DE OSCAR DE LA HOYA, YA NO LO MOTIVAN, Y LOS GOLPES DE REGUETONES DE LOS ENREDADOS MAYWEATHER, SIGUEN SIENDO EXPLOSIVOS
Ya los instrumentos de cuerdas y aire, de los acostumbrados mariachis, que acompañan a Oscar de la Hoya a abordar el tinglado, en vez de animación, pareciera que despiden a un héroe, que ya solamente le quedan vestigios de sus dotes naturales de fulgurante, que lo solidificaron de modelo pugilístico. Para su segunda refriega, contra Floyd Mayweather, la curiosidad de escuchar los truenos, relámpagos y tormentas, de la familia Mayweather, que no podrá consolidar ni el Papa Benedicto, será lo que desborde a los aficionados a repetir espectáculo pugilístico con resultado más convincente
Nadie, más, sintió en carne viva, el no haber participado en el primer combate de Oscar de la Hoya y Floyd Mayweather que el homónimo de este último, a quien usó para evitar que adiestrara a su oponente y después, lo largo del gimnasio, declarándole aún más, enemistad intolerante a su progenitor.
Inclusive, Floyd Mayweather padre, asistió al primer combate de su hijo contra Oscar de la Hoya, debido a que en el pesaje oficial del combate, Oscar, le entregó dos boletos a su adversario Floyd, para que se lo hiciera llegar a su padre.
Nadie puede hablar, ni sentir por otro, pero fue evidente, que Floyd Mayweather padre, la noche del 5 de mayo de 2007, prefirió el triunfo de Oscar de la Hoya y no el de su vástago, por relaciones turbulentas, llenas de incomprensiones y las arrogancias de su hijo, que solo la determinará el transcurrir del tiempo.
Hace ya algunos largos meses, que les adelanté que nadie evitaría esta vez, que Floyd Mayweather padre estuviera adiestrando a Oscar de la Hoya, en su segunda confrontación, contra el monarca de los pesos wélter Floyd Mayweather hijo, aún no cobrando los dos millones que exigió para la primera contienda, para controvertir directamente contra su hijo que le declaró pugilato callejero.
Ahora, analicemos bien amigos del pugilismo : ¿Podrá Floyd Mayweather padre, conjuntamente con Oscar de la Hoya, cobrar vindicta en esta segunda pugna sobre el actual monarca mundial de las 147 libras, versión Consejo Mundial de Boxeo?
En el primer reto, entre Floyd y Oscar, seleccioné a De la Hoya para salir airoso, por la condición de peso 154 libras, aún no estando de preparador físico-técnico Floyd Mayweather padre, que pudo haber hecho mejor desempeño que Freddie Roach, por ser más agresivo en la dirección de un cantón y conoce mejor al "Golden Boy".
Para la segunda pendencia entre Floyd Mayweather y Oscar de la Hoya, se disputará el monarcado de los pesos wélter en poder del primero y la categoría, quiérase o no, ya no es cómoda para el afamado "Golden Boy", que sigue diluyéndose después de campaña exigente, en la cual se ha medido a los mejores contendientes de la seis divisiones que abarcó en su recorrido profesional.
CREO, NO HAY PORFÍA, A NIVEL MUNDIAL, AL DEFINIRSE QUE OSCAR DE LA HOYA, NO TENGA OPORTUNIDAD DE IMPONERSE A FLOYD MAYWEATHER HIJO, EN LA DIVISIÓN DE LOS PESOS WÉLTER
Como muchos, le ofrecí oportunidad de triunfo en su primer agarrón, por condiciones de peso, pero no, de habilidades defensivas, ofensivas y celeridad. Si Oscar no pudo superar a Floyd Mayweather en 154 libras, con ventajas favorables de peso, estatura y extensión de brazos. En 147 libras, que es el peso oficial para la segunda refriega, el cuadrilátero, será una cárcel para el "Golden Boy".
Y digo será una cárcel, porque estará sometido a la disciplina y recursos de Floyd, que deseará imponer su poderío pugilístico y rencor, para obtener doble triunfo, humillando a Oscar de la Hoya y también a su padre adiestrador del "Golden Boy".
Adelanto, que no estoy exponiendo este comentario basado en la pasada inquina de preparación de Oscar de la Hoya contra Steve Forbes. Es evidente, que fue combate de apreciación buscando metas de mejor preparación, descubriendo las lagunas en el estilo de Oscar, para contender por segunda vez contra Floyd Mayweather y fue examen, que deseó apreciar su preparador físico-técnico, para tener bases firmes, y trazarse régimen de adiestramiento para el mes de septiembre.
Es cierto que Oscar, dominó el pleito pugilístico, sin poder eclipsar, las prestezas de Steve Forbes, que lo golpeó al rostro, como pocos rivales que haya tenido De la Hoya y se debió al veneno de la celeridad, que es inconveniente para cualquiera en la disciplina del boxeo y es patético, en el estilo de Steve Forbes, Floyd Mayweather y Oscar de la Hoya.
Floyd Mayweather, ha sido uno de los pocos boxeadores, que desde los pesos ligeros, llegó a combatir a la categoría de los superwelter en solo siete combates. Es decir, en siete contiendas abarcó tres divisiones distintas. Hoy, nadie puede controvertir que es legítimo peso wélter, donde luce refulgente y hasta poderoso, después de despachar por la vía más convincente al británico Ricky Hatton, que tiene textura de ladrillos.
Si Floyd, fue de prontitud extrema contra Oscar de la Hoya, combatiendo en 154 libras, en la división de los pesos wélter, será de más celeridad, que sumado a su excesiva defensiva y pericias en los tinglados, se presagia una noche tenebrosa para el hombre que vigorizó el concurso del pugilismo, en las últimas dos décadas con ejemplo paradigma.
OSCAR DE LA HOYA, SERÁ EXALTADO, UNA VEZ MÁS, POR SU INMENSA AFICIÓN QUE LO APOYA, PERO EL SHOW, ESTA VEZ, LO DECORARÁ, LA ADVERSIDAD ENTRE LOS MIEMBROS DE LA MISMA FAMILIA MAYWEATHER
¿Qué si habrá agarrones entre hermanos, padre e hijo, antes de la segunda disputa entre Oscar y Floyd? De lo, por hecho, todos los amigos del pugilismos tienen los dedos cruzados para que no suceda, sería espectáculo deprimente para vuestro deporte, pero a la vez, quién podrá evitar esos atropellos entre familia después de estar viviendo en el boxeo el circo de lo inesperado.
Entre los Mayweather, no se ha concertado pleitos pugilísticos oficiales, por la edad de los hermanos Roger y Floyd padre, como la juventud del monarca de los pesos wélter del CMB. Sin embargo, se teme que en las distintas conferencias de prensa para la promoción del combate de Oscar y Floyd, para el mes septiembre, los agarrones entre los Mayweather, no sean muy amistosos y de árbitro tendrá que intervenir Larry Merchant.
Aquí, precisamente, está la inyección de motivación y promoción de la segunda confrontación de Oscar de la Hoya y Floyd Mayweather. El teatro esta vez, no será Floyd acosando a Oscar, como sucedió anteriormente. Serán los mismos Mayweather, que pongan a reír y también a correr, a los curiosos en las próximas conferencias de prensa, que pueden desatarse de un momento a otro.
EL 20 DE SEPTIEMBRE PRÓXIMO, OSCAR NO PUEDE GANAR, ES MÁS, PUEDE PERDER, MUCHO MÁS CONVINCENTE QUE LA VEZ ANTERIOR
No podemos negar, la responsabilidad profesional de Oscar de la Hoya y la aguda razón de tratar de vencer a su propio vástago su adiestrador Floyd Mayweather padre, por el comportamiento y soberbia de su hijo. Pero de las ansias, a la realidad, hay trechos de escarmientos.
Oscar, está en el declive de su exitoso trayecto de profesional y combatiendo en desventaja de peso, ni hablar de lo que le espera, con adversario que a pesar de ser altanero es muy profesional.
Steve Forbes, lo asestó a Oscar, como pocos al rostro, teniendo todas las desventajas en combate de preparación y para decir verdad, Oscar no terminó satisfecho con su rendimiento y se notó desmoralizado después del ensayo.
Floyd Mayweather, viene para este segundo compromiso, con otra quimera, sobre la que tiene para imponerse por segunda vez a Oscar de la Hoya y es, a la vez, derrotar a su progenitor, que asegura tener la fórmula para anular los ineludibles lances del "Pretty Boy".
Pienso, que en 147 libras Floyd Mayweather, le declarará guerra franca, con lluvia de golpes a Oscar de la Hoya, a diferencia del primer pleito y es, hasta posible, que la reyerta no llegue a los doce capítulos estipulados.
Ahora, no por estas informaciones, vamos a dejar de apoyar en sus misiones a Oscar de la Hoya, que nos ha ofrecido espectáculos inolvidables en el pugilismo, contendiendo con los mejores púgiles calificados de las seis divisiones que ha abarcado en ésta disciplina, batiéndose con 22 boxeadores que llegaron a ser monarcas a nivel mundial y está parejo en este renglón, con Julio César Chávez que además, realizó 25 combates con 22 ex campeones del mundo, para ser los dos monarcas, que más han combatido con homólogos a lo extenso de la historia del boxeo.
Seguiremos rastreando las incidencias del reto que se dilucida, en el mes de septiembre próximo, en combate que podrá apreciar en sus hogares por el sistema de Pagar Por Ver.
Ya los instrumentos de cuerdas y aire, de los acostumbrados mariachis, que acompañan a Oscar de la Hoya a abordar el tinglado, en vez de animación, pareciera que despiden a un héroe, que ya solamente le quedan vestigios de sus dotes naturales de fulgurante, que lo solidificaron de modelo pugilístico. Para su segunda refriega, contra Floyd Mayweather, la curiosidad de escuchar los truenos, relámpagos y tormentas, de la familia Mayweather, que no podrá consolidar ni el Papa Benedicto, será lo que desborde a los aficionados a repetir espectáculo pugilístico con resultado más convincente
Nadie, más, sintió en carne viva, el no haber participado en el primer combate de Oscar de la Hoya y Floyd Mayweather que el homónimo de este último, a quien usó para evitar que adiestrara a su oponente y después, lo largo del gimnasio, declarándole aún más, enemistad intolerante a su progenitor.
Inclusive, Floyd Mayweather padre, asistió al primer combate de su hijo contra Oscar de la Hoya, debido a que en el pesaje oficial del combate, Oscar, le entregó dos boletos a su adversario Floyd, para que se lo hiciera llegar a su padre.
Nadie puede hablar, ni sentir por otro, pero fue evidente, que Floyd Mayweather padre, la noche del 5 de mayo de 2007, prefirió el triunfo de Oscar de la Hoya y no el de su vástago, por relaciones turbulentas, llenas de incomprensiones y las arrogancias de su hijo, que solo la determinará el transcurrir del tiempo.
Hace ya algunos largos meses, que les adelanté que nadie evitaría esta vez, que Floyd Mayweather padre estuviera adiestrando a Oscar de la Hoya, en su segunda confrontación, contra el monarca de los pesos wélter Floyd Mayweather hijo, aún no cobrando los dos millones que exigió para la primera contienda, para controvertir directamente contra su hijo que le declaró pugilato callejero.
Ahora, analicemos bien amigos del pugilismo : ¿Podrá Floyd Mayweather padre, conjuntamente con Oscar de la Hoya, cobrar vindicta en esta segunda pugna sobre el actual monarca mundial de las 147 libras, versión Consejo Mundial de Boxeo?
En el primer reto, entre Floyd y Oscar, seleccioné a De la Hoya para salir airoso, por la condición de peso 154 libras, aún no estando de preparador físico-técnico Floyd Mayweather padre, que pudo haber hecho mejor desempeño que Freddie Roach, por ser más agresivo en la dirección de un cantón y conoce mejor al "Golden Boy".
Para la segunda pendencia entre Floyd Mayweather y Oscar de la Hoya, se disputará el monarcado de los pesos wélter en poder del primero y la categoría, quiérase o no, ya no es cómoda para el afamado "Golden Boy", que sigue diluyéndose después de campaña exigente, en la cual se ha medido a los mejores contendientes de la seis divisiones que abarcó en su recorrido profesional.
CREO, NO HAY PORFÍA, A NIVEL MUNDIAL, AL DEFINIRSE QUE OSCAR DE LA HOYA, NO TENGA OPORTUNIDAD DE IMPONERSE A FLOYD MAYWEATHER HIJO, EN LA DIVISIÓN DE LOS PESOS WÉLTER
Como muchos, le ofrecí oportunidad de triunfo en su primer agarrón, por condiciones de peso, pero no, de habilidades defensivas, ofensivas y celeridad. Si Oscar no pudo superar a Floyd Mayweather en 154 libras, con ventajas favorables de peso, estatura y extensión de brazos. En 147 libras, que es el peso oficial para la segunda refriega, el cuadrilátero, será una cárcel para el "Golden Boy".
Y digo será una cárcel, porque estará sometido a la disciplina y recursos de Floyd, que deseará imponer su poderío pugilístico y rencor, para obtener doble triunfo, humillando a Oscar de la Hoya y también a su padre adiestrador del "Golden Boy".
Adelanto, que no estoy exponiendo este comentario basado en la pasada inquina de preparación de Oscar de la Hoya contra Steve Forbes. Es evidente, que fue combate de apreciación buscando metas de mejor preparación, descubriendo las lagunas en el estilo de Oscar, para contender por segunda vez contra Floyd Mayweather y fue examen, que deseó apreciar su preparador físico-técnico, para tener bases firmes, y trazarse régimen de adiestramiento para el mes de septiembre.
Es cierto que Oscar, dominó el pleito pugilístico, sin poder eclipsar, las prestezas de Steve Forbes, que lo golpeó al rostro, como pocos rivales que haya tenido De la Hoya y se debió al veneno de la celeridad, que es inconveniente para cualquiera en la disciplina del boxeo y es patético, en el estilo de Steve Forbes, Floyd Mayweather y Oscar de la Hoya.
Floyd Mayweather, ha sido uno de los pocos boxeadores, que desde los pesos ligeros, llegó a combatir a la categoría de los superwelter en solo siete combates. Es decir, en siete contiendas abarcó tres divisiones distintas. Hoy, nadie puede controvertir que es legítimo peso wélter, donde luce refulgente y hasta poderoso, después de despachar por la vía más convincente al británico Ricky Hatton, que tiene textura de ladrillos.
Si Floyd, fue de prontitud extrema contra Oscar de la Hoya, combatiendo en 154 libras, en la división de los pesos wélter, será de más celeridad, que sumado a su excesiva defensiva y pericias en los tinglados, se presagia una noche tenebrosa para el hombre que vigorizó el concurso del pugilismo, en las últimas dos décadas con ejemplo paradigma.
OSCAR DE LA HOYA, SERÁ EXALTADO, UNA VEZ MÁS, POR SU INMENSA AFICIÓN QUE LO APOYA, PERO EL SHOW, ESTA VEZ, LO DECORARÁ, LA ADVERSIDAD ENTRE LOS MIEMBROS DE LA MISMA FAMILIA MAYWEATHER
¿Qué si habrá agarrones entre hermanos, padre e hijo, antes de la segunda disputa entre Oscar y Floyd? De lo, por hecho, todos los amigos del pugilismos tienen los dedos cruzados para que no suceda, sería espectáculo deprimente para vuestro deporte, pero a la vez, quién podrá evitar esos atropellos entre familia después de estar viviendo en el boxeo el circo de lo inesperado.
Entre los Mayweather, no se ha concertado pleitos pugilísticos oficiales, por la edad de los hermanos Roger y Floyd padre, como la juventud del monarca de los pesos wélter del CMB. Sin embargo, se teme que en las distintas conferencias de prensa para la promoción del combate de Oscar y Floyd, para el mes septiembre, los agarrones entre los Mayweather, no sean muy amistosos y de árbitro tendrá que intervenir Larry Merchant.
Aquí, precisamente, está la inyección de motivación y promoción de la segunda confrontación de Oscar de la Hoya y Floyd Mayweather. El teatro esta vez, no será Floyd acosando a Oscar, como sucedió anteriormente. Serán los mismos Mayweather, que pongan a reír y también a correr, a los curiosos en las próximas conferencias de prensa, que pueden desatarse de un momento a otro.
EL 20 DE SEPTIEMBRE PRÓXIMO, OSCAR NO PUEDE GANAR, ES MÁS, PUEDE PERDER, MUCHO MÁS CONVINCENTE QUE LA VEZ ANTERIOR
No podemos negar, la responsabilidad profesional de Oscar de la Hoya y la aguda razón de tratar de vencer a su propio vástago su adiestrador Floyd Mayweather padre, por el comportamiento y soberbia de su hijo. Pero de las ansias, a la realidad, hay trechos de escarmientos.
Oscar, está en el declive de su exitoso trayecto de profesional y combatiendo en desventaja de peso, ni hablar de lo que le espera, con adversario que a pesar de ser altanero es muy profesional.
Steve Forbes, lo asestó a Oscar, como pocos al rostro, teniendo todas las desventajas en combate de preparación y para decir verdad, Oscar no terminó satisfecho con su rendimiento y se notó desmoralizado después del ensayo.
Floyd Mayweather, viene para este segundo compromiso, con otra quimera, sobre la que tiene para imponerse por segunda vez a Oscar de la Hoya y es, a la vez, derrotar a su progenitor, que asegura tener la fórmula para anular los ineludibles lances del "Pretty Boy".
Pienso, que en 147 libras Floyd Mayweather, le declarará guerra franca, con lluvia de golpes a Oscar de la Hoya, a diferencia del primer pleito y es, hasta posible, que la reyerta no llegue a los doce capítulos estipulados.
Ahora, no por estas informaciones, vamos a dejar de apoyar en sus misiones a Oscar de la Hoya, que nos ha ofrecido espectáculos inolvidables en el pugilismo, contendiendo con los mejores púgiles calificados de las seis divisiones que ha abarcado en ésta disciplina, batiéndose con 22 boxeadores que llegaron a ser monarcas a nivel mundial y está parejo en este renglón, con Julio César Chávez que además, realizó 25 combates con 22 ex campeones del mundo, para ser los dos monarcas, que más han combatido con homólogos a lo extenso de la historia del boxeo.
Seguiremos rastreando las incidencias del reto que se dilucida, en el mes de septiembre próximo, en combate que podrá apreciar en sus hogares por el sistema de Pagar Por Ver.