miércoles, 7 de septiembre de 2011

MÁRQUEZ HABLA DE "GUERRA" Y PACQUIAO DE DESPEJAR DUDAS



EFE

El campeón y político filipino se mostró convencido de que en el 2012 el campeón invicto Floyd Mayweather Jr. al final aceptará ser su rival en la gran pelea que todos esperan.
La máquina promocional de la tercera pelea que van a disputar los púgiles, el mexicano Juan Manuel Márquez y el filipino Manny Pacquiao, cumplió su segunda etapa en Nueva York, donde el primero habló de "guerra" y el segundo de despejar para siempre todas las dudas sobre cual era el mejor.
Después de haber iniciado la promoción en Manila para la pelea que van a disputar el próximo 12 de noviembre, en Las Vegas (Nevada), Márquez y Pacquiao llegaron a la Gran Manzana y ambos dijeron que estaban listos para protagonizar un gran combate, el tercero y definitivo entre ellos mismos.
Ambos reivindicaron la responsabilidad de llegar en plenitud de forma y con la mejor preparación posible si querían conseguir la victoria, pero también con visiones diferentes en cuanto a como debían enfrentar el combate, que puede ser catalogado como el más interesante del año 2011.
Márquez, de 38 años, admitió que está ante la pelea más importante de su larga y triunfal carrera por lo que la preparación va a ser la "ideal", a pesar que también reconoció que la gira de promoción desgasta.
"Las dos peleas anteriores con Pacquiao acabaron en decisiones polémicas -un combate nulo y decisión dividida para el campeón filipino-, por lo que ahora voy a trabajar de forma inteligente para conseguir el nocáut y no dejar ninguna duda", destacó Márquez, que tendrá que subir de peso.
Márquez, que tiene en su poder el cinturón del peso ligero, versión Organización Mundial de Boxeo (OMB) y de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), deberá colocarse dentro del peso welter, que es el de Pacquiao.
"Debo trabajar la rapidez, la fuerza y superar lo que significa la subida de peso, pero estoy seguro que voy a realizar una gran pelea y que va a ser del agrado de todos los buenos seguidores del mundo del boxeo", subrayó Márquez.
Por su parte, Pacquiao, que no perdió la oportunidad de volver a cantar, reiteró que había llegado el momento de despejar todas las dudas que hubiese sobre las peleas anteriores y lo haría con una enseñanza de boxeo.
"La única respuesta posible es que dar una gran pelea y además demostrar sobre el cuadrilátero quien presente el mejor boxeo para que decidir al ganador", subrayó Pacquiao, de 32 años.
El campeón y político filipino no perdió tampoco la oportunidad para decir que estaba convencido que en el 2012 el campeón invicto estadounidense Floyd Mayweather Jr. al final aceptaría ser su rival para protagonizar la pelea que todos desean vera desde hace varios años.
"No tengo ninguna duda que el próximo año, Floyd (Mayweather Jr.) querrá enfrentarse conmigo y por eso se está preparando con un púgil zurdo como es Víctor Ortiz, que será su próximo rival", señaló Pacquiao.
Además, Pacquiao que es congresista en Filipinas, adelantó que piensa presentarse en el 2013 a gobernador de su provincia (Bukidnon), lo que significa que tendrá que dejar el boxeo activo porque ya no podrá abandonar su país ni tener tiempo para prepararse.
"Eso son los planes que tengo de cara al futuro, pero ahora el objetivo es centrarme en la próxima pelea, que es la más importante, seguir trabajando como congresista y disfrutar con mi grupo musical", agregó Pacquiao.
El promotor del combate, Bob Arum, reiteró, como ya había manifestado en Manila, que el escenario del MGM Grand, donde se realizará la pelea, está prácticamente vendido todo el aforo y destacó que espera más de 1,4 millón de persona que compraran la pelea para verla por el sistema de la televisión de pago.