Carlos Nava
ESPN.com
El boxeador cubano Guillermo Rigondeaux "exentó" el round del sábado y parece que su siguiente pelea será por la unificación de los cetros del peso supergallo.
El promotor Bob Arum dijo que contempla enfrentar a Rigondeaux contra el ganador de la pelea que sostendrán Nonito Donaire y Jorge "Travieso" Arce, este fin de semana en Houston.
Donaire expondrá sus campeonatos de las 122 libras de la Asociación Mundial de Boxeo y de la Federación Internacional ante "El Travieso" Arce.
"El plan es que pelee en febrero", dijo Arum. "El favorito es Donaire, pero ya vimos que en esto del boxeo nada está escrito. El sábado pasado vimos como cualquier cosa puede suceder en el boxeo".
El pasado 8 de diciembre, Juan Manuel Márquez noqueó a Manny Pacquiao cuando faltaba un segundo por terminar el sexto asalto y el mexicano se veía mucho más lastimado que el filipino.
Este sábado, en Houston, se suponía que Rigondeaux debía enfrentar al tailandés Poonsawat Kratingdaenggym, quien no superó el examen médico y la pelea fue suspendida.
"El Departamento de Licencias y Regulación de Texas nos notificó que no expedirían una licencia para Poonsawat Kratingdaenggym", indicó Arum en un comunicado. "Me siento mal por ambos boxeadores que entrenaron muy duro".
"Los concertadores de peleas de Top Rank están trabajando con HBO para el regreso al ring de Guillermo tan pronto como sea posible".
Rigondeaux rechazó estar frustrado por la cancelación de su pelea, un día antes de la ceremonia de pesaje. "No es fácil, pero es como todo, la salud está por encima de todo y si hay problema hay que parar", indicó. "No se ha dicho nada todavía. Eso fue reciente y cogió a todo el mundo por sorpresa".
Este jueves, Rigondeaux lucía tranquilo, caminaba por el lobby del hotel donde se hospeda en el centro de Houston, acompañado de su equipo de trabajo.
Su prioridad era salir a comer, luego de que fue suspendido su combate.
"Ya no tiene caso cuidarme hoy", bromeó. "Siempre son semanas en que hay que cuidar lo que se come, pero ahora mismo salgo a comer bien".
"Todo estaba listo, mañana (viernes), era el pesaje", agregó. "Ya sólo faltaba pelear y, bueno, es como todo, sucede las cosas, todo pasa por algo".
Es la segunda ocasión consecutiva en la que el combate está en duda para Rigondeaux.
Su compromiso del 15 de septiembre pasado estuvo a punto de suspenderse por situaciones legales con promotores.
"Ya uno está acostumbrado a todas esas cosas", mencionó. "Siempre hay alguna inconvenciencia, pero de todo se va saliendo poco a poco. Nos preparamos, subimos e hicimos todo bien".
Rigondeaux dijo estar despreocupado si su siguiente rival es Donaire, Arce o alguien más.
"Ya saben que el que quiera pelear conmigo ya sabe que sólo tiene que llamar a 'El Chacal'", advirtió. "Sólo falta que me llame y no hay problema conmigo".