jueves, 9 de junio de 2011

Márquez peleará con Ramos



SPORTIMES

El boxeador mexicano Juan Manuel Márquez se medirá con el colombiano Likar Ramos el 16 de julio en sede por confirmar, luego de que se cancelara su pelea contra David Díaz al no llegar a un arreglo.
Dinamita Márquez se decidió por Ramos pues lo toma como entrenamiento para su pelea contra Manny Pacquiao que se celebrará el 12 de Noviembre en Las Vegas.
“Lo que queríamos era un rival zurdo y lo conseguimos, el rival es importante, pero lo más importante es mantenerse activo para noviembre”, comentó Juan Manuel Márquez.
Likar Ramos fue campeón superpluma de la AMB y tiene un record de 24 ganados, 18 por la vía del Knock out, y 3 derrotas.

Huck defenderá ante Garay en Alemania




Ake Persson, BoxingScene.com

El ex campeón mundial semi completo AMB Hugo Hernán Garay retará al campeón mundial crucero de la Organización Mundial de Boxeo Marco Huck el 16 de julio en Alemania.
Será la cuarta pelea de Garay en Alemania, en donde perdió dos peleas por decisión controversial ante Zsolt Erdei por el título OMB, y luego defendió el cetro AMB que ganara ante Juergen Braehmer - en las tres peleas Garay mostró gran estamina y agresividad, y lució impresionante en sus constantes ataques.
Todo se derrumbó cuando en el 2009, Garay perdió ante Gabriel Campillo y luego fue noqueado por Chris Henry - derrotas que se achacan a la mala preparación y problemas para hacer el peso de 175lbs. Hugo subió a pesos cruceros pero no parece ser el mismo que solía ser.
Aún no hay confirmación oficial de Sauerland sobre Sergey Liakhovich vs Robert Helenius. El hecho es que el gerente general de Sauerland, Chris Meyer solo confirma estar en negociación con Liakhovich.
Sin embargo, parece ser que se llegó a un acuerdo o por lo menos es lo que dicen en Team Liakhovich. El problema, de existir uno, es que Helenius no ha firmado el contrato.

Midiendo el legado de Tyson



Brian Campbell
ESPN Mobile

Llegará un día en el futuro en el que mis hijos de tres años descubrirán mi pasión inquebrantable por el deporte del boxeo. E, inevitablemente, surgirá el tema de Mike Tyson.
Estoy seguro de que tendrán preguntas que variarán desde, "¿Puede haber sido el mejor de todos los tiempos?" a "¿Realmente se comió la oreja de ese hombre en el ring?" O, muy probablemente: "¿Me estás diciendo que el hombre de la televisión que besa palomas solía practicar este deporte?"
Esa es la realidad única y surrealista de Michael Gerard Tyson. No tiene definición; habiendo vivido la vida de 10 hombres en casi 45 años, Tyson ha sido rico, ha quebrado, ha sido querido, despreciado, encarcelado, compadecido, y casi todo lo que se te pueda ocurrir. Pero después de haber vivido cada estereotipo lo suficiente como para plantar los pies en el suelo, pegaba el salto al siguiente capítulo de su vida impredecible.
Ahora, con su carrera posterior al boxeo y su imagen reinventada a través de los ojos de la cultura pop, Tyson probablemente será recordado por esta generación como el icono de la comedia "The Hangover" tanto como es recordado por la generación anterior por haber amenazado con comerse los hijos de otro hombre.

Pero ninguno de esos es el Mike Tyson sobre el que les contaré a mis hijos.
Por todo el tiempo que nos pasamos analizando lo que Tyson podría haber sido como boxeador históricamente, nos estamos perdiendo la oportunidad de disfrutar lo que fue en realidad -- durante una temporada dolorosamente corta. Tyson, quien encabeza a los 12 miembros de la clase 2011 a ser inducidos en el Salón de la Fama del Boxeo Internacional este domingo, fue un fenómeno único.
El término "El Hombre Más Malo del Planeta" nunca le hará justicia. Tampoco alcanzará con ver una colección de sus primeros combates. Puedes arrojar estadísticas como su carrera sin precedentes al título de peso pesado a los 20 años o los meteóricos 19 nocauts consecutivos al principio de su carrera, 12 de ellos en el primer round... y apenas estarías rozando la superficie.
Tyson era un espectáculo individual quien debía ser visto en el contexto de su época para ser apreciado. No sólo trascendió el boxeo sino los deportes en general, saliendo a la fama en una tormenta perfecta durante los coloridos y excesivos años '80 junto con MTV, Michael Jordan y Hulk Hogan. Es el único atleta que mi padre --nunca un fanático de los deportes-- y yo realmente compartimos.
Cuando los críticos atacan la lista de oponentes derrotados por Tyson en su apogeo invicto tachándola de mediocre, están perdiendo de vista lo más importante de su verdadero legado: Tyson tomó un momento de la cultura estadounidense y lo hizo suyo.
Era un personaje de película hecho realidad, parte héroe y parte villano al mismo tiempo. Éste probablemente era su rasgo más menospreciado (y más lucrativo). Una superestrella atractiva y vulnerable con un toque siniestro, elevado por su atuendo icónico de pantalones cortos y zapatos negros sin medias, y una toalla blanca alrededor del cuello en lugar de la bata tradicional.
Nada de lo que Tyson hizo fue tradicional. Era un asesino urbano quien, a diferencia de los deportistas de su época preocupados por su imagen, se mantuvo fiel a la persona que realmente era como héroe de la contracultura salido de la nada. Tenía más credibilidad callejera que cualquier atleta en la historia, y todo lo que hacía -- como la forma en que se desplazaba rápidamente por el ring antes del comienzo de una pelea como un animal enjaulado -- parecía auténtico, y de hecho era auténtico. Fue su transparencia salvajemente impredecible lo que lo convirtió en una estrella de reality show años antes de que el género fuera inventado.
La honestidad y la promesa inflexible de violencia de Tyson alimentaron sus dos grandes fortalezas como atleta. Primero estaba su capacidad de vender boletos como la atracción más dinámica en la historia del deporte, ya sea vendiendo nocauts, o, más adelante en su carrera, vendiendo colapsos. La otra era su capacidad de ganar peleas incluso antes de que comenzaran, a través del temor y la intimidación (mira el nocaut de Tyson sobre el invicto Michael Spinks en 91 segundos en 1988).
A pesar de siempre haber sido, con 5-10 pies, el hombre más pequeño del ring en una era que abrió paso al nacimiento de los súper-pesos pesados de la actualidad, el Tyson de los años '80 hundía a sus oponentes en el caos. Los despojaba de cual fuera el plan de juego que traían e inmediatamente los empujaba a un modo de supervivencia. Incluso antes de que Tyson corriera a través del ring tras la campana inicial para tantear y cabecear como lo solía hacer, al estilo Cus D'Amato; incluso antes de estallar para aterrizar su combinación patentada de gancho izquierdo-uppercut derecho, ya los tenía.

Y a nosotros también.
El mismo miedo que les infundía a sus oponentes resonaba aún más profundamente en el espectador en casa. Hacía que Ray Lewis luciera tan terrible como Carl Lewis. Había una energía palpable en el aire antes de cada pelea de Tyson. De alguna manera te sentías excitado, nervioso y culpable al mismo tiempo, como si estuvieras a punto de ver un crimen organizado -- y aún así una pantalla de televisión y miles de millas de distancia no eran protección suficiente.
Y luego estaba la destrucción que Tyson dejaba a su paso. Ahora parece una hipérbole, pero la mayoría realmente creía -- si bien atrapados en el momento durante los tres años de reinado del peleador -- que Tyson se retiraría invicto. De pronto, no importaba el nivel de competencia al que se enfrentaba ni la naturaleza predecible del resultado. Era como ver jugar al "Dream Team" olímpico de la NBA -- sólo si el partido se estaba jugando en un episodio de "Los Sopranos".
Hoy en día, la vida de Tyson sigue dando giros impredecibles en los reinados de actor/entrenador y hombre de familia. Y no me sorprendería, teniendo en cuenta su popularidad y su presencia sin igual, que algún día tome las riendas de Muhammad Ali como el embajador mundial del boxeo.
Lo trágico de presentarle a Tyson a una nueva generación como un "héroe trágico" es que esto desprecia para siempre el glorioso momento en el que simplemente fue "un héroe".
Algún día, mis hijos preguntarán sobre Tyson y yo les diré lo que sé sobre quién es y quién fue. También les diré que no hubo nadie como él antes, y que nunca volverá a haber.

SEGÚN ROACH, MAYWEATHER PODRÍA ESTAR PREPARANDO SU PELEA ANTE PACQUIAO


AP

El entrenador Freddie Roach cree que Floyd Mayweather Jr. podría estarse preparando para un esperado combate contra Manny Pacquiao al regresar al cuadrilátero en septiembre.
Roach, entrenador del sensacional boxeador filipino, dijo a The Associated Press en una entrevista telefónica que cree que Mayweather ha accedido a pelear frente al campeón welter Víctor "Vicious" Ortiz porque su estilo lo ayudaría a estar listo para un enfrentamiento con Pacquiao.
"Desde luego, eso es lo primero en lo que pensé", dijo Roach el miércoles.
Tanto Ortiz como Pacquiao son púgiles rápidos que recetan un alto número de golpes y que tienden a ir hacia adelante. También suelen avanzar con el guante derecho al frente, y Mayweather —que pondrá fin a una inactividad de 16 meses cuando suba al ring el 17 de septiembre— casi nunca ha peleado frente a zurdos durante su carrera invicta.
Los pocos que ha enfrentado —Zab Judah por nombrar a alguno— le han causado algunos problemas.
"Sólo estoy pensando que nos dará una buena idea de cuál es su estilo para enfrentarlo; cómo maneja Floyd una pelea ante un zurdo", dijo Roach sobre Ortiz, que ganó el título de las 147 libras (67 kilos) del CMB con una decisión unánime muy apretada sobre el haitiano-estadounidense André Berto en abril, candidata segura al título de Pelea del Año.
"Algunos zurdos le han dado problemas", dijo Roach. "Judah se los dio pero no pudo mantener el ritmo. Señores como Víctor Ortiz, Manny Pacquiao, pueden mantener el ritmo. Y no creo que la posición de llevar al frente el guante derecho le dé problemas".
Pacquiao tiene programado enfrentar al mexicano Juan Manuel Márquez en noviembre en la tercera pelea de su serie épica, tras aplastar a Shane Mosley el mes pasado. Mayweather venció fácilmente a Márquez en septiembre del 2009 antes de darle una tunda a Mosley en su pleito más reciente.
Richard Schaefer de Golden Boy Promotions, que maneja a Ortiz y ha trabajado con Mayweather en el pasado, se rió ante la sugerencia de que Mayweather pudiera estarse preparando para enfrentar a Pacquiao al aceptar una pelea frente a alguien tan joven y hambriento de triunfo como el púgil con el que se verá las caras.
"Si quieres prepararte para Manny, de toda la gente, no vas a pelear contra Víctor Ortiz", afirmó Schaefer. "Sería un suicidio elegir a alguien tan difícil, con tanto físico, tan fuerte, tan joven como Víctor con el fin de prepararse para enfrentar a Pacquiao".