EFE
El combate entre los chicos malos del boxeo británico acabó con una contundente victoria de David Haye sobre Dereck Chisora ante más de 30.000 espectadores de una pelea repleta de rencor.
Las malas noticias se acumulan en la puerta de «Del Boy» Chisora, que ha perdido cuatro de los últimos cinco combates que ha disputado y el pasado lunes era suspendido indefinidamente por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) por los incidentes que protagonizó antes y después de su pelea con el ucraniano Vitaly Klitschko el pasado mes de febrero.
Chisora abofeteó durante el pesaje al campeón ucraniano y luego se enzarzó con David Haye, por entonces retirado, en rueda de prensa. Una reyerta que estuvo cerca de mandar a ambos en prisión pero que sirvió uno de las peleas más esperadas en Reino Unido. Al menos para los aficionados, ya que el el Consejo Mundial de Boxeo trató de evitar hasta el último momento la cita amenazando con revocar la licencia a cualquier promotor, entrenador o árbitro que participase.
La Junta Británica de Control de Boxeo (BBBofC, por sus siglas en inglés) negó otorgarle licencias a ambos boxeadores para el combate, que al final se desarrolló por el aval de la federación de Luxemburgo. Burocracia aparte, el público respondió. Más de 30.000 espectadores presenciaron en directo uno de los combates más esperados en el Reino Unido. Volvía al cuadrilátero «The Hayemaker».
Mensaje a Klitschko
Desde el inicio del combate Haye se mostró superior. Chisora no lograba responder a los ataques y tuvo que encajar un golpe brutal en el tercer asalto. La redención final llegó en el quinto. Haye endosó un gancho de izquierdas que hizo temblar al público entero antes de mandar a su rival a la lona con un derechazo. Chisora se levantó a duras penas, pero Haye no iba a perdonar. Dos ganchos de izquierda y tres derechazos más fueron su sentencia.
