miércoles, 18 de noviembre de 2009

¿Lo “toreará” Mayweather?


Edgard Tijerino
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A veces los hechos, aunque siempre testarudos, entran en una secuencia que produce imágenes e impresiones diferentes, transformando percepciones que parecían tener una base tan sólida. Después de lo que hemos visto en los últimos combates de Manny Pacquiao, la pregunta ¿qué puede pasar entre este embravecido multicampeón filipino y el astuto, veloz, punzante y hasta hoy invencible Floyd Mayweather?, dejó de tener una respuesta supuestamente precisa, abriendo ahora espacio para encendidos debates.
Confieso, yo estaba entre los creyentes que frente a un peleador tan versátil, desconcertante y agobiante, como lo ha sido Mayweather, el brillante filipino no tenía posibilidad de imponer su estilo, ni hacer valer su golpeo variado y consistente. Veía a Floyd muy próximo a la perfección, con los recursos necesarios para “torear” a Pacquiao, al estilo Manolete o Paquirri.
Ahora, no estoy seguro de eso. La percepción que tengo de ese combate, es diferente. Y no es que descarto a Mayweather como un peleador capaz de sujetar la impetuosidad destructiva de Pacquiao, porque eso sigue siendo algo viable, sino que el grado de dificultad ha crecido mucho para Floyd, y naturalmente, él debe estar claro de eso.
No sabemos qué tan grande es el corazón del norteamericano, porque ningún rival lo ha empujado hacia rincones de mayúscula exigencia, como vimos a Leonard, Durán, Hearns, Argüello, Chávez y De la Hoya, por mencionar algunos. Ésa es una asignatura pendiente para el formidable Mayweather, lo que le inyecta más intriga al probable gran duelo de 2010, que seguramente, superaría las marcas establecidas en taquilla y en pague por ver.
Pacquiao ha sido impactado violentamente, demostrando en cada caso, que puede absorber mucho poder, en tanto Mayweather no ha sido sometido a golpeos afloja cuellos o fragmenta mandíbulas, y el filipino, con esa agresividad sostenida, haciendo llegar golpes desde variados ángulos, combinando su potente y certero recto de derecha con esa izquierda relampagueante, que entra como arponazo, podría meterlo en el callejón de las complicaciones, provocando desajustes en su “engranaje”.
La admirable rapidez de piernas de Mayweather, puede permitirle manejar mejor los espacios en la estrechez del cuadrilátero, pero todo va a depender del trazado de su geometría ofensiva, buscando desequilibrar a Pacquiao, quitándole precisión a sus descargas. ¿Quién más inteligente buscando cómo hacer prevalecer su planteo?, es la clave que más interesa.
Ya no vemos a Mayweather empujando al filipino contra las sogas, volcándose con esas combinaciones de golpes habitualmente sin respuesta frente a otros peleadores, y decidiendo cómo golpear. No, que va. Floyd tendrá que buscar como controlar los frenos inesperados cargados de zarpazos y los escapes de Pacquiao, tarea que no ha realizado y que desgasta físicamente.
Mayweather es un peleador estupendo, no hay duda, ágil, creativo, imprevisible, pero sin experiencia bajo presión, un arte que Pacquiao, de audacia comprobada, domina. El combate debe ser un examen de maestría para los dos, el toro y el torero, alcanzando quizás esos niveles de salvajismo puro que nos proporcionaron Alexis Argüello y Aaron Pryor.

CUADRO DE CAMPEONES MUNDIALES, A 18 DE NOVIEMBRE DE 2009




PESO PESADO (+90,718 Kgs.)
WBC VITALI KLITSCHKO (UCR)
WBA DAVID HAYE (GBR)
IBF-WBO VLADIMIR KLITSCHKO (UCR)

PESO CRUCERO (90,718 Kgs.)
WBC GIACOBBE FRAGOMENI (ITA)
WBA GUILLERMO JONES (PAN)
IBF VACANTE
WBO MARCO HUCK (ALE)

PESO SEMIPESADO (79,378 Kgs.)
WBC JEAN PASCAL (CAN)
WBA GABRIEL CAMPILLO (ESP)
IBF TAVORIS CLOUD (USA)
WBO JUERGEN BRAEHMER (ALE)

PESO SUPERMEDIO (76,203 Kgs.)
WBC CARL FROCH (GBR
WBA MIKKEL KESSLER (DIN)
IBF LUCIAN BUTE (RUM)
WBO ROBERT STIEGLITZ (ALE)

PESO MEDIO (72,575 Kgs.)
WBC-WBO KELLY PAVLIK (USA)
WBA FELIX STURM (ALE)
IBF SEBASTIAN SYLVESTER (ALE)

PESO SUPERWÉLTER (69,853 Kgs.)
WBC SERGIO MARTÍNEZ (ARG)
WBA YURI FOREMAN (ISR)
IBF CORY SPINKS (USA)
WBO SERGEI DZINDZIRUK (UCR)

PESO WÉLTER (66,678 Kgs.)
WBC ANDRE BERTO (USA)
WBA SHANE MOSLEY (USA)
IBF ISAAC HLATSHWAYO (SUD)
WBO MANNY PACQUIAO (FIL)

PESO SUPERLIGERO (63,502 Kgs.)
WBC DEVON ALEXANDER (USA)
WBA AMIR KHAN (GBR)
IBF JUAN URANGO (COL)
WBO TIMOTHY BRADLEY (USA)

PESO LIGERO (61,234 Kgs.)
WBC EDWIN VALERO (VEN)
WBA-WBO JUAN MANUEL MÁRQUEZ (MEX)
IBF VACANTE

PESO SUPERPLUMA (58,966 Kgs.)
WBC HUMBERTO SOTO (MEX)
WBA JUAN CARLOS SALGADO (MEX)
IBF ROBERT GUERRERO (USA)
WBO ROMÁN MARTÍNEZ (PRI)

PESO PLUMA (57,152 Kgs.)
WBC ELIO ROJAS (DOM)
WBA CHRIS JOHN (INDO)
IBF CRISTÓBAL CRUZ (MEX)
WBO STEVEN LUEVANO (USA)

PESO SUPERGALLO (55,338 Kgs.)
WBC TOSHIAKI NISHIOKA (JAP
WBA-IBF CELESTINO CABALLERO (PAN)
WBO JUAN MANUEL LÓPEZ (PRI)

PESO GALLO (53,523 Kgs.)
WBC HOZUMI HASEGAWA (JAP)
WBA ANSELMO MORENO (PAN)
IBF YONNHY PÉREZ (COL)
WBO FERNANDO MONTIEL (MEX)

PESO SUPERMOSCA (52,163 Kgs.)
WBC- WBA VIC DARCHINYAN (ARM)
IBF SIMPHIWE NONGQAYI (SUD)
WBO MARVIN SONSONA (FIL)

PESO MOSCA (50,802 Kgs.)
WBC DAISUKE NAITO (JAP)
WBA DENKAOSAN KAOVICHIT (TAI)
IBF VACANTE
WBO OMAR NARVÁEZ (ARG)

PESO MINIMOSCA (48,987 Kgs.)
WBC EDGAR SOSA (MEX)
WBA BRAHIM ASLOUM (FRA)
IBF BRIAN VILORIA (USA)
WBO IVÁN CALDERÓN (PRI)

PESO PAJA (47,627 Kgs.)
WBC OLEYDONG SITHSAMERCHAI (THA)
WBA ROMÁN GONZÁLEZ (NIC)
WBO DONNIE NIETES (FIL)

Cotto no pega igual en 147 y debe retirarse


Por Elliott Castro Tirado CLARIDAD.

La paliza que le dio Manny Pacquiao a Miguel Cotto disipó algunas dudas que algunos todavía teníamos sobre la enorme calidad del gran campeón filipino, pero también levantó otras sobre el boricua.
Pacquiao revalidó sus extraordinarias habilidades, esta vez frente al rival más fuerte y pesado de su carrera hasta el momento. También demostró que al subir de peso, ganó en la fuerza de su pegada, contrario a lo que le sucedió anteriormente a algunos de los pegadores más temidos de la historia como Roberto “Mano de Piedra” Durán y los puertorriqueños Wilfredo Gómez y aun Félix “Tito” Trinidad por mencionar sólo a tres. Lo más increíble es que el filipino mantiene intacta su enorme velocidad de manos y piernas, así como sus relampagueantes reflejos y los ángulos poco comunes desde los que lanza sus envíos, que desde el inicio de su carrera han sido sus mayores virtudes y los que le han brindado todos los logros alcanzados hasta el momento.
Recordemos que Pacquiao debutó en 1996 en 107 libras y su primer título mundial fue en las 112 (mosca). Luego saltó las divisiones de 115 (súper mosca) y 118 (gallo), para coronarse en las 122 (súper gallo). Poco después añadió la correa de las 126 (pluma), las 130 (junior ligero) y las 135 (ligero). Cuando achocó espectacularmente al inglés Ricky Hatton se agenció el cetro de las 140 (junior welter). Aunque a Oscar de la Hoya lo venció de lleno en el peso welter, la coronación oficial de las 147 se produjo el sábado, a expensas de Cotto.

¿DEBE RETIRARSE COTTO?
El resultado del combate ha levantado importantes incógnitas sobre el puertorriqueño. La primera y la más lógica es si Cotto debe seguir peleando o debe retirarse. En relativamente poco tiempo ha ganado muchísimo dinero, que algunos estiman entre cuarenta y cincuenta millones de dólares y lo ha invertido sabiamente, lo que a pesar de la crisis económica, que es mundial, se ha multiplicado, de acuerdo a personas cercanas a su grupo de trabajo.
Cotto es un boxeador poco común, además de ser muy inteligente, es desconfiado con los que se le acercan y muy controlado en sus inversiones. Al igual que otros púgiles puertorriqueños de importancia, como Wilfredo Benítez, Tito Trinidad y ahora Daniel Santos, mantiene una cercana relación con su padre, con la diferencia de que aquellos eran fundamentalmente entrenadores, y en su caso, Don Miguel Cotto es su principalísimo socio financiero.
La historia está llena de boxeadores que han recibido golpes que le han afectado su salud permanentemente por haber extendido sus carreras, aun cuando sus facultades ya estaban en obvia decadencia. Para colmo de males, prácticamente todos, incluyendo a los mejores púgiles de todos los tiempos, han regresado a pelear después de haberse “retirado de forma final y firme”. Lamentablemente, es imposible determinar exactamente cuál es ese momento, aunque hay unos elementos que generalmente se repiten. Uno de ellos es la cantidad de golpes recibidos.
Además de tener su futuro económico garantizado, en sus últimos combates Cotto ha recibido muchísimo castigo. En repetidas ocasiones él ha afirmado que no estará peleando después de los treinta y hace unas semanas ya cumplió los 29. Así que si le tomamos su palabra, que hasta ahora ha sido firme, al extremo de ser considerado por muchos como terco, Miguel Cotto no peleará mucho más tiempo.
Aunque con 29 años, nadie podría considerarlo como “viejo”, Cotto, al igual que muchos otros púgiles estelares, está peleando desde niñito. Por cada asalto de verdad, un boxeador realiza muchísimos minutos más en el gimnasio, incluyendo todos los de guanteo, que en ocasiones resultan durísimos. Todo eso tiene un efecto acumulado en su cuerpo, del mismo modo que le sirve de preparación. Aunque el efecto en el físico es obvio por la definición muscular y aumento de capacidad aeróbica, no se puede medir con exactitud el daño (si alguno) de todas las horas en el gimnasio y otros aspectos de la preparación.
En casi todos los casos, el mayor efecto de los golpes casi siempre sale a relucir en toda su dimensión mucho tiempo después. De nada vale el dinero acumulado, la fama y el reconocimiento, si no hay salud para poder disfrutarlo. Ojalá el caso de Cotto no sea uno de ellos.

¿A DóNDE SE FUE LA PEGADA DE COTTO?
Aun en su aplastante derrota frente a Pacquiao, en los primeros asaltos Cotto demostró una vez más su fino boxeo con un poderoso y molestoso jab de izquierda y finos desplazamientos. Aunque mayormente se le ha reconocido como un poderoso pegador, el cagüeño siempre ha tenido excelentes recursos, a los que apeló para vencer por decisión a Shane Mosley, reconocido como el más técnico de toda la gama de talentosos púgiles de las divisiones medias de esta generación.
Por el contrario, Pacquiao, quien es más pequeño y más liviano, asimiló sin mayores dificultades todos los golpes limpios que el boricua le conectó, especialmente en los primeros asaltos. Eso me llevó a una incógnita aún mayor. ¿A dónde se fue la pegada de Cotto?
Al revisar su exitoso resumé, cuando llegó a su primera pelea titular, que fue en las 140, Cotto había ganado sus veinte peleas, y de ellas 17 antes del límite. Incluyendo en la que se coronó, él ganó por nocaut o nocaut técnico seis de las siete peleas de campeonato que realizó en la división junior welter.
En sus inicios en las 147 mantuvo la fuerza de su pegada, lo que le dio el cetro y sus primeras dos defensas antes del límite. La primera muestra de la limitación del efecto de sus golpes en el peso welter fue frente a Mosley, quien no sólo le aguantó todo, sino que lo dominó en fuerza. Repito que para poder vencerlo, el nuestro tuvo que recurrir a su boxeo técnico en los asaltos finales. Para este trabajo, no tomó en cuenta su siguiente victoria, que fue sobre Alfonso Gómez, quien era inferior.
Así llegamos a la pelea contra Antonio Margarito, también en 147. Aunque no tengo pruebas para sustentarlo, estoy convencido de que el mexicano también tenía yeso en sus guantes en ese pleito, como se le descubrió posteriormente. Sin embargo, es necesario que recordemos que en los primeros seis asaltos, Cotto lo conectó limpiamente, sin los efectos de peleas anteriores. Margarito no sólo no fue a la lona, sino que nunca estuvo en malas condiciones y ni siquiera sangró o se hinchó y eso no tiene nada que ver con sus guantes trampeados.
En su próximo combate frente a un rival de importancia, Cotto tampoco pudo lastimar a Joshua Clottey, aunque lo tiró temprano. Para ser justos con el boricua, desde el final del tercer asalto tuvo que combatir sangrando profusamente, producto de un cabezazo accidental. El resultado fue una victoria para el nuestro por decisión dividida, pues uno de los jueces vio ganar a su rival.
En resumen, en las 147 la pegada de Cotto no tiene la misma fuerza o al menos el mismo efecto en sus rivales, que cuando peleaba en las 140 y es muy difícil que pueda ganarse a los mejores, como Pacquiao, sólo con su fino boxeo a distancia. Por eso yo también creo que lo mejor que puede hacer es retirarse AHORA.

Consideran a Dallas para pelea de Pacquiao


Por CARLOS A. NAVA

El Cowboys Stadium sigue en la carrera para ganar la sede de la próxima pelea de Manny Pacquiao, si es que Floyd Mayweather Jr. acepta enfrentarlo, confirmó Top Rank.
Lee Samuels, director de relaciones públicas de Top Rank, empresa que maneja a Pacquiao, dijo el lunes que las negociaciones con Golden Boy Promotions, que representa a Mayweather comenzarán pronto y que la fecha contemplada es el 13 de marzo.
“Hoy es lunes, después de una gran pelea”, dijo Samuels vía telefónica. “Es imposible que hayamos ya negociado. Pero será pronto. Estamos muy interesados en que se haga esa pelea y el Cowboys Stadium es uno de los lugares probables”.
Bruce Trampler, encargado de armar los enfrentamientos de Top Rank, reveló a Al Día desde en octubre que si Pacquiao derrotaba al puertorriqueño Miguel Cotto en la pelea del sábado pasado, era muy probable que organizaran el combate contra Mayweather en el Cowboys Stadium.
Pacquiao noqueó en el décimo segundo asalto a Cotto para adueñarse del título Welter de la Organización Mundial de Boxeo; su séptimo campeonato en divisiones diferentes.
“Sí, el Cowboys Stadium sigue como un candidato fuerte”, dijo Samuels. “Pero otros estadios también están interesados, como el de la UNLV (Universidad de Nevada en Las Vegas) y el Yankee Stadium. Muchos estadios quieren la pelea”.
Samuels dijo que uno de los problemas de en la mayoría de los estadios es que el clima puede afectar la función o la transmisión por televisión, que en el caso de Pacquiao contra Mayweather sería de Pago Por Evento.
“La última vez (1998) que hicimos una pelea tan grande en un estadio fue en el Sun Bowl de El Paso con Óscar de la Hoya”, recordó Samuels. “Fue un día con demasiado viento que dificultó el espectáculo”.
“Pero hemos hecho muy buenas funciones en estadios con más de 100,000 personas…”, agregó Samuells en referencia a la pelea de Julio César Chávez en 1993 contra Greg Haugan en el estadio Azteca.
Una ventaja del Cowboys Stadium, con capacidad sentada de 82,000 aficionados para partidos de futbol americano, es que cuenta con techo retráctil, que permite abrirse o cerrarse de acuerdo a las condiciones climáticas.
“Todo mundo está impresionado con la instalación”, dijo Bob Arum del Cowboys Stadium a ESPN. “Los Cowboys tienen de ocho a 10 partidos y quieren eventos allá. Jerry (Jones, dueño de los Cowboys) hizo una gran inversión con la pantalla y el techo retráctil, sería un evento agradable”.
Versiones indicaron que otra posibilidad para Pacquiao en Arlington sería enfrentar al mexicano Juan Manuel Márquez, con quien peleó ya en dos ocasiones con una victoria y un empate como saldo.
“No creo que la gente quiera esa pelea otra vez, ya probé contra él”, dijo Pacquiao en Las Vegas el sábado a ESPN Deportes. “La gente quiere verme contra Mayweather”. Si sucede será una buena pelea”.
Los Cowboys también confirmaron el mes pasado que han tenido pláticas preliminares para la posible organización de la pelea.
“La gente de Top Rank me dijo en Las Vegas antes de mi pelea del viernes, que si ganaba en enero me van a meter en marzo a la función del Cowboys Stadium”, dijo el lunes el boxeador de Dallas Roberto Marroquín.
Marroquín (11-0, 8 ko’s), de Oak Cliff noqueó en el tercer asalto al kenyano Anthony Napunyi (14-8), el viernes pasado en Las Vegas

LA VERDAD SOBRE LOS TÍTULOS DE MANNY PACQUIAO


Pongamos negro sobre blanco en el asunto de los campeonatos mundiales en divisiones diferentes que ha conseguido el excepcional boxeador filipino Manny Pacquiao. Por mucho que lo pregonen el 90% de los medios de comunicación del mundo entero, incluida España, “Pac Man” ha logrado, hasta el momento, cinco títulos, en los pesos mosca, supergallo, superpluma, ligero y welter. Que no es poca cosa para quien empezó boxeando en los 48 kilos, cuando debutó el 22 de enero de 1995. Pero nunca, repito, nunca, y lo proclamamos con humildad pero también con firmeza, el filipino fue campeón en los pesos pluma y superligero, como se le viene atribuyendo, antes incluso de su última pelea ante Miguel Cotto.
Las fechas y los rivales de sus, repito, cinco coronas distintas, son las siguientes:
4-12-1998 Campeonato del Mundo Mosca WBC ante el tailandés Chatchai Sasakul.
23-6-2001 Campeonato del Mundo Supergallo IBF ante el sudafricano Chatchai Sasakul.
15-3-2008 Campeonato del Mundo Superpluma WBC ante el mexicano Juan Manuel Márquez.
28-6-2008 Campeonato del Mundo Ligero WBC ante el estadounidense David Díaz.
14-11-2009 Campeonato del Mundo Welter WBO ante el puertorriqueño Miguel Cotto.
Estos son los cinco hitos del palmarés que reúne 55 combates disputados, saldados con 50 victorias (38, antes del límite), 3 derrotas, ante su compatriota Rustico Torrecampo, contra el tailandés Medgoen Singsurat, y la última de ellas, frente al mexicano Erik “Terrible” Morales, en la primera pelea de la célebre trilogía entre ambos pugilistas.
Quede claro, por tanto, que esos, y no otros fueron sus logros con cinturones de los cuatro organismos reconocidos internacionalmente. En su pelea del 15 de noviembre de 2003, ante el azteca Marco Antonio Barrera, no había ningún título en juego. Por seguir aclarando, en su pelea contra Héctor Velázquez del 10-9-2005, solo había el título “Internacional” del WBC, es decir, un título regional, de la zona americana. Y contra Ricky Hatton, el pasado 2 de mayo del presente año, el único cinturón en juego, amén del simbólico de la revista “The Ring Magazine”, era de la IBO. Si metemos también a esta organización como referencia en el mundo del boxeo, como la IBA y otras, apaga y vámonos.
Por tanto, sin ánimo de pontificar ni nada parecido, sí considero que los informadores de boxeo estamos en la obligación ética y moral de aclarar este tipo de “errores”, aunque, curiosamente, la supuesta hazaña de Pacquiao, ha motivado que hablen de boxeo, quienes nunca lo hacen, por sistema. Pero, como dice el clásico, la verdad es la verdad, la diga Agamenón o su porquero. En definitiva, a Dios lo que es de Dios, y a “Pac Man” lo que es suyo.

JOSÉ MANUEL MORENO. BOXEO VELEÑO.