Dan Rafael
El año pasado, mi esposa Jenn y yo hicimos un mítico asado del 4 de julio en nuestro patio, e invitamos a muchos amigos del mundo del boxeo. Fue un gran éxito, y decidimos hacer uno nuevamente este fin de semana pasado. Esto es lo que pasó cuando la comunidad del boxeo se reunió para esta gran fiesta:
Todos se pusieron a conversar después de llegar, pero luego nuestra atención giró hacia la voz del gran Jimmy Lennon Jr., quien repentinamente se plantó en el medio del patio a gritar "Es hora de... COMER!!"
Michael Buffer, de pie junto a Jimmy, hizo su propio anuncio: "Señoras y señores, en la mesa azul tenemos ensaladas, maíz fresco y salsa de mango. Y en la mesa roja hay hamburguesas, salchichas y pollo".
Justo antes de que echáramos las primeras hamburguesas en la parrilla, Larry Merchant habló, lenta y dramáticamente, poniendo los sucesos de la tarde en su adecuado contexto: "¿Dejarán acaso estas hamburguesas un hermoso gusto en nuestras bocas para transformar esta fiesta en un glorioso deleite culinario, o se infectarán con el virus e-coli y nos derribarán por todo el conteo completo? Veremos qué pasa".
Manny Pacquiao aportó el entretenimiento musical, cantando "Sometimes When we Touch" una y otra vez.
Juan Manuel Márquez, quien trajo a la mesa una bebida que según él era limonada casera, estaba desesperado por compartir la escena y hacer un dúo con Pacquiao. Ambos venían de hacer dos tremendas actuaciones hace unos años, y Márquez había hecho campaña para cantar de nuevo con él en todos los asados anteriores.
Finalmente, este año se le cumplió el sueño a Márquez.
Pacquiao y Márquez no fueron los únicos en aportar algo de entretenimiento musical. Después de que Mike Tyson terminara de alimentar sus pájaros, él hizo una memorable versión de "Una noche en Bangkok."
Timothy Bradley Jr. dijo que había estado esperando venir a este asado durante meses, pero finalmente canceló su aparición en el último minuto. Amir Khan trató de convencerlo de que cambie de opinión, llegando a ofrecerle a Bradley la mitad de su comida y bebida (que hubiese sido la mayor cena en la vida de Bradley) pero aún así no fue suficiente para que él venga.
Cuando Bradley evitó venir al asado, Zab Judah ofreció aceptar la oferta de Khan y terminó conformándose con el 45 por ciento de su comida.
Bernard Hopkins no se mostró muy feliz de ser la persona más vieja de este asado, pero su estado de ánimo cambió cuando mi esposa le sirvió una gran tajada de cheesecake.
Andre Ward dominó todos los juegos que jugamos en el asado. Ninguno estuvo ni siquiera cerca. Bueno, excepto por el concurso de lagartijas. Ese lo ganó Hopkins.
Hubo un debate para ver si la carne estaba bien cocida o no, y entonces Jean Pascal sacó un termómetro de carne y comenzó a gritar "¡TOMEN UNA PRUEBA!!"
Floyd Mayweather Jr. decidió acortar sus vacaciones para poder participar. Sin embargo, noté algo de conmoción cuando llegué. Él estaba discutiendo y señalando vigorosamente al cuidador de piscinas antes de quitarle su iPhone.
Oscar De La Hoya, usualmente presente en todos estos asados, envió sus saludos y dijo que lamentablemente no podía participar este año.
Cristóbal Arreola dijo que éste fue su segundo asado en 13 días, pero que igual estaba comiendo liviano.
Freddie Roach causó un poco de distracción porque apareció siendo seguido por las cámaras, que lo siguieron toda la tarde.
Don King había tratado de que yo lleve el asado de este año al Pontiac Silverdome porque el dueño había ofrecido pagar por toda la comida sin importarle si iba alguien o no.
Fue bueno ver a Kelly Pavlik, quien tomó una bebida gaseosa mientras jugaba a los dardos.
Gary Shaw se puso un equipo de gimnasia diseñado especialmente con bolsillos adicionales para guardar cubiertos, pinzas y espátulas. Además de comida, él nos pidió que le diésemos una habitación gratis por esta noche. Cada tanto, cuando escuchaba ladrar al perro del vecino, él se ponía triste recordando a su boxeador perdido Alfredo Perro Angulo.
Bob Arum se pasó la mayoría del día dentro de casa mirando CBS, aunque Mark Taffet se mantuvo tratando de convencerlo de que cambie el canal a HBO.
Juan Manuel López y Yuriorkis Gamboa llegaron trayendo dos jarras de marinada arruinada que Arum insistió en que traigan.
Víctor Ortiz y Andre Berto se metieron en una épica batalla para ver quién come más torta. Entre ambos casi se atragantan cuatro veces, pero igual siguieron comiendo hasta el final.
Paulie Malignaggi se pasó la tarde dando cortes de pelo gratis a todos los que lo desearan.
Shane Mosley lució muy hambriento. Pero no creo que haya comido mucho, porque se pasó la tarde dándole la mano a todo el mundo.
Me sorprendió ver a Richard Schaefer y Todd duBoef sentados en la misma mesa, junto con el juez Daniel Weinstein.
Nonito Donaire prometió venir, pero a último momento decidió ir a otro asado. Pero escuché que cuando llegó ahí no lo dejaron entrar y se quedó sin comer.
Como siempre, Joe Cortez fue muy específico con su orden de comida: "recuerden, quiero mi hamburguesa cruda pero firme".
Miguel Cotto lució un poco decaído porque no tenía a nadie con quien bailar.
Lou DiBella se pasó la mayor parte del asado gritándole a todo el mundo sin ninguna razón aparente.
Un par de personas me preguntaron dónde estaba David Haye. Les expliqué que traté de invitarlo por Twitter, pero no pude porque él me bloqueó. Wladimir Klitschko me dijo que aún si hubiese invitado a Haye, él probablemente me hubiese dicho que venía, pero se hubiese excusado al último minuto.
Shannon Briggs, que realmente no se merecía estar en el asado en primer lugar, estaba causando problemas, así que Vitali Klitschko se dedicó a sacarlo del lugar de manera lenta y metódica.
El asado fue exactamente tal como Emanuel Steward predijo que sería.
Tomasz Adamek y Kathy Duva mantuvieron un perfil bajo, pero comieron muy bien.
Giovani Segura es un tipo pequeño, pero come como George Foreman.
Winky Wright no ha venido a ninguna de estas fiestas en años. Nadie parece saber bien dónde está.
Juan Diaz decidió posponer su primer semestre de escuela de leyes para participar de este asado.
Lucian Bute llegó solo, pero dijo que tenía unas 15.000 personas que querían venir con él.
Kermit Cintrón tuvo que irse temprano en una camilla después de tropezarse con una manguera en el jardín, cayendo en el patio y sin hacer ningún esfuerzo por ponerse de pie.
Kery Davis había invitado originalmente a Nobuhiro Ishida como su acompañante, pero tres días más tarde lo abandonó e invitó en su lugar a Erislandy Lara.
Roy Jones Jr. apareció letárgico antes de caer dormido en los brazos de Denis Lebedev cuando faltaban apenas 10 segundos para terminar el asado.
Se armó una pelea de comida, y estuvo bastante dura. En medio del caos, Gus Johnson gritó, "OH DIOS MIO!!! AL BERNSTEIN ACABA DE SER GOLPEADO POR UNA BOTELLA DE AGUA!! INCREÍBLE!!!" Luego, todos se sorprendieron de ver a James Kirkland cayendo al piso luego de ser golpeado por un bloque de gelatina.
Se puso bastante complicado cuando alguien derramó jugo de frutas sobre Dan Goossen, pero no se notó porque la mancha hacía juego con su traje rojo.
Luego de que Devon Alexander recibiese un golpe con un globo de agua, él decidió irse del asado porque sabía que tenía garantizada su invitación al próximo.
Sergio Martínez siempre disfruta estos eventos, pero desea ser invitado a dos asados por año en lugar de apenas dos.
Julio César Chávez Jr. ha participado en docenas de asados, pero este fue el primer asado serio e importante de su vida.
Ken Hershman dijo que el asado estuvo estupendo pero que no tenía tiempo de quedarse. Todavía tenía que visitar otros cinco asados, incluyendo los de Carl Froch y Glen Johnson.
Para cuando llegó Jim Lampley, la puerta del patio estaba cerrada. Pero estaba muy decidido a unirse a nosotros, y comenzó a golpear pum pum pum pum pum sobre la puerta hasta que alguien le abrió el paso.
Floyd Mayweather Sr. dijo que no quería comer nuestra comida. En lugar de eso, él se detuvo en el Taco Bell de la esquina cuando se fue.
Roger Mayweather no lució feliz. Él dijo que nosotros no sabíamos nada de hacer asado. Y además dijo que Angelo Dundee no sabía nada de boxeo tampoco.
Espero que Mikkel Kessler esté bien. Él entró corriendo a la casa apenas le llegó el humo a los ojos.
Erik Morales no participaba de nuestros asados en muchos años, por eso fue bueno tenerlo de regreso y luciendo tan bien.
Al Haymon vino, pero luego se rehusó a hablar con nadie. Sin embargo, su amigo Sam Watson, fue muy amigable. De hecho, él terminó en todas las fotos que se sacaron ese día.
Artie Pelullo trajo cigarros, vino y albóndigas, pero solamente porque yo acepté dejarlo ser el coanfitrión del próximo asado el año que viene.
Todos se pusieron contentos al ver que Robert Guerrero vino con su esposa, Casey.
Luego de que Harold Lederman le diera una mordida a un costillar de cerdo, él exclamó, "Jim, te digo que estas costillas están especiales. La mezcla de especias y salsa es tan impresionante que no creo que nada pueda derrotarlas. Con esta calidad y esta jugosidad, no hay dudas que es la mejor comida posible".
Antonio Margarito trajo su propia salsa parrillera. Sin embargo, él dijo que Javier Capetillo se la había preparado y que él no tenía idea de lo que había ahí adentro.
John Ruiz fue muy amigable. Él saludó a todos con un gran abrazo.
Fue bueno ver a Mark Greenberg y Roy Langbord en casa. Espero verlos en todos los asados de los próximos años.
Andre Dirrell se lo perdió. No podía recordar la dirección de mi casa.
Saúl Canelo Álvarez lo pasó muy bien, a pesar de que no está en edad de poder tomarse una cerveza.
Tommy Zbikowski llegó con mucha fanfarria, pero se quedó apenas unos minutos.
Antonio Tarver tenía otros planes. Él pensó que mejor sería probar ese asado al que fue invitado en Australia.
Odlanier Solis estaba parado en un rincón cuando su rodilla cayó y él dejó caer su plato de comida.
Recibí una nota de Gilberto Mendoza Jr. declarando mi asado como el Asado Oficial del Fin de Semana. Me enteré más tarde que le envió la misma nota a un tipo que hacía un asado en Japón y a alguien que tenía otro asado en Panamá.
José Sulaimán no fue invitado, pero lo atrapé en la cerca trasera cobrándole entradas a los invitados. Su hijo Mauricio Sulaiman tampoco estaba invitado pero apareció ahí de todos modos. Él declaró que el asado estaba "en receso" y luego entró en mi cocina después de la fiesta para exigirme que le regale el delantal que usé para hacer la parrillada.
Chad Dawson fue un excelente invitado, pero a nadie pareció importarle.
Año tras año, Sampson Lewkowicz llega con un peleador que nadie conoce, pero para cuando el asado termina ese peleador es la persona más popular de la fiesta.
Evander Holyfield ya no debería venir desde hace años, pero todavía sigue apareciendo. Al menos trajo orejones, aunque estaban todos por la mitad.
Abner Mares llegó un poco molesto porque Joseph Agbeko lo dejó plantado. Pero Agbeko prometió venir con él al próximo asado.
Joshua Clottey no apareció después de que su auto golpeara con un pozo en camino al asado.
Thomas Dulorme participó del asado. Podría ser el primero de muchos.
Richard Plepler y Michael Lombardo usualmente no vienen a reuniones de boxeo, pero ellos expresaron un serio interés en conocer el paisaje actual del deporte y preguntaron si podían unirse a nosotros. Fue un placer tenerlos aquí. Ellos parecieron disfrutar mucho, pero fueron muy claros a la hora de elegir lo que querían comer.
Cuando el día terminó, Max Kellerman lo puso todo en perspectiva: "El asado de Rafael fue un espectáculo de texturas, aromas y gustos. La combinación de carne, pollo y vegetales asados será motivo de conversación en peluquerías y oficinas. El asado de este año se recordará como un clásico de la era moderna".
