DAN RAFAEL ESPN.com
Pasaron varios días desde que el rey libra-por-libra Manny Pacquiao costeó a una aburrida decisión unánime ante Shane Mosley en una pelea terrible.
Que Pacquiao ganara con facilidad contra el una vez imponente Mosley, quien tiene 39 años y está lejos de estar en su mejor momento, no fue una sorpresa. La sorpresa fue que fuera tan mala. [Yo esperaba que la pelea fuera por lo menos decente].
Simplemente, Mosley ya no es capaz de competir con los mejores, especialmente contra oponentes rápidos y poderosos. La mayoría de nosotros sabíamos eso cuando se armó la pelea. ¿Entonces por qué nos sorprendemos? ¿Acaso no vimos lo malo que fue Mosley en sus dos peleas anteriores?
Aquellos que pagaron dinero para ver el Pay-Per-View, [muchos de los cuales he escuchado] deberían haberse dado cuenta de una cosa: No hay garantía de una gran pelea, o incluso de una competitiva.
Puede que recuerden que yo no era un fan de la pelea cuando se anunció en diciembre, y yo les advertí. De hecho, el título de la columna que escribí decía: "Pacquiao, Mosley una mala pelea para el boxeo". Y así, cinco meses más tarde, tuvimos un evento para el olvido como resultado de una promoción masiva. Una terrible decepción -- pero una no tan inesperada.
Top Rank, que sobresale en la organización de grandes eventos, hizo un trabajo excelente promocionando la pelea. Lo único negativo fue la propia pelea -- en papel y en el ring.
La alianza de Top Rank con Showtime y su cadena hermana CBS -- la clave para el acuerdo para quitar a Pacquiao de HBO y entregarlo a Showtime -- se suponía iba a crear una mayor conciencia de la pelea y del boxeo en general. Probablemente haya hecho eso. Pero con una pelea como esta, ¿Es eso algo bueno?
Top Rank estaba encaprichado con la idea de que el mercadeo pesado y la promoción de CBS, que está disponible en unos 115 millones de hogares y es la red más vista en los Estados Unidos, sería importante para el futuro del boxeo y tal vez lo llevarían de nuevo a la tierra prometida -- peleas en vivo en la televisión abierta.
CBS hizo su parte. Promocionó la pelea en su mejor horario. La promocionó con fuerza durante el torneo de baloncesto de la NCAA. Y sacó al aire tres de los cuatro episodios de la serie reality de Showtime, "Fight Camp". Dos de los episodios incluso fueron transmitidos en horario estelar.
Pero el resultado fue una pelea abismal, por lo que si ustedes fueran fans casuales atraídos por la publicidad y hubieran visto esa pelea terrible, ¿querrían comprar más boxeo en el futuro? Probablemente no, y esa es la parte desafortunada de todo el asunto.
Sin embargo, no puedo culpar del todo a Bob Arum de Top Rank por eso. Ahora, no me gustó el hecho de que eligiera a Mosley para la pelea, porque yo esperaba una victoria unilateral de Pacquiao. Lo que no esperaba -- y estoy seguro que Arum no lo esperaba tampoco -- era que Mosley pusiera el menor esfuerzo de su carrera en esta pelea. Fue incluso peor que su derrota de hace un año ante Floyd Mayweather Jr. en el mismo ring del MGM Grand Garden Arena. Después de sufrir un derribo limpio en el tercer asalto ante Pacquiao, Mosley básicamente se rindió. Él no quería ponerse en peligro. No estaba dispuesto a caer tratando de ganar.
"Yo no iba a tomar ese tipo de riesgos", dijo Mosley después de la pelea, un insulto a todos los que pagaron por ella.
El instinto de conservación era mucho más importante que ganar, por lo que Mosley tomó su mínimo de $ 5,000,000 y humilló a sus fanáticos y a todos los aficionados que podrían haberse convertido en serios fans de haber dado una pelea memorable.
Cuando me enteré el miércoles por la Comisión Atlética de Nevada que Mosley y Pacquiao [así como Jorge Arce y Wilfredo Vázquez Jr., quienes dieron una tremenda pelea de título de peso pluma Jr. en otra pelea de la catelera], tuvieron resultados limpios en sus análisis por drogas, bromee de que estaba sorprendido que el análisis de Mosley no hubiera dado positivo por tomar pastillas para dormir.
Además del vergonzoso esfuerzo, Mosley pasó la mayor parte de la pelea queriendo chocar guantes con Pacquiao. Eso está bien antes de la pelea, en el caso de una falta legítima accidental y después de la pelea. Me gusta que sean buenos deportistas, pero sean amigos después, y no durante la pelea. Fue como ver una sesión de sparring.
Bernard Hopkins, quien ha sido amigo de Mosley y comparte al entrenador Naazim Richardson, estuvo hablando por teléfono el martes con miembros de la prensa antes de su revancha en la pelea de campeonato de peso pesado con Jean Pascal la próxima semana en Montreal. Cuando surgió el tema de la pelea Pacquiao-Mosley, Hopkins no fue tan lejos como para decir que Mosley debiera retirarse. Después de todo, Hopkins tiene 46 y muchos han pedido que se retire.
"Nunca voy a volver a decir que otro boxeador debe retirarse", dijo. "Esa es una elección individual. Hay un montón de gente que debiera retirarse. La gente estaba pidiendo mi cabeza cuando pelee con Roy Jones Jr. [en una pelea terrible en abril de 2010]. Nunca seré un tipo que diga que otro boxeador debe retirarse. Esa es una elección individual".
Sin embargo, Hopkins dijo que Mosley esencialmente dejó de tratar de ganar después de sufrir la caída.
"Él no peleó el sábado pasado de la forma que pensé que iba a pelear y la forma en que dijo que iba a pelear", dijo Hopkins. "Se rindió a comienzos de la pelea. Después de la caída, pasó algo y se entregó después de eso".
En cuestión de tomar partido con la falta de esfuerzo de Mosley, Hopkins señaló específicamente a todo el toque de guantes. Mosley parecía preferir ser amigo de Pacquiao que su oponente.
"¿Por qué seguía tocando guantes todos los rounds?", dijo Hopkins. "Esa es una señal de sumisión. Es parte del lenguaje corporal de la sumisión el alabar a un muchacho y tratar de ser amigos. Cada vez que Shane salía, quería tocar guantes y darse la mano y un abrazo. Al final estamos peleando. Eso es lo que hacemos. El árbitro dice: 'dénse la mano y salgan a pelear'. Él no dice: 'dénse la mano en cada round'. Eso está en uno".
Así que la promoción de la pelea tarareó de manera impresionante y sin duda marcará una tasa de siete figuras de PPV.
Pacquiao podrá no haber ido detrás de Mosley tan fervientemente como muchos de nosotros hubiéramos querido, pero anotó el derribo y dominó, a la vez lidiando con calambres en la pierna izquierda.
Showtime y CBS hicieron un trabajao excelente ayudando a promover el evento.
Top Rank también hizo su parte muy bien, incluyendo la puesta de una sólida cartelera no principal y creando una experiencia espectacular para aquellos que estuvieron presentes. La calidad de la producción, iluminación y música produjeron uno de los mejores ambientes para una pelea grande que jamás haya experimentado. De hecho, es mi opinión que las caminatas al ring fueron las dos mejores que haya visto.
Así que todos hicieron su trabajo para hacer que sea la mejor noche posible. Todos a excepción de Shane Mosley.
