ÁLVARO CARRERA
AS.com
Jorge Linares confirmó en Inglewood (California) que está un
paso por encima en el peso ligero.
Venia de doctorarse ante Crolla y frente a
Luke Campbell se confirmó como la realidad que es. Sólo Mikey García (37-0, 30
KO) parece que pueda hacerle frente. El estadounidense será su próximo rival
con sus dos cinturones en juego: el WBA de Linares y el WBC de García. Se
espera un gran combate al que Linares accedió después de otra lección sobre
como afrontar un combate, pese a ganar por decisión dividida (115-112, 114-113
y 113-115). Las puntuaciones siguen dando que hablar.
El venezolano salió a estudiar a su rival, quien con mayor
envergadura le mantenía alejado. Poco a poco, gracias a su movilidad, Linares
fue recortando la distancia con Campbell, el británico estaba incómodo y el
campeón lo vio. Con una derecha le abrió la guardia y con la izquierda lo envió
a la lona en el segundo asalto. Resistió el excampeón olímpico, pero la pelea
se ponía del lado del venezolano. Buscó Linares finalizar, pero Campbell
resistió.
Linares comenzó a hacer gala de sus mejores movimientos y
contragolpeó duro. Campbell fue más agresivo y aunque el cuarto y quinto asalto
no se los llevó, en el sexto todo cambió. El británico sabía que debía apretar
y se con todo a por Linares. Vivió los mejores momentos del combate, pero le
faltaba contundencia para dañar a Linares, quien a partir del décimo asalto
volvió a encontrar su boxeo.
Décimo y undécimo asalto fueron las rondas donde 'el Niño de
Oro' buscó noquear a Campbell, que estaba desesperado y erraba. No llegó esa
mano, pero sí Linares hacía lo necesario para puntuar. Con el combate resuelto,
el venezolano comenzó a girar sobre el ring y anuló a su rival. Al final las
cartulinas tuvieron que decidir, lo hicieron con justicia... y polémica. El
único juez que dio vencedor a Campbell era británico.
Pese a ello Linares no se quejó: "Decían que era un
peleador fácil, pero no lo es, por algo es campeón olímpico. Me sentí muy bien
durante los doce rounds. No pude lograr el nocaut, que lo estaba buscando,
porque es un boxeador que se mueve bien, que sabe caminar en el ring, no era
fácil conectarle. En la esquina me decían que apretase que estaba siendo una
pelea cerrada por los golpes que me había dado", aseguró tras lograr su
decimosegunda victoria consecutiva. Ahora le espera un invicto y un gran
cartel, lo que quería. Los fans ya esperan el García-Linares, el ligero se
viste de gala.