Hablar rudo es algo que se hace en la mayoría de los deportes, y el boxeo no es la excepción. Muhammad Ali era conocido, claro está, por crear tormentas de bombas verbales contra su oponente para desquiciarlo y ayudar a promover sus peleas.
Hoy en día tenemos a Ricardo Mayorga, el ex campeón de peso welter que realizó suficientes comentarios contra sus oponentes como para llevar un libro.
James Toney y Bernard Hopkins son conocidos por haber destruido a uno o dos oponentes verbalmente fuera del ring además de destruirlos con los puños dentro del mismo.
Y Hasim Rahman tiene una velocidad y astucia verbal que pocos tienen. Pero por sobre todos estos boxeadores previamente mencionados tenemos a Edison Miranda, el luchador colombiano que entusiasmó a los fans con su poder dentro del ring y con sus palabras fuera del mismo.
Por ejemplo: "No pude evitar reírme cuando me enteré a quien había elegido como próximo oponente. Ayala es un muchacho que perdió no sólo una vez sino dos contra David Banks, un muchacho al que le hice comer las cuerdas con un solo golpe. Para empeorar las cosas, pelea en su tierra contra un montón de vagabundos --un lugar donde el árbitro lo trata como si fuera su propia hija. Si tuviera los cojones, vendría hasta America para pelear contra mí. Yo lo destruiría".
Vamos Edison, dinos como te sientes verdaderamente.
Ese fue Miranda (30-2, 26 KOs) destrozando al titular alemán de los medianos Arthur Abraham (26-0, 21 KOs) antes que defendiera su título contra Elvin Ayala en marzo. Miranda consiguió lo que quería porque Abraham está en los Estados Unidos para enfrentarlo en una revancha en la categoría de 166 libras el sábado por la noche en el Hard Rock hotel en Hollywood, Fla.
También en la tarjeta: el mediano Giovanni Lorenzo (26-0, 18 KOs) se enfrenta al titular de medianos junior Raúl Márquez (41-3, 29 KOs) en una pelea eliminación. El ganador obtiene el pase para pelear contra Abraham, quien planea regresar a la categoría de medianos para defender su título sin importar el resultado del evento principal.
Miranda no se echó atrás en la batalla previa a la pelea diciendo "Abraham está cometiendo el peor error de su vida. La última vez le rompí la mandíbula cuando yo estaba débil y con problemas para llegar a las 160 libras. En la categoría de supermedianos estoy tan fuerte que da miedo. Me sorprendería que el pueda llegar a los cinco rounds. Es un buen boxeador, pero no voy a dudar en destruirlo. Este es un negocio de hombres y yo no sé si el siga perteneciendo a este negocio. Abraham me hizo esperar casi dos años para mi revancha y el sábado voy a hacerle pagar por cada minuto que tuve que esperar".
Abraham está al tanto de las constantes habladurías de Miranda pero no se interesa demasiado en ellas.
"¿A alguien realmente le importa lo que diga Miranda? Debería conseguirse un psicólogo y contarle sus problemas a el", dijo Abraham. "Si yo hubiera fallado en derrotar a un boxeador cuya mandíbula fue quebrada dos veces, me hubiera retirado de inmediato y me hubiera conseguido un trabajo como vigilante nocturno".
Naturalmente, Miranda tuvo una respuesta para Abraham: "Te sugiero que te vayas comprando el uniforme, porque vas a estar trabajando de vigilante nocturno hacia fin del verano. Creo que es el trabajo perfecto para ti, porque cuando algo sucede no tienes que hacer nada tu mismo --sólo puedes llamar a que alguien venga a ayudarte. En nuestra pelea demostraste ser bueno para eso".
A pesar de contar con una rotura de mandíbula en dos partes durante el cuarto round de su pelea el 23 de septiembre de 2006, Abraham ganó una controversial decisión contra Miranda en Alemania.
¿Imaginen si Miranda hubiera sufrido de una lesión de mandíbula? Nos hubiéramos perdido citas gloriosas. Aquí les presentamos algunas de las mejores citas de Miranda:
En marzo, Miranda y su equipo estaban intentando establecer una pelea con el ex titular de los supermedianos Mikel Kessler. Cuando las negociaciones se truncaron, Miranda dijo lo siguiente:
"No me sorprende que Kessler haya desaparecido cuando aparecí yo, un oponente de mayor envergadura. Le deseo buena suerte en sus futuros trabajos como modelo, actor, o jugador de video juegos, porque es evidente que ya no es un boxeador. Quiero la pelea contra Kessler, los fans la quieren, pero el no quiere dar un paso al frente y pelear contra los mejores. ¿Guerrero Vikingo? Kessler habla como un boxeador, tiene los tatuajes de un muchacho rudo, pero cuando se trata de poner las cartas sobre la mesa no está".
Unos días más tarde, las partes llegaron a un acuerdo y luego Kessler se retiró sin explicación alguna, realmente irritando a Miranda:
"No me había esperanzado demasiado porque se que Kessler me tiene miedo. Le dimos todo lo que quería y sin embargo no la tomó. De hecho, lo único que no le dimos es la oportunidad de atar mis manos a mi espalda mientras peleamos, pero a esta altura estoy dispuesto a conceder eso porque se que si lo asustó con un simple 'boooo' se va corriendo hacia el otro lado del miedo".
¿A alguien realmente le importa lo que diga Miranda? Debería conseguirse un psicólogo y contarle sus problemas a el.
--Arthur Abraham
En mayo de 2007, Miranda perdió contra Kelly Pavlik en la tarjeta no principal de la defensa del título de medianos de Jermain Taylor contra Cory Spinks. Pero Miranda ya se había cruzado con Taylor antes de la pelea, y esto fue lo que dijo:
"Estoy preocupado por que los fans de Memphis estén pagando mucho dinero por las entradas para ver nuestro show el 19 de mayo porque ellos piensan que van a ver una pelea de campeonato de medianos cuando en realidad sólo estás peleando contra otro mediano junior. Entonces estoy dispuesto a mover mi pelea con Pavlik al evento principal, y puedes estar en mi tarjeta no principal. De esta manera los fans van a poder disfrutar del show por el que pagaron".
"Voy a conceder esto a Taylor --tras haber vencido a Kassim Ouma, y si puede vencer a Cory Spinks, definitivamente será el mejor mediano junior del mundo. Desafortunadamente para el resto de los que quedamos, supuestamente el es el campeón de los medianos".
Miranda también despotricó en contra de Pavlik, quien lo noquearía en el séptimo round de su eliminatoria por el título:
"No voy a detenerme hasta que Kelly Pavlik esté en el piso. Si es lo suficientemente estúpido como para levantarse, va a ser seriamente lastimado. Una vez que haya noqueado a Pavlik será hora de pelear contra Taylor. Ojala yo me quite los guantes y me retire del ring antes de empezar a pelear porque sino voy a ser el primer boxeador de la historia en lograr dos nocauts en la misma noche".
En marzo de 2007, Miranda, quien adoptó San Juan, Puerto Rico, como su pueblo, debía pelear contra Allan Green en la tarjeta no principal de Miguel Cotto:
"Estoy muy contento de dar lugar a un show para todos mis amigos en Puerto Rico. Los voy a retribuir al darles una buena pelea. De todas maneras les advierto que acuesten a sus hijos a dormir temprano porque lo voy a destruir brutalmente y no quiero asustar a los más pequeños".
En diciembre de 2006, Miranda anotó un espectacular nocaut de primera ronda contra WIllia Gibbs y tomó la oportunidad de atacar a Abraham:
"Una vez terminada la pelea pensé que había una estampida, pero lo que estaba escuchando era a Abraham y a su equipo correr lo más lejos posible que podían de mi. Se que me tiene miedo".
¿Acaso estas citas son reales?
"Son 100 por ciento ciertas. Ese es Edison", dijo el co-manager Steve Benbasat. "Tiene una personalidad muy fogosa y dice siempre lo que se le cruza por la cabeza. Es muy gracioso y por momentos puede ser intimidante. No se averguenza de nada de lo que dice. Está promoviendo la pelea el mismo".
Leon Margules, el director ejecutivo de Warriors Boxing, dijo que Miranda tiene una personalidad diabólica y que muchos de sus comentarios son hechos a propósito.
"Es su personalidad. Es un muchacho de la calle", dijo Margules. "Hace muecas a veces de las que no sabes que interpretar, si te quiere pegar o si te va a dar un abrazo. Nunca se cuando habla en serio o cuando está bromeando".
Miranda dice que no bromea con lo que dice, pero que también se divierte a cuestas de eso.
"Hablo acerca de mis oponentes porque así me siento con respecto a ellos, pero también estoy haciendo mi trabajo", dijo Miranda. "Hago mi trabajo como un hombre de negocios y lo hago porque amo mi trabajo. Las palabras salen de adentro mío. La gente se lo puede tomar como una broma pero yo no lo hago de broma. Para mi no es una broma".
Bien dicho.
