lunes, 27 de febrero de 2012

UN REPASO A LO MEJOR DE LA SEMANA


DAN RAFAEL ESPN.com

Sábado en Stuttgart, Alemania
Alexander Povetkin G12 Marco Huck
Peso pesado
Retiene un título pesado
Tarjetas: 116-113, 116-112, 114-114
Récords: Povetkin (24-0, 16 KOs); Huck (34-2, 25 KOs)
Comentario de Rafael: Rafael's remark: Tal como lo sabe cualquier persona que siga de cerca el boxeo, la división de peso pesado no ha sido tan buena últimamente. Los hermanos campeones Klitschko son fuerzas dominantes que usualmente aplastan a sus oponentes ya sea con grandes nocauts o con amplias victorias por decisión. Pero si se saca a los hermanos de esta ecuación, hay algunas peleas interesantes para hacerse en esta división, y ésta fue una de ellas. En los papeles, lució como una pelea entretenida. En el ring, Povetkin y Huck produjeron un mini-clásico y una de las mejores y más excitantes peleas de peso pesado en años, y los fanáticos estadounidenses pudieron verla en vivo en la cadena Epix.
Povetkin, de 32 años y oriundo de Rusia, es un ex medallista olímpico en el peso súper pesado en 2004 que ahora pelea con base en Alemania. Él ganó un título de segundo nivel (el ridículo título "regular" de la AMB) en agosto al superar por puntos al ex campeón Ruslan Chagaev en una pelea muy dura. Pero después de que Povetkin hiciera su primera defensa ante un peleador del montón de 42 años como Cedric Boswell en diciembre, Huck, campeón reinante en el peso crucero que es parte del mismo armazón promocional que Povetkin, se presentó en la conferencia de prensa posterior a la pelea. Él pidió pelear con Povetkin, y tres semanas más tarde esa pelea se hizo. Así, Huck, de 27 años y nacido en Serbia residiendo en Alemania, subió al peso pesado para intentar transformarse en el tercer campeón crucero en lograr un título de peso pesado. Los otros fueron Evander Holyfield, ex campeón indiscutido en ambas divisiones, y David Haye, que fue campeón reconocido en el peso crucero y que también se adjudicó una faja de peso pesado. Pero mayormente los pesos cruceros no han tenido mucho éxito en sus campañas de peso pesado.
Pero Huck se mereció ganar esta pelea según muchos observadores. Fue un combate cerrado y muy físico, pero él terminó quedándose con la parte más flaca de una decisión mayoritaria. No debería ser llamada un robo porque Povetkin ciertamente tuvo sus momentos en una pelea cerrada y competitiva. Pero Huck sacudió visiblemente a Povetkin en múltiples ocasiones. Él lo castigó con derechas por encima de la defensa y estuvo enfrente suyo durante toda la pelea. Francamente, Povetkin no lució como si estuviese en la mejor forma posible, y admitió luego de que había tomado a Huck a la ligera. Povetkin también estuvo sin su entrenador Teddy Atlas, de quien se separó luego de un desacuerdo sobre dónde deberían entrenar, si en los Estados Unidos (para que Atlas pudiera acomodar su calendario como comentarista de ESPN, algo que Povetkin había prometido) o Rusia. Atlas fue reemplazado por Alexander Zimin.
El réferi Luis Pabón hizo un trabajo horrible, porque continuamente separaba a los peleadores aún cuando no estaban trabados entre sí. Él nunca los dejó pelear por dentro, lo cual probablemente le costó caro a Huck porque él fue uno de los que estaba haciendo daño cuando ambos estaban peleando de cerca. Povetkin continuamente se inclinaba sobre el lado derecho de Huck, pero Pabón terminaba siempre advirtiendo a Huck por golpear a Povetkin en la nuca. Pabón aparentemente no conoce la regla que dice que un peleador no puede doblarse hasta quedar por debajo de la cintura de su oponente, algo que Povetkin hizo constantemente. Povetkin comenzó bien y controló los tres primeros asaltos antes de que Huck regresara atropellando en el cuarto round para dar vuelta la historia. Su mayor momento llegó a finales del séptimo round cuando él tuvo a Povetkin muy lastimado antes de que sonara la campana del final del round. Más tarde, Huck estaba sangrando por cortes bajo sus ojos y Povetkin estaba exhausto, con su boca abierta.
Fue una fiera batalla, digna de una revancha. Huck, quien lució bien en su nuevo peso aún cuando fue superado en peso por 20 libras, dijo que pensó que ganó y quería una revancha. Es algo ciertamente posible, pero Povetkin primero tiene que enfrentar al ex campeón Hasim Rahman en una absurda defensa obligatoria. Mientras tanto, Huck tiene esta semana para decidir si se quedará con su título de peso crucero o lo dejará vacante para quedarse en el peso pesado. Si decide quedarse en el peso pesado habrá al menos algunas peleas interesantes y lucrativas en su futuro. Si regresa al peso crucero, tiene obligado pelear con el ganador del combate del sábado pasado por el título interino, entre Ola Afolabi (a quien Huck ya derrotó) y el ex campeón Valery Brudov.

Sábado en St. Louis
Devon Alexander G10 Marcos Maidana
Peso welter
Tarjetas: 100-90 (dos veces), 99-91
Récords: Alexander (23-1, 13 KOs); Maidana (31-3, 28 KOs)
Comentario de Rafael: Luego de que Alexander ganara un título welter junior en 2009, él lucía como una de las estrellas ascendentes del boxeo. Sobreviviendo en una de las peores zonas de la ciudad de St. Louis, él logró superarse y llegar a la cima, unificando títulos con un enorme nocaut sobre Juan Urango en 2010. Pero todo ha sido un largo y duro camino desde entonces hasta llegar a esta dominante actuación sobre Maidana. Después de la pelea ante Urango, Alexander tuvo problemas para lograr la victoria ante el ex campeón Andriy Kotelnik en lo que muchos vieron como una decisión localista en St. Louis. Luego, Alexander esencialmente abandonó en su pelea ante Timothy Bradley en una unificación en enero de 2011 y perdió por decisión técnica en 10 asaltos. Y en el regreso de Alexander, él se mostró endeble al lograr otra controvertida decisión dividida en St. Louis, esta vez ante Lucas Matthysse.
Alexander, un zurdo de 25 años, atribuyó sus problemas en las peleas recientes a sus problemas para lograr el límite de las 140 libras del peso welter junior. Por eso subió al peso welter para chocar con Maidana, de 28 años y oriundo de Argentina. Él es uno de los pegadores más temibles del boxeo y tiene en sus manos un título de peso welter junior, pero también quería hacer un intento en el peso welter. Por eso, Golden Boy hizo esta interesante pelea que encabezó el debut de temporada de la serie de HBO Boxing After Dark. Entonces, ¿qué terminaría imponiéndose? El rápido, ágil estilo zurdo de Alexander o el estilo fajador aguerrido de Maidana?
Resultó ser que los rumores de la caída de Alexander fueron demasiado exagerados, porque él terminó jugueteando con Maidana para ganar en una virtual decisión aplastante. Él evitó las grandes bombas mientras que Maidana nunca pudo encontrar su ritmo. Eso fue así porque Alexander boxeaba en círculos alrededor suyo y se restablecía como un boxeador de cuidado en una nueva división en la que lució muy fuerte. A pesar de que Maidana le abrió un corte a Alexander sobre el ojo derecho en el tercer asalto, eso fue casi todo lo que pudo lograr. Ganando ya claramente el combate, Alexander conectó una clara izquierda al rostro de Maidana en el sexto round, y él cayó de costado, pero el réferi Steve Smoger, uno de los mejores del mundo en su oficio, simplemente se lo perdió y lo declaró como resbalón, quizás porque Alexander terminó empujando a Maidana hacia abajo mientras caía. Pero fue definitivamente una caída. Afortunadamente no hizo ninguna diferencia en el resultado de la pelea.
Con esta victoria, Kevin Cunningham, manejador y entrenador de Alexander, dijo que tiene intenciones de enfrentar a continuación al ganador de una revancha el 23 de junio entre los ex campeones de peso welter Víctor Ortiz y Andre Berto. Maidana, mientras tanto, todavía tiene su título de las 140 libras y seguramente regresará a esa división, y continuará defendiéndolo. Todavía hay combates atractivos para él en ese peso, porque es un peleador realmente atractivo, y esta derrota debería ser apenas una mancha en su currículum y nada más. Idealmente debería enfrentarse al ganador del choque del 23 de junio entre Humberto Soto y su compatriota Matthysse. Cualquiera de las dos sería una pelea llena de acción.

Adrien Broner KO4 Eloy Pérez
Peso ligero Jr.
Retiene un título ligero Jr.
Récords: Broner (23-0, 19 KOs); Perez (23-1-2, 7 KOs)
Comentario de Rafael: Broner sí que es un tipo vistoso, ¿o no? Él llegó al ring vistiendo lentes de sol y joyas mientras rapeaba. Él tuvo a su padre a su lado peinándolo antes y después de la pelea, en uno de los trucos publicitarios más entretenidos que tiene el deporte. Pero dejemos de lado su histrionismo. Broner respalda todo eso con sus acciones en el ring. Él es un duro fajador en el ring. El peleador de 22 años oriundo de Cincinnati es tan talentoso que es difícil saber dónde comenzamos a analizarlo. Él tiene una velocidad enorme. Tremendo poder. Astucia en el ring. Una sólida base como aficionado. Y un gran tamaño para un peleador de 130 libras, suficiente como para transformarse algún día en un peso welter al igual que el último gran peleador estelar estadounidense en el peso ligero junior, Floyd Mayweather Jr., de quien Broner hereda su formidable defensa de hombros cerrados. Sí, Broner pelea en una división en la que no tiene oponentes de élite, pero él ya es probablemente el mejor boxeador del grupo, especialmente después de su extraordinariamente impresionante destrucción de Pérez, de 25 años, un legítimo retador oriundo de Salinas, California.
Broner hizo lo que quiso, al realizar la primera defensa del título vacante que ganó por nocaut en el tercer asalto sobre Vicente Martín Rodríguez en noviembre pasado. Su ventaja de potencia y velocidad ante Pérez se hizo evidente casi de inmediato. Él sacudió tremendamente a Pérez con una serie de golpes cuando el segundo asalto llegaba a su fin. En lugar de tratar de hacer algún movimiento, Pérez se mantuvo frente a Broner y eventualmente pagó el precio en el cuarto round. Broner, que ni siquiera estaba buscando el nocaut en ese punto, conectó una derecha en punta al rostro y otra derecha a la cabeza mientras Pérez caía. El balance de Pérez ya era un desastre. Él trató de ponerse de pie, cayó, se puso nuevamente de pie y cayó a las lonas mientras el réferi Geno Rodríguez detenía el pleito a los 2 minutos con 24 segundos. Fue una sensacional y dominante actuación de parte de un potencial peleador digno de estar entre los mejores libra por libra en Broner, cuyo futuro es tan brillante como el de cualquier boxeador joven en este deporte.
Como siempre, Broner fue muy entretenido de ver en su entrevista posterior al combate con el comentarista de HBO Max Kellerman. Además de hacerse peinar el cabello, Broner dijo que él debería estar en el programa "Bailando con las Estrellas" porque tiene pies muy rápidos. Y cuando Kellerman le preguntó a Broner sobre sus oponentes potenciales, Broner sacó la frase de la noche cuando dijo "a mí me dicen `El Problema', pero también podrían decirme 'El Hombre Cano', porque le puedo ganar a todos. Afri-canos, ameri-canos, domini-canos, mexi-canos. A cualquiera le puede tocar". Y luego dijo "yo debería haber peleado con mis joyas colgando, porque me parece que nadie logra pegarme". Clásico. El muchacho es tan buen peleador como showman, y tiene un enorme futuro en ambos aspectos.
También en esa cartelera, el peso pesado de Tuscaloosa, Alabama y ex medallista de bronce olímpico para Estados Unidos en 2004 Deontay Wilder (21-0, 21 KOs), de 26 años, castigó a Marlon Hayes (23-12, 12 KOs) hasta que éste abandonó en su rincón en el cuarto asalto, en otro choque desparejo digno de Wilder. Con sus 6'7'' de altura, Wilder simplemente hizo lo que quiso con Hayes, de 5'9'' y 40 años, un ex peso mediano oriundo de Newark, N.J., que perdió su sexto combate consecutivo y cayó a 1-9 en sus últimas 10 peleas. El nativo de Uganda con base en Las Vegas, Sharif Bogere (22-0, 14 KOs), de 23 años, un excitante prospecto de peso welter junior, dominó y noqueó al mexicano Sergio Rivera (25-9-2, 16 KOs), de 30 años, quien se retiró en su rincón después del tercer asalto tras recibir una golpiza.

Sábado en Cardiff, Gales
Nathan Cleverly G12 Tommy Karpency
Peso semipesado
Retiene un título semipesado
Tarjetas: 120-108 (tres veces)
Récords: Cleverly (24-0, 11 KOs); Karpency (21-3-1, 14 KOs)
Comentario de Rafael: Cleverly, quien cumplió 25 años el pasado 17 de febrero, regresó a su tierra a pelear en Gales por primera vez en 13 peleas desde el 2007. Él hacía la tercera defensa de su título ante Karpency, un peleador del montón elegido a dedo, de 26 años y oriundo de Adah, Pennsilvania. Antes del comienzo, la pelea parecía ser un combate desparejo, y terminó siendo justamente eso dentro del ring. A pesar de que Cleverly nunca lastimó a Karpency (que era apenas el segundo zurdo al que Cleverly enfrenta en su carrera) y nunca pareció conectar un golpe legítimamente dañino (aún cuando se mostró más ocupado y conectó muchos más golpes que su oponente) esta fue una paliza aplastante y unilateral. Cleverly ganó en cada segundo de cada round mientras Karpency simplemente no estaba ni remotamente en su misma clase. Pero aún con un oponente demasiado bajo para él, Cleverly se perdió la oportunidad de hacer una declaración fuerte, especialmente mientras estaba recibiendo una buena exposición en los Estados Unidos en la cadena Epix. En lugar de eso, Cleverly lanzó un millón de golpes rápidos, pero nada con una potencia demasiado dañina. Él hizo muy poco por entusiasmar a nadie más allá de sus más ardientes fanáticos. Cleverly y el promotor Frank Warren han dicho que les gustaría hacer peleas ante boxeadores como el campeón mundial Bernard Hopkins o Chad Dawson (si es que derrota a Hopkins el 28 de abril en la revancha) y los campeones Tavoris Cloud y Beibut Shumenov. A pesar de que Cleverly ganó con facilidad, probablemente no habrá nadie en el lado estadounidense del océano clamando por ver esos combates, al menos no hasta ahora. Cleverly ganó con facilidad, pero si él quiere lograr que la gente se entusiasme él va a tener que hacer algo más. Mucho más.

Enzo Maccarinelli TKO2 Ciaran Healy
Peso semipesado
Récords: Maccarinelli (34-5, 27 KOs); Healy (13-18-1, 4 KOs)
Comentario de Rafael: El galés Maccarinelli, de 31 años, es un ex campeón de peso crucero conocido por su buena pegada y también por su horrible mentón. Él ha sido noqueado en todas sus derrotas, a menudo de manera terrible, incluyendo una derrota por nocaut en siete asaltos ante Alexander Frenkel en una pelea de título europeo de peso crucero en septiembre del 2010. Fue un nocaut muy, muy severo y lució como si la carrera de Maccarinelli estuviese terminada. Pero 13 meses más tarde, Maccarinelli regresó, bajando al peso semipesado y adjudicándose una victoria antes del límite. Ahora, con su segunda pelea en el peso semipesado desde aquella golpiza ante Frenkel, Maccarinelli regresó para lograr una fácil victoria ante un oponente superado en talento y tamaño como lo fue el norirlandés Healy, de 37 años, quien perdió así su segunda pelea seguida y tercera de sus últimos cuatro asaltos.
Maccarinelli lo suavizó con golpes al cuerpo y finalmente lo derribó con un golpe al cuerpo en el segundo round. Healy cayó en una reacción demorada y estaba claramente dolorido, pero logró superar la cuenta. Maccarinelli continuó su ataque al cuerpo y lo derribó por segunda vez. Nuevamente, Healy superó el conteo pero estaba recibiendo tremendos puños al cuerpo cuando su rincón lanzó la toalla y el réferi Wynford Jones detuvo el pleito a los 2 minutos con 52 segundos. El objetivo de Maccarinelli es lograr una oportunidad de título mundial contra su compatriota galés Nathan Cleverly, que defendía su corona en el evento estelar. Con la ventaja de tamaño y potencia de Maccarinelli, ese combate es ganable para él, si es que el promotor Frank Warren, que promueve a ambos, elije realizarlo. Sería sin dudas una enorme pelea en Gales.
También en esa cartelera, el prospecto de peso welter de 26 años Frankie Gavin (12-0, 9 KOs),campeón mundial amateur en 2007 y olímpico británico en 2008, noqueó a Kevin McIntyre (30-9, 9 KOs), de 33 años y oriundo de Escocia, con un golpe al cuerpo a los 2 minutos con 22 segundos del tercer round.

Viernes en Dover, Del.
Juan Carlos Burgos G10 Cristóbal Cruz
Peso ligero Jr.
Tarjetas: 98-90, 96-92 (dos veces)
Récords: Burgos (29-1, 19 KOs); Cruz (39-13-3, 23 KOs)
Comentario de Rafael: Burgos, de 24 años y oriundo de México, es un peleador en ascenso, mientras que Cruz, de 34 años y también mexicano, está en caída tras haber acumulado una marca de 0-2-2 en sus últimos cuatro combates (con ambos empates siendo de carácter técnico). Burgos, quien podría llegar a hacer bastante ruido en el peso ligero junior, una división sin muchos peleadores atractivos, se hizo conocido en noviembre de 2010. Eso fue cuando marchó a Japón y desafió al por entonces campeón de peso pluma Hozumi Hasegawa. A pesar de que Burgos cayó por decisión, fue una tremenda pelea, y él demostró mucho para ser un peleador joven que daba un salto en clase. Desde entonces, Burgos ganó cuatro combates seguidos, incluyendo una ligeramente sorpresiva victoria ante Luis Cruz, en un combate que marcó su ascenso al peso ligero junior para enfrentarlo en la cartelera previa al combate entre Manny Pacquiao y Juan Manuel Márquez III en HBO PPV en noviembre pasado.
Y ahora tiene esta sólida victoria ante Cruz, un ex campeón de peso pluma que se hizo profesional a sus 14 años. Este evento estelar de Viernes de Combates fue muy bueno, y ambos peleadores tuvieron sus buenos momentos. Quizás las tarjetas fueron demasiado amplias a favor de Burgos, pero pareció haber hecho lo suficiente como para quedarse con esta buena pelea. La tarjeta de 98-92 de Pierre Benoist fue un mal chiste, pero Benoist ha demostrado ser un juez que vive en otro mundo. Recuerden, él es el tipo que le dio una horrible tarjeta de 119-110 a favor de Paul Williams en su tremendamente cerrada victoria sobre Sergio Martínez. Fue una de las peores tarjetas quizás en la historia del boxeo. Burgos, de 5'10'' de altura y que pareció estar muy por encima de Cruz con sus 5'6'' de altura, derribó a su rival de rodillas en el sexto asalto tras un uppercut de derecha. Pero Cruz, que sufrió un corte sobre su ojo izquierdo en el sexto round, sorprendió a Burgos en el noveno episodio al derribarlo con una dura izquierda. Las caídas se cancelaron mutuamente y Burgos tuvo suficientes puntos acumulados para superar al duro Cruz, que se ha transformado en un oponente de ocasión para peleadores jóvenes, y para que ellos pongan un buen nombre en su currículum. Eso es exactamente lo que Burgos logró aquí.


Viernes en Las Vegas
Jessie Vargas G10 Lanardo Tyner
Peso welter
Tarjetas: 99-91 (tres veces)
Récords: Vargas (18-0, 9 KOs); Tyner (25-7-2, 15 KOs)
Comentario de Rafael: Vargas, de 22 años, es un protegido dee Floyd Mayweather Jr. que estaba subiendo del peso welter junior al peso welter para encabezar una cartelera de Showtime ShoBox: The New Generation. Vargas, oriundo de Las Vegas, recibió mucha exposición cuando combatió en la cartelera de HBO PPV encabezada por Mayweather-Víctor Ortiz en septiembre pasado, aunque Vargas escapó a duras penas con una victoria por fallo dividido ante Josesito López en una pelea que muchos pensaron que López había ganado. Para esta pelea, Vargas estaba dando un paso hacia abajo en nivel de competencia ante Tyner, de 36 años y oriundo de Detroit, que perdía así su tercera pelea consecutiva y caía a 1-4-1 en sus últimas seis peleas. En los papeles, éste era uno de los peores eventos estelares de ShoBox en mucho tiempo. Sin embargo, resultó ser un combate bastante entretenido aún a pesar de la diferencia en las tarjetas. El drama llegó después del hecho de que ambos peleadores fueron lastimados por golpes bajos. En una pelea llena de faltas, Vargas estaba comprometido a pegar al cuerpo desde el inicio, pero uno de esos puños se perdió muy por debajo de la cintura en el primer asalto, lo cual envió a Tyner a las lonas. En el cuarto round, Tyner golpeó a Vargas con un brutal puño en la ingle, enviándolo a las lonas gimiendo de dolor. Vargas respondió con un golpe bajo propio a finales de ese asalto que forzaron a Tyner a buscar las lonas. Vargas conectó otro golpe bajo más a finales del octavo que conmovió a su rival y causó que el réferi Tony Weeks le diese tiempo para recuperarse. Cuando la fiesta de faltas finalizó, era obvio que Vargas era el ganador. Él es una promesa que hace peleas entretenidas en televisión. Con esta victoria y sin lesiones aparentes, Vargas tiene planeado regresar el próximo 5 de mayo para nuevamente presentarse en una cartelera de PPV en HBO antes de la próxima aparición de Mayweather ante el campeón mediano junior Miguel Cotto.

Deandre Latimore G10 Milton Nuñez
Peso mediano Jr.
Tarjetas: 96-92, 95-94, 94-94
Récords: Latimore (23-3, 17 KOs); Nuñez (23-4-1, 21 KOs)
Comentario de Rafael: Latimore, de 26 años y oriundo de St. Louis viviendo en Las Vegas, tenía pactado enfrentar originalmente al obrero del ring Ryan Davis en la pelea semi-estelar de esta cartelera de ShoBox. Sin embargo, Davis no pasó una prueba ocular previa al combate y fue reemplazado con cinco días de notificación por el colombiano Núñez, de 24 años, quien tiene mucha pegada pero una mala quijada -- sus tres derrotas previas antes de ésta fueron por nocaut en el primer asalto. A pesar de que Latimore, quien cayera por fallo dividido ante otro rival de St. Louis, Cory Spinks, en un combate de título mundial en 2009 en el peso mediano junior, no logró un nocaut en el primer asalto, él dominó a Núñez durante la primera mitad de la pelea. Pero hubo drama hacia el final cuando Latimore, que peleaba por primera vez en 10 meses, tuvo que hacer todo lo que pudo para sobrevivir un ataque tardío de Núñez. Latimore estaba prácticamente en piloto automático para alzarse con una victoria por decisión cuando los planes se le alteraron en el noveno asalto. Faltando 30 segundos, Núñez conectó una derecha para lograr una caída. Latimore se mostró mareado mientras Núñez conectaba casi 20 golpes más, pero no pudo acabar con su mareado oponente. Latimore trató de correr en el 10mo asalto. Todo lo que necesitaba hacer era llegar al campanazo final, y estaba claro que ganaría. Pero Núñez lo lastimó nuevamente en el 10mo y derribó al cansado Latimore con una derecha faltando menos de 30 segundos para completar el combate. Latimore sobrevivió y continuó tratando de ganar tiempo. Núñez nunca pudo conectar otro golpe significativo, y la pelea se terminó con Latimore, trabajando con su entrenador Jeff Mayweather por primera vez, aferrándose a su ventaja para quedarse con una victoria por fallo mayoritario.

CAMPILLO PIDE JUSTICIA



IGOR BARCIA ibarcia@elcorreo.com | BILBAO.

Se fue a Estados Unidos en busca de los combates y de la gloria a la que no tenía acceso en España, pero para Gabriel Campillo hay cosas que no cambian, como las decisiones de los jueces. El pasado fin de semana, por tercera vez en dos años, el madrileño vio como le 'quitaban' un título que era suyo. «Fue escandaloso», sentencia el púgil de Vallecas en su conversación con EL CORREO. Campillo se enfrentó en Corpus Christi (Texas) a Tavoris Cloud con el título mundial de la FIB de los semipesados en juego. Para todo el mundo que vio la pelea, el español fue el claro vencedor. Para todos, menos para los jueces que decretaron que el estadounidense, el protegido de Don King, había retenido el cinturón de campeón. «Pensaba que después de las anteriores situaciones que había vivido no era posible otra injusticia, que era demasiado, pero esta visto que no, que nunca es demasiado», se lamenta.
Campillo se refiere a las duras decisiones que le tocó escuchar en dos combates recientes. Después de lograr en 2009 el campeonato semipesado de la WBA, el madrileño no ha tenido suerte con los jueces. Tras retener el título frente a Beinut Shumenov ese mismo año, en enero de 2010 el mismo boxeador le quitó el título tras una decisión que muy poca gente entendió y que el equipo de Campillo llegó a pesentar alegaciones para que fuera anulado. Y en octubre de 2011, los jueces decretaron que su pelea con Karo Murat finalizó en empate, ante las críticas generales.
Por eso, después de aquellos mazazos, 'Chico Guapo' decidió que tenía que dar un giro a su carrera deportiva. «En España para el boxeo van las cosas muy lentas, pocas peleas, pocas bolsas, pocos rivales de entidad... No se puede hacer nada para el nivel al que me muevo yo. Entonces era irme fuera o quedarme y morirme de aburrimiento. Había alcanzado mi tope en España y eso desmotiva mucho. Estaba en el punto donde mi rendimiento estaba bajando y no podía seguir así».
Así que decidió abandonar la compañía de Ricardo Sánchez Atocha para recalar en la nueva promotora del campeón argentino Sergio 'Maravilla' Martínez. «Siempre hemos sido compañeros y amigos, y llamo a esa puerta, le explico la situación y desde entonces, todo ha sido muy sencillo», admite Campillo, quien asegura que ese cambio ha dado un nuevo aire a su carrera deportiva. «El cambio se ha notado como de la noche al día. Es una nueva ilusión, sobre todo a nivel mental, es como empezar de nuevo, me siento como cuando empecé con 20 años», afirma.
Tres meses fuera de casa
El caso es que al madrileño le surgió la posibilidad de luchar por el título mundial del semipesado de la FIB, frente a Tavoris Cloud. Y Campillo apostó fuerte. Se recluyó en el centro de entrenamiento de Oxnard (California) para preparar la pelea, y allí estuvo casi tres meses, lejos de su mujer y de sus hijas. «Fue una apuesta muy dura, porque tengo dos niñas pequeñas, y estar separado tres meses es muy duro, pero a la vez también lo hago por ellas, porque es por su futuro».
Así que el pasado 18, Campillo se presentó a por todas frente a Cloud. Y asegura que fue su mejor combate de los 27 que ha disputado como profesional. «Sí, a nivel físico fue el mejor combate sin duda, y técnica y estrategicamente, si no es el mejor, es uno de los mejores porque es una pelea muy completa en todos los aspectos. Fueron tres meses de preparación y si ese esfuerzo se plasma de esa manera en el ring para mí es un orgullo, porque me lo he currado muy duro».
Pero lo que no esperaba era lo que llegó tras el último asalto. Porque Campillo estaba convencido de que había ganado. «Fue muy escandaloso porque fue una victoria muy clara, pero empecé a sospechar. Y cuando dijeron el resultado me hundí completamente, pensé que no podía ser posible que me pasara de nuevo». La reacción del público, al menos, le consoló un tanto, porque respaldó completamente al boxeador español. Así que al menos, Campillo quiere encontrar algo positivo de todo lo que vivió. «Vamos a intentar utilizar lo que pasó para que me abran puertas, porque después de toda la reacción, creo que el público va a querer ver algo más de Gabriel Campillo», afirma.
- ¿Habrá revancha con Cloud?
- Por mi orgullo estoy deseando que haya una revancha, porque me duele lo que ha pasado, que no hizo nada para ganar. Me gustaría darle otra buena paliza y esta vez llevarme la victoria, pero ahora tengo que pensar en lo que es mejor para mi carrera, no para mi orgullo.