miércoles, 2 de diciembre de 2015

TYSON FURY, UN REY GITANO PARA LOS PESOS PESADOS

JUANMA LEIVA
AS.com

Tyson Fury es el hombre del momento en el boxeo. Su victoria el pasado sábado ante Wladimir Klitschko, rey de los pesados durante casi los últimos diez años, le ha aupado a la cima de los pesos completos. Ya se especula sobre cuándo expondrá sus recién estrenados cinturones de la Asociación (AMB), Federación (FIB) y Organización (OMB), aunque la opción que más fuerza tiene es la revancha (pactada por contrato) con el ucraniano, esta vez en suelo inglés.
Wembley, e incluso Old Trafford, estadio del Manchester United del que Fury es fan (así como de exjugadores como Cantona y Roy Keane), suenan como sedes para la primera defensa del Gipsy King (Rey Gitano), como él mismo se hace llamar. Nacido a las afueras de Manchester hace 27 años, de familia nómada irlandesa y con tradición en el boxeo con puños desnudos (emparentado con Bartley Gorman, el más famoso púgil de esta modalidad clandestina que usaba también ese apodo), su nombre, Tyson, se debe a la adoración de su padre por Iron Mike.
Como él cuenta, lleva el boxeo en la sangre y el dinero no es su motivación: “Sólo necesito lo suficiente para vivir”. Un detalle más del carácter de este boxeador que podría vivir en su caravana, y cuya faceta de showman, capaz de aparecer disfrazado de Batman o cantar en el ring, tanto ha llamado la atención. Eso, y las provocaciones que lanzó al ya excampeón: “Sabía que ese comportamiento le incomodaba”.
Ayer, en rueda de prensa, volvió a cargar contra el ucraniano. Tras los problemas que sufrió con los guantes propuestos por Klitschko y con la superficie del cuadrilátero, Fury reveló las sospechas que tuvo tras la pelea: “Me dijo mi equipo que no tocara el agua en el vestuario, que no tomara nada porque podía contener algo que diera positivo en el control antidopaje. Me fui deshidratado”. Si se confirma la revancha, la promoción ya ha empezado...