miércoles, 21 de enero de 2009

“Chegüí” Torres rompió esquemas


Elliott Castro Tirado

Me hubiera encantado escribir esta columna antes. Apenas una semana antes hubiera sido suficiente. Lo digo por mí, pues “Chegüí” Torres no era una persona adicta a los elogios. Por el contrario, era tan y tan sencillo que no recuerdo haberlo visto “esponjado” por lo que se dijera sobre su persona, o sentido porque no se le hubiera reconocido como se merecía. Aun así, me hubiera encantado que la leyera.
José Luis Torres, mejor conocido como “Chegüí”, ha sido uno de los pocos boxeadores que ha logrado el reconocimiento pleno a su inteligencia y capacidad más allá del cuadrilátero. Con sus actuaciones y aportaciones fuera del cuadrilátero rompió con el estigma y el prejuicio que asegura que el músculo y el intelecto están divorciados irremediablemente. Puesto de otra forma más cruda aún, son muchos los que afirman que “todos los boxeadores son brutos”. “Chegüí” demostró que eso no es cierto.
Con paciencia, pero con seguridad absoluta, “Chegüí” argumentó una y otra vez que no es una cuestión de más o menos inteligencia, sino que la mayoría de los boxeadores proviene de los sectores con menos escolaridad y que no se les brindan las mismas alternativas que a otros jóvenes. Él era el mejor ejemplo para sostener su posición.
Aunque nació y se crió en el sector de Ponce conocido como La Playa, “Chegüí” obtuvo una medalla de plata olímpica, pero en representación de Estados Unidos, que lo reclutó mientras estaba en el ejército de ese país. Fueron los Juegos celebrados en la ciudad australiana de Melbourne en 1956 y el boricua perdió la pelea por la medalla de oro del peso junior mediano ante Laszlo Papp. Ésa fue la última pelea para ese legendario púgil húngaro, que de paso lo convirtió en el primer boxeador de la historia con tres medallas de oro olímpicas. Los únicos que han logrado igualar su hazaña posteriormente han sido los cubanos Teófilo Stevenson y Félix Savón.
Hay muchísimos testimonios de componentes de la delegación boricua a esos Juegos que repiten que “Chegüí” se pasaba todo su tiempo libre con ellos y que siempre se identificaba como puertorriqueño ante todos.
A su regreso a Nueva York, donde residía, se unió al grupo selecto de boxeadores que manejaba Cus D’Amato, un personaje novelesco que establecía relaciones casi familiares con los púgiles con los que trabajaba. Uno de ellos era Floyd Patterson, quien exhibía un estilo similar con ambas manos cubriendo el rostro y que fue bautizado como “peek a boo”.
En marzo del 65 “Chegüí” se coronó campeón mundial del peso semicompleto cuando Willie Pastrano no pudo salir al noveno asalto. Un brutal ataque al cuerpo había minado las energías del hasta entonces campeón. Lo que no aparece en los libros de récords es que unas horas antes del combate “Chegüí” amenazó con no pelear si no permitían que se entonara La Borinqueña en el Madison Square Garden, donde se celebró el pleito. Cuando los organizadores se dieron cuenta que no era una amenaza, sino que el boricua estaba dispuesto a retirarse, permitieron que Felipe Rodríguez interpretara nuestro himno nacional. “Chegüí” lo acompañó.
Ése fue el debut de La Borinqueña en peleas de campeonato mundial y esa noche “Chegüí” unió su nombre a los de Sixto Escobar y Carlos Ortiz como los únicos puertorriqueños en ser reconocidos como campeones mundiales. Recordemos que en ese tiempo sólo había ocho divisiones y no 17 como hay ahora.
Con su victoria, “Chegüí” fue reconocido como campeón indiscutido de las 175 libras por los únicos dos organismos que existían, que eran el Consejo y la Asociación Mundial de Boxeo.
Aunque ganó su próxima pelea, que fue en el peso completo, se convenció de que no tenía lo necesario para subir, por lo que volvió a bajar a las 175. Tras tres defensas exitosas, perdió el cetro por decisión unánime ante Dick Tiger, quien lo volvió a derrotar en la revancha, esta vez por decisión dividida. Hasta para retirarse, “Chegüí” fue diferente, pues colgó los guantes luego de dos victorias al hilo, pero convencido de que ya no sentía la misma pasión de antaño. La inmensa mayoría de los boxeadores, incluyendo a muchos de los más grandes, sólo se han retirado después de derrotas.

UNA NUEVA ETAPA EN SU VIDA
Mientras la mayoría de los boxeadores se desvanecen tras retirarse, “Chegüí” comenzó una nueva etapa de su vida, que resultó más productiva aún. Lo primero fue integrarse de lleno a las luchas comunales de los boricuas y los negros en la ciudad de Nueva York en contra del racismo y a favor de igualdad de oportunidades. Lo mejor fue que no se limitó a hablar, sino que desde el principio comprendió que la mejor forma de invitar a otros era con el ejemplo. Eso le ganó innumerables confrontaciones con la policía, pero fue aumentando geométricamente su prestigio y su poder de convocatoria.
Por otro lado, comenzó a escribir y no necesariamente sólo sobre deportes, algo sin precedentes para ex boxeadores. Sus escritos fueron publicados por los principales periódicos y revistas de la ciudad. Mientras tanto, D’Amato lo reclutó para que trabajara con un talentosísimo joven llamado Mike Tyson, con quien estableció una estrecha relación personal.
Con el tiempo publicó una biografía (no autorizada de Tyson), titulada “Miedo y Fuego” (“Fear and Fire”) y otro libro sobre Muhammad Alí, que llamó “Pica como una Abeja” (“Sting like a Bee”).
Su prestigio continuó aumentando y luego fue electo Presidente de la Comisión de Boxeo de Nueva York, que entonces era la más poderosa del Mundo, reconocimiento que ahora posee la de Nevada. Posteriormente presidió la Comisión de Boxeo de Puerto Rico y también la Organización Mundial de Boxeo, OMB. Por todo eso fue exaltado al Salón de la Fama del Boxeo Internacional.
Hace unos años y con su salud seriamente afectada, “Chegüí” decidió realizar desobediencia civil como parte de la lucha para sacar la de vieques a Marina de Guerra de Estados Unidos. Entró a los terrenos que entonces ocupaba la Marina en mayo del 2001. Siempre recordaré que no quiso aceptar trato preferencial por ningún concepto, incluyendo su quebrantada salud.
El año pasado se mudó a Ponce, en sus propias palabras “para vivir aquí mis últimos días”. Así fue. El día antes de su muerte fue al Paquito Montaner a alentar a sus Leones, que ganaron el primer partido de la serie final del beisbol profesional contra Arecibo. Esa noche falleció.

VUELVE ROY JONES JR.



Dan Rafael

Roy Jones Jr. siempre ha mantenido un estrecho vínculo con su querida ciudad de Pensacola, Florida, pero no pelea allí desde hace 10 años. Eso está a punto de cambiar.
Jones, el legendario ex campeón de cuatro divisiones quien cumplió 40 años el viernes pasado, se enfrentará a Omar Sheika en el Pensacola Civic Center el 21 de marzo en un combate de peso semipesado, según le comentó John Wirt, CEO de la compañía promocional de Jones, Square Ring, a ESPN.com el lunes, confirmando el reporte que se había presentado "Friday Night Fights", de ESPN2.
"Hemos llegado a un acuerdo con Sheika", dijo Wirt. "Creo que es una gran pelea para Roy y estamos entusiasmados de poder llevarla a cabo en su ciudad. Sé que Roy está entusiasmado de traer un evento de calidad a Pensacola".
Aunque Jones (52-5, 38 nocauts) sufrió una derrota contundente por decisión ante el campeón Joe Calzaghe en Nueva York el 8 de noviembre, aún no tiene intenciones de retirarse, dijo Wirt.
"Roy no pelea en Pensacola desde 1999 y realmente quería traer un combate aquí para sus aficionados", explicó Wirt.
El CEO también comentó que la tarjeta PPV incluirá tanto combates de boxeo como de artes marciales mixtas (MMA).
"Estamos trabajando en eso en este momento", dijo Wirt. "Combinando la pelea de Roy y otros combates de boxeo con peleas de artes marciales mixtas, planeamos atraer a los aficionados de los dos deportes. Creemos que el boxeo y las MMA tienen seguidores diferentes, de modo que intentaremos introducir a los aficionados de las artes marciales en el boxeo y a los del boxeo en las artes marciales. Ese es el modelo del negocio".
Los combates de boxeo y artes marciales mixtas suelen combinarse en una misma velada de tanto en tanto, pero nunca en el máximo nivel de cada deporte, ni en PPV.
"Creemos que el mercado más grande del boxeo está en la base de aficionados de las artes marciales mixtas, y esto les da la oportunidad de ver un evento boxístico de calidad", dijo Wirt. "También les brinda a los seguidores de boxeo la oportunidad de ver buenos combates de artes marciales mixtas. Seguimos armando la tarjeta, pero Roy cree que es una buena oportunidad comercial".
Wirt dijo que la comisión de Florida le ha dado luz verde a Square Ring para organizar un show que combine los dos deportes. Los combates de artes marciales mixtas, dijo Wirt, se llevarán a cabo en un ring tradicional de boxeo. Sin embargo, se agregará una quinta cuerda y la plataforma saliente se extenderá un poco para reducir el peligro de que los competidores de MMA, quienes suelen luchar cuerpo a cuerpo en el suelo, se caigan del ring.
Jones no pelea en Pensacola desde que noqueó a Richard Frazier en el segundo round el 9 de enero de 1999, en defensa de su título de peso semipesado.
Sheika (27-8, 18 nocauts), quien cumplirá 32 años el 20 de febrero, ha disputado muchas peleas de alto perfil y ha tenido varias oportunidades de ganar un título. No obstante, lleva una marca de 0-4 en combates titulares de peso supermediano, con un nocaut técnico ante Calzaghe en el 2000 y derrotas por decisión ante Eric Lucas (2002), Jeff Lacy (2004) y Markus Beyer (2005).
Desde que perdió ante Beyer en septiembre del 2005, Sheika peleó una sola vez, cuando noqueó al viajante Tiwon Taylor en septiembre del 2007 en la tarjeta no principal de Kelly Pavlik-Jermaine Taylor I.
Pero la pelea con Jones se acordó rápidamente, dijo Mike Borao de la promotora de Sheika, Hirsch-Borao Promotions.
"Llamé a John hace cerca de un mes y sólo le dije que cuando Roy necesitara un combate para regresar, podíamos hacerlo con Sheika", comentó Borao. "Omar es un duro competidor quien no puede estar en una mala pelea. John dijo, 'Déjame pensarlo', y nos llamó un par de semanas después, estando interesado. Hablé con Omar y la tomamos lo más rápido posible. No queríamos perder la oportunidad. Omar está muy entusiasmado. Cree que después de todas las lesiones que ha sufrido, en la mano, el codo, finalmente está sano y listo para sacarle el máximo provecho".

MINUTO A MINUTO, A 72 HORAS DEL MARGARITO VS. MOSLEY




ESPN.com.
Miércoles 21 de enero, 11:30am ET -- Mosley cambia entrenador

Shane Mosley insiste que está totalmente enfocado en su pelea por la corona welter de la AMB ante Antonio Margarito, con quién se enfrentará el sábado en el Staples Center aquí en Los Angeles, y necesita estarlo, debido a la ferocidad de Margarito en el ring. Pero si de alguna manera estuviera distraído, tendría una buena excusa.

Por un lado, hay reportes que está teniendo problemas maritales. Además, por segunda vez en su carrera, Mosley ha despedido a su padre Jack de su esquina (la primera vez fue después de su derrota en la primera pelea ante Winky Wright en el 2004), y ha contratado al entrenador y confidente de Bernard Hopkins, Nazim Richardson.

"Necesitaba algo diferente y mi padre y yo estabamos chocando cabezas. Necesitaba un cambio de ritmo y esas cosas y creo que ha funcionado bien", le dijo Mosley a los reporteros la semana pasada. "Nazim entrena boxeadores profesionales y amateurs. Tiene las dos perspectivas y a veces cuando nos convertimos en profesionales, nos olvidamos de algunas cosas que nos llevaron a ganar el campeonato".

"Creo que con sus conocimientos pro entrenar a boxeadores de los dos lados, ha traído una perspectiva más amplia de todo. El ve un montón de diferentes cosas, mira muchos videos y ve muchas peleas, como dije, amateurs y profesionales. Creo que eso me ha rejuvenecido, me ha devuelto la vida". -- Kieran Mulvaney


Miércoles 21 de enero, 11:00am ET -- Nunca llueve en el Sur de California

Luego de varias semanas de frio en Washington DC, es bueno estar en el caluroso clima de las Ciudad de Los Angeles por unos días y volver al ambiente del boxeo. No es que tuviera que estar aquí tan temprano, pero asi fue. En los últimos dos años he estado cubriendo mayormente peleas de PPV y estoy acostumbrado a que la conferencia de prensa final sea el miércoles en vez del jueves. Hacerla un día antes te permite un día extra de cobertura y un día más para promover la pelea.

Pero el combate Antonio Margarito-Shane Mosley de este sábado es en HBO World Championship Boxing, asi que la conferencia será el jueves, frente al Staples Center, donde se realizará la pelea.

El pesaje oficial será el viernes en la tarde como siempre; y el sábado en la mañana habrá un par de conferencias de prensa para presentar el acuerdo de televisión de Top Rank/TV Azteca, y la pelea del 7 de febreroo entre Vic Darchinyan y Jorge Arce. Debido a todo lo que ya ha dicho Darchinyan, la conferencia será animada y entretenida, y por supuesto, con mucha información en el blog. -- Kieran Mulvaney


Miércoles 21 de enero, 10:30am ET -- Haciendo el caso por Margarito

* Margarito es una bestia. Es fuerte y siempre va para adelante. ¿Hay alguna forma de que Mosley lo pueda detener?

* Margarito es un peso welter alto y fuerte, y también es un peleador. Tradicionalmente, Mosley ha tenido problemas con boxeadores altos y fuertes (Vernon Forrest, Winky Wright).

* A pesar de que Mosley es un boxeador veloz y de grandes habilidades, él también es un peleador. Especialmente a esta edad y en esta etapa de su carrera, ha mostrado que se está dispuesto a pararse enfrente e intercambiar golpes. ¿Hará eso ante Margarito --y si lo hace-- le dará la ventaja?

* Desde 1996, Margarito tiene marca de 22-1 con uan pelea sin decisión en el peso welter, y 28-2, con una SD en total. Desde el 2005, ha vencido a Kermit Cintrón dos veces, Joshua Clottey y Miguel Cotto. El último título mundial de Mosley fue una victoria por una decisión muy cerrarda ante Oscar De La Hoya en septiembre del 2003, y esa victoria fue empañada luego que admitió el uso de sustancias para el mejoramiento físico. Eso significa que su última victoria legítima por un título mundial fue ante el muy inferior Adrian Stone en julio del 2001.

* ¿Y que pasa con todas las distracciones externas alrededor de Mosley? Se ha sepatrado (profesionalmente) de su padre por segunda vez y hay mucha preguntas sobre esteroides... ¿Ha afectado esto su preparación para la pelea? -- Kieran Mulvaney


Miércoles 21 de enero, 10:00am ET -- Haciendo el caso por Mosley

* Mosley tiene más velocidad de manos que Margarito y también que Miguel Cotto, a quién Margarito venció.

* Cotto peleó de una manera que lo hizo extremadamente vulnerable ante Margarito: Lanzando golpes y luego retrocendiendo, pero agachándose hacia adelante mientras lo hacía, quedando vulnerable especialemnte ante el poderoso upercut de Margarito. Mosley no pelea de esa manera.

* Mosley tiene una barbilla muy dura; se cubrió mucho ante la presión de Cotto, pero se recuperó para terminar muy fuerte cuando pelearon en el Madison Square Garden en el 2007.

* Mosley tiene la experiencia , velocidad de piernas y de manos para complicar a Margarito, y mantener al mexicano moviéndose y evitando que mande sus golpes, de la manera que lo hizo ante Cotto.

* Margarito se está durmiendo en los laureles de la victoria ante Cotto. Hay rumores que ha sido un trabajo tremendo para él bajar a las 147 libras. ¿Ha quitado la mira de la meta? -- Kieran Mulvaney


Miércoles 21 de enero, 9:30am ET -- Margarito habla con la prensa

Luego que Shane Mosley había hablado con los periodistas, Antonio Margarito también tuvo algunas cosas para decir.

"Realmente no veo que tenga ningun ventaja sobre él, pero creo que mi preparación, la forma como trabajo, como siempre llego bien preparado a las peleas, eso me sacará adelante. Se lo que tengo que hacer para ganar peleas y siempre vengo a eso. Dicen que Mosley es viejo y todo eso, pero yo no lo veo asi. Creo que es un gran campeón, creo que es un gran peleador y no lo voy a subestimar. Se lo que ha hecho, pero yo llego preparado porque pienso que este es mi momento, es mi hora de brillar".

"Sin dudas que la pelea con Cotto fue la mejor victoria de mi carrera, porque en ese momento el era probablemente el mejor peso welter en el mundo. Por eso al ganarle, significó la pelea más grande de mi carrera, porque ahora yo soy el mejor".

"Cada lugar que voy, la gente me sigue y me pide autógrfos, todos quieren tomarse una foto conmigo. Uno puede ver mi popularidad con la venta de boletos. Sin dudas que he dado un gran paso en mi carrera".

-- Kieran Mulvaney


Miércoles 21 de enero, 9:00am ET -- Mosley habla con la prensa

Shane Mosley habló con los reporteros en una conferencia telefónica la semana pasada. Aca van algunas cosas que dijo:

"Si el cuerpo de Margarito está desprotegido y me lo ofrece, lo voy a tomar. Definitivamente hemos trabajado en eso, y cuando uno pelea ante rivales como Margarito, hay que trabajar en todos los detalles, no sólo se puede trabajar en boxear y moverse, hay que trabajar en saber pegar también, y enfocarse en diferentes partes del cuerpo, diferentes partes de la cabeza".

"No estoy tratando de escaparme de su presión, estoy tratando de colocar mis golpes también. Pero cuando yo lo quiera hacer, no cuando el díga... quiero pelear ahora. Quizás en ese momento no quiero pelear, pero luego cambio de parecer y comienzo a pelear otra vez".

"Creo que probablemente me siento más confiado y cómodo que cuando peleé con Oscar la primera vez. Siento que voy a estar en la mejor condición. Estoy confiado que los fans en todo el mundo va a quedar en shock. A pesar de eque tengo confianza, estoy tratando de no sobrepasarme, tratando de mantener buen balance en mi cabeza antes de subir al ring". -- Kieran Mulvaney

ALÍ Y OBAMA


SANTI SEGUROLA. DIARIO MARCA.

Dos horas antes del juramento presidencial de Barack Obama, Muhamad Ali accedió con su mujer a la tribuna de invitados. Con la salud deteriorada por el Parkinson, Alí caminó tembloroso y débil hasta encontrar su asiento. Cubierto por un sombrero de fieltro, abrigado por una bufanda y un gabán de lana, el orgulloso campeón era ahora un anciano sostenido por su mujer. Pero algo en su presencia irradiaba la misma fuerza que en sus años de juventud, cuando Alí era el rey del mundo, el mejor boxeador de su tiempo, el descendiente de esclavos que cambió su nombre, Cassius Clay, por el de Alí, el converso al Islam, el hombre que se negó a luchar en Vietnam, el deportista más carismático que ha conocido Estados Unidos. Ese hombre, que hace 12 años encendió con manos trémulas el fuego olímpico en Atlanta, representaba como nadie la importancia del deporte en la conquista de los derechos civiles en Norteamérica. Obama no lo olvidó. Alí, y no otro, acudió como invitado de honor a la investidura de un presidente cuya figura se antoja histórica.

Se escucha con frecuencia el papel alienante del deporte en la sociedad moderna. Opio del pueblo, adormecedor de voluntades, factor de violencia tribal, motor de nacionalismos sectarios, coartada de vándalos. Es frecuente el desprecio por el deporte en los cuarteles intelectuales, rechazos casi siempre injustificados, procedentes de una idea elitista de la sociedad y la cultura. Las adherencias negativas que aguanta el deporte no impiden su grandeza. No es denigrante disfrutar y emocionarse con las hazañas humanas. No es despreciable atender a los valores de superación y solidaridad que se identifican con los deportistas. No es trivial situar a algunas figuras como héroes trascendentes.

Alí nació en Louisville, en Kentucky, uno de los estados donde la segregación racial alcanzó cotas más virulentas. No fue un santo. Le llamaron bocazas. Le acusaron de despreciar a sus rivales y de desprestigiar al boxeo. Fue arrogante y provocador. Lo fue con sus rivales negros y blancos. Pero era un genio en el ring, tenía un carisma insuperable y recorrió la ruta más incómoda para un campeón. Se hizo consciente de su negritud y de las injusticias de su tiempo. Alí, que venía de un medio pobre y alcanzó pronto la riqueza que suele convertir a los campeones en habitantes del derroche y la irrealidad, fue desposeído de su título por negarse a entrar en filas y combatir en Vietnam. Su decisión le convirtió a la vez en un mártir de su generación y en un antipatriota.

Han pasado 40 años de aquellos episodios y Alí es reconocido como un tesoro nacional. Acudió a la investidura de Obama no como el gran boxeador que fue sino como el campeón de la dignidad. Pero en su envejecida figura también se representaban los otros campeones que le precedieron en la lucha, los campeones que hicieron del deporte un escenario simbólico en la conquista de la igualdad y las libertades. Quienes pretenden desmerecer el papel del deporte en la sociedad, olvidan lo que significó Jesse Owens en los Juegos de 1936, frente a Hitler, en el estadio Olímpico de Berlín. Owens, negro de Alabama, hijo de recogedores de algodón, ganó cuatro medallas de oro en el delirante clima de un régimen que proclamaba la supremacía de los arios. Pero Owens volvió de Alemania para trabajar de botones en el hotel Waldorf Astoria de Nueva York. Su vida, como la de tantos otros campeones, como Joe Louis –vencedor de Max Schmelling, el boxeador que representaba el ideal propagandístico del nazismo-, como Jackie Robinson –el primer jugador negro en las Ligas profesionales de béisbol-o como Tommie Smith –el campeón que levantó su enguantado puño negro tras vencer en la final de 200 metros en México 68-, estuvo marcada por la frustración, las represalias y la desigualdad.

Todos y cada uno de estos campeones añadieron una razón para identificarse con ellos y avanzar en la conquista de los derechos básicos. Fueron ejemplares para sus sucesores, para los aficionados al deporte y para una sociedad que, poco a poco, abandonó sus prejuicios gracias a apóstoles sociales, como Martín Luther King o Rosa Parks, y también al efecto de campeones como Jesse Owens, Joe Lous, Jackie Robinson, Tommie Smith y Muhamad Alí. La sociedad estadounidense lo ha entendido así. Barack Obama, también. Ahí, en un momento excepcional en la historia de los Estados Unidos, estaba Muhamad Alí para acreditar lo mejor del deporte.

"La mezcla no es buena", de Dan Rafael, de ESPN


Aclaremos algo antes de seguir adelante con este blog --esto no es, repito, NO es, un debate de boxeo vs. MMA. Lo he dicho hasta el punto de estar al borde de querer vomitar, el boxeo y las MMA son deportes diferentes.
Ambas disciplinas tienen su lugar. Ambos deportes cuentan con talentosos atletas y eventos de calidad. De modo que los dos pueden coexistir sin dificultad. Y hasta seguramente habrá quienes son seguidores de ambas actividades.
Sin embargo, no soy de los que siguen los dos. Obviamente, amo al boxeo y no soy fanático de MMA. Está bien, miro algo de vez en cuando y por supuesto que sé sobre las estrellas de MMA, pero no es lo mío. Así que demándenme.
No es que tenga algo en contra de MMA, y tampoco tengo problemas con las personas que siguen apasionadamente esta disciplina como yo lo hago con el boxeo. Simplemente, elijo no mirar MMA. Pero de hecho entiendo y respeto a quienes lo hacen y además no les interesa el boxeo.
Por lo tanto, habiendo aclarado lo anterior, escuché con un poco de escepticismo cuando John Wirt, el duro trabajador CEO de la compañía promocional de Roy Jones, Square Ring, explicaba los detalles de la tarjeta PPV del 21 de marzo que están planeando.
En la tarjeta, Jones hará su regreso después de la derrota despareja ante Joe Calzaghe en noviembre, pera enfrentar a Omar Sheika en su ciudad natal, Pensacola, Fla. No me sorprendió oír lo anterior, ya que yo lo había escuchado y comentado en el segmento de estudio de "Friday Night Fights".
Lo que sí me sorprendió fue que Wirt agregó que la tarjeta también iba a incluir una combinación de combates de boxeo y peleas de MMA.
No es que sea una idea absolutamente extraña porque he visto que se hizo en algunas tarjetas que no tuvieron mucha exposición, pero no en un evento PPV. A pesar de que les deseo el mejor de los éxitos a Jones, Wirt y los muchachos de Square Ring en este experimento, no creo que funcione en este sentido:
Como consumidor de boxeo, no me interesa ver una pelea de MMA, en especial cuando tengo que pagar para verla por PPV. Si tengo que poner dinero para verla por televisión te puedo asegurar que no quiero ver algo que ni siquiera me interesaría ver sin pagar. Por otro lado, estoy seguro que les debe ocurrir lo mismo a los fanáticos de MMA. Hacer que ambos deportes combinen en tarjetas podría hacer que los fanáticos de cada disciplina se sientan defraudados si ven que sus respectivas actividades no tienen el espacio que ellos esperaban dentro de la transmisión.
Y aunque te gusten los dos, al igual que muchas personas, no sé si funcionará. Me encanta en béisbol y el fútbol americano, pero cuando miro un partido de béisbol quiero ver todo el juego. No me gustaría ver tres entradas de béisbol y después de eso un cuarto de un partido de fútbol. Y lo mismo si me siento a mirar un partido de fútbol americano, no me gustaría que interrumpan el partido para hacer algunas entradas de béisbol.
La idea de mezclar boxeo y MMA en un evento, tendría sentido en la teoría, pero en la práctica podría hacer que los fanáticos de cada deporte se aleje más del otro.
Golden Boy Promotions de Oscar De La Hoya se dio cuenta de esto el otoño pasado. Cuando estaba en Las Vegas en septiembre para cubrir la pelea por el campeonato en el peso ligero, Juan Manuel Márquez-Joel Casamayor, Golden Boy y la promotora de MMA, Affliction, llamaron a una conferencia de prensa para anunciar una sociedad entre ambas compañías que iba a marcar la entrada de Golden Boy en MMA y la incursión de Affliction en el boxeo. Para la primera actividad en conjunto, el CEO de Golden Boy, Richard Schaefer, anunció que el evento iba a incluir combates de boxeo y MMA.
En la conferencia de prensa, el vice presidente de Affliction, Tom Atencio, dijo: "Nuestro objetivo es hacer que los mejores luchadores de MMA y los mejores púgiles desplieguen sus destrezas en una misma noche. Creo que los dos mundos finalmente se han fusionado y este es un perfecto ejemplo".
Se ha hablado mucho de hacer que los fanáticos del boxeo conozcan las MMA y vice versa. Pero en mi opinión, no tiene sentido. Si eres un fanático de alguno de estos deportes, ya sabes de la existencia del otro y sin dudas has optado por uno de ellos.
La anterior es la conclusión a la que han llegado Golden Boy y Affliction. Heridos por las intensas críticas con respecto a idea la fusión de ambos deportes en una tarjeta PPV, todo quedó descartado.
Les pregunté a los funcionarios de Golden Boy sobre la decisión un par de meses después y dijeron que, tras evaluar la situación con más profundidad, se dieron cuenta de que no era una idea tan interesante después de todo.
De modo que la primera tarjeta PPV "Day of Reckoning" co-promocionada por Golden Boy y Affliction, el sábado por la noche en el Honda Center de Anaheim, Calif., encabezada por la pelea Andrei Arlovski-Fedor Emelianenko, no incluirá combates de boxeo. Solo serán peleas de MMA.
Al mismo tiempo, a 40 millas de distancia, en el Staples Center en el downtown de Los Angeles, Golden Boy y Top Rank promocionarán Antonio Margarito y Shane Mosley, quienes presentarán batalla por el campeonato en el peso welter ante un estadio replete de más de 18,000 personas y ante millones de televidentes que los verán pelear por HBO. Y, por supuesto, no habrá ninguna pelea de MMA en la tarjeta.

Así es como debe ser.

EL "MACHO" MARGARITO


ESPN

Contrario a lo que todos podrían suponer, Antonio Margarito podría estar mas que presionado el sábado próximo cuando escale al ring del Staples Center de Los Ángeles. Y la teoría es sencilla: Hace seis meses, arriesgaba muy poco ante un campeón consumado como Miguel Ángel Cotto. Hoy, después de su osadía, defiende la reputación del "boxeador más caliente" del momento y lleva en sus puños el sello histórico del boxeo mexicano.
"Yo nací para pelear", le dijo Margarito a Rafael Ramos de ESPN Deportes Radio. "Y sólo voy a salir a hacer mi trabajo".
Desde el 26 de julio del año pasado, cuando logro aquella convincente victoria sobre el puertorriqueño Cotto, Margarito ni siquiera se dio tiempo para reconocerse el mismo como el mejor peso welter del mundo. Lo único que parece importarle, al estilo de los peleadores antiguos, es enfrentar al mejor y cobrar la mejor bolsa posible.
"El que sea... Reté a [Oscar] De La Hoya, pero él prefirió a [Manny] Pacquiao. Y entonces me dijeron que Shane Mosley quería pelear y yo dije que adelante. Yo no me dedico a escoger rivales. Yo sólo peleo. Puedo ganar o perder, pero mi profesión es pelear".
En una época donde los "grandes", entre comillas "grandes", cuidan sus intereses antes de aceptar una pelea, Margarito parece un "viejo guerrero" que vive el día a día y no planifica nada.
"De lo único que tengo que cuidarme es de llegar sano y salvo a casa", dice en tono serio antes de esbozar una ligera sonrisa. "Y de eso se encarga el Señor que esta allá arriba".

Yo salgo a pelear con todo lo que tengo y si el resultado es bueno, magnifico. Si es malo, tendré que ser mejor para la próxima.

--Antonio Margarito
Con sus 37 victorias (27 nocauts), solo cinco derrotas, ex campeón welter de la OMB y actual campeón welter de la WBA, Margarito aprovecho cada instante de su permanencia sobre un ring en el 2008 para meterse en la baraja de los boxeadores con mejor cotización en el mercado actual, pero no sólo eso: También se reservo un sitio como uno de los mejores boxeadores mexicanos de la historia.
"Me gusta... Me gusta. Es atrevido, valiente y nos se guarda nada", dice el legendario Julio César Chávez, considerado por muchos como el más grande boxeador mexicano de la historia. "No muchos quieren enfrentarle porque la tienen miedo".
Si no consideramos a De La Hoya como mexicano, han sido pocos los boxeadores aztecas que se han atrevido en el límite de las 147 libras. Esa parece ser, justamente, la frontera que separa a los boxeadores mexicanos. El mismo Chávez trato de ganar la corona de peso welter cuando estaba en el mejor momento de su carrera, pero luego de verse mal en 12 episodios ante Pernell Whitaker (Álamo Dome, San Antonio, Texas, 1993) decidió que debía quedarse en los superligeros.
"Es una división muy poderosa", dice el presidente del Consejo Mundial de Boxeo, José Sulaimán. "Es un peso que requiere muchos características para triunfar".
Irónicamente, fue la división de los pesos wélters le que se significó como el primer contrato millonario para un boxeador mexicano. En agosto de 1980, luego de 11 defensa exitosas del cetro welter de La AMB (el mismo cinturón que hoy ostenta Margarito), Pipino Cuevas perdió de manera dramática ante Thomas Hearns en el Joe Louis Arena de Detroit. El promotor Bob Arum le pagó un jugoso cheque de 1.5 millones de dólares, la más alta cantidad jamás pagada a un púgil mexicano.
Desde la ciudad de México, Cuevas, ahora exitoso comerciante, lo recuerda bastante bien. "Nos dijeron que no aceptáramos la pelea", cuenta. "Decían que Hearns me iba a destruir, pero había muy buen dinero y no íbamos a despreciarlo".
Nadie puede ni debe comparar a Cuevas con Margarito. Pipino era un clásico "fajador", con una impresionante pegada, pero cuando se le puso enfrente un boxeador completo como Hearns, termino perdiendo la compostura, el campeonato, la carrera y hasta su reputación de gran monarca.
Uno de los últimos rivales que tuvo Pipino Cuevas en su carrera fue ante un chico de Guadalajara, Jalisco, llamado Jorge Vaca, a quién la historia reconocería un poco mas tarde como el segundo mexicano campeón mundial de los welters. Vaca tuvo una noche de gloria y de suerte el 28 de octubre de 1987, cuando en la Arena Wembley, de Londres, y en el octavo round estrello su cabeza ante la del británico Lloyd Honeygahn. Como estaba al frente en dos de las tres tarjetas de los jueces, el triunfo fue suyo y también el cetro welter de las 147 libras.
Apenas unos meses mas tarde, Honeyghan le gano una revancha y Vaca nunca volvió a ser el campeón mundial que todos esperaban.
Habría que considerar también como wélters mexicanos a dos extraordinarios boxeadores: Primero, uno nacido en Cuba, José Ángel El Mantequilla Nápoles, quien fue un extraordinario campeón mundial entre 1969 y 1975 y el otro, sin duda, Carlos Palomino (1976-1978), quien realizó la mayor parte de su carrera en Los Ángeles. Aunque de forma efímera, la historia también reconoce a Genaro León (campeón welter OMB en 1989) y José Luis El Maestrito López.
Margarito quizá no sabe que su nombre no solo esta ubicado ya entre los mejores boxeadores del momento, sino que también tiene un sitio preponderante entre los mejores boxeadores mexicanos de la historia. Pero es no es algo que parezca importarle demasiado.
"Yo salgo a pelear con todo lo que tengo y si el resultado es bueno, magnifico. Si es malo, tendré que ser mejor para la próxima", concluye Margarito.

LA MUERTE EN EL BOXEO






Nunca pensé que iba a sentir jamás sana envidia de una muerte, de unas exequias por ningún ser humano. Pero ese sentimiento ha venido a mi, inexorablemente, con motivo del fallecimiento del gran campeón (los boxeadores nunca dejan de serlo) José Chegüí Torres, con el que me deleitaba a través de sus crónicas publicadas en ESPN.com. Un gran campeón de la actualidad, su compatriota Miguel Ángel Cotto, el presidente de la Organización Mundial de Boxeo, los más afamados escritores de boxeo, la Comunidad puertorriqueña de Nueva York al completo, el mismísimo Gobernador de Nueva York, en definitiva, todos los boricuas y también los neoyorquinos y estadounidenses en general, no en balde fue campeón olímpico bajo su bandera, han proclamado a los cuatro vientos su consternación por el óbito, al igual que la admiración que sentían por su trayectoria pugilística y, con posterioridad, su labor periodística en el mundo del boxeo y de apoyo a la comunidad de La Isla del Encanto, en la ciudad de Nueva York, su ciudad de residencia de hace muchos años, aunque llevara a su Ponce natal y a todo su país, dentro de su enorme corazón. Y la envidia viene dada porque, automáticamente, se me ha ido la memoria al 27 de enero de 2.001 (está a punto de cumplirse ocho años) cuando España perdía a uno de sus campeones universales, el andaluz y onubense de Alosno, Pedro Carrasco, al que denominaban y así se plasmó en una recordada película de 1.968, “El Marino de los Puños de Oro”. Después del ataque al corazón que sufrió y de su repentina muerte, y aparte el recuerdo de sus grandes amigos, como José Legrá, Elio Guzmán e incluso José Sulaimán, que declaró “Es la irreparable pérdida de un ídolo del deporte que vivirá para siempre en los corazones de todos, no sólo por sus hazañas deportivas, sino también por su bondad y hombría de bien”, el resto todo fueron menciones frívolas cuando no nauseabundas, dentro del panorama de la información basura que ha tenido preponderancia en nuestro país desde esa época, y que alcanza hasta nuestros días. Carrasco, que vivió en Brasil desde los nueve años, cuando regresó de Brasil no fue para pelear en España, como muchos podrán pensar, sino para iniciar su carrera en Italia, donde estuvo a las órdenes de Arnaldo Tagliatti, siendo en 1.963 cuando definitivamente se estableció de nuevo en nuestro país, convirtiéndose en un ídolo de masas, al estilo de José Legrá, el futbolista Paco Gento, el tenista Manuel Santana o el motociclista Ángel Nieto. En fin, cualquier tiempo pasado fue mejor, al menos en España, en el terreno boxístico, y si no, que se lo digan a Francisco Javier Castillejo, ocho veces campeón del mundo, y al que no conoce la mayor parte de la población de la piel de toro. ¡Qué pena! Descansen en paz Pedro Carrasco, José Torres y todos los guerreros que tanta gloria dieron y que ahora disfrutan eternamente.

JOSÉ MANUEL MORENO. BOXEO VELEÑO.

Muhammad Alí: "Sus hombros son anchos y hará un gran papel"





Barack Obama, el primer presidente negro en la historia de Estados Unidos, culmina una revolución que inició el boxeador afroamericano Jack Johnson hace 100 años, cuando se proclamó campeón del mundo de los pesos pesados. Una revolución que vivió su clímax cuando Tommie Smith alzó su puño enguantado, el 16 de octubre de 1968, tras ganar el oro olímpico en 200 metros en México: el símbolo del Black Power. Obama tenía entonces siete añitos.
Para Muhammad Alí, Michael Jordan, Tiger Woods y centenares de deportistas de raza negra del fútbol americano, de la NBA, del béisbol estadounidense y del deporte amateur, la llegada a la Casa Blanca de Barack Obama es un momento de reivindicación, de orgullo, de culminación de tantos sueños y esperanzas. Para Allyson Felix, subcampeona olímpica y campeona mundial de 200, supone además la posibilidad de formar parte del equipo del presidente número 44 de EE UU, en el Consejo de Educación Física y Deportes.
Ali presenció ayer en el Capitolio de Washington cómo Obama juró su cargo. "Tenía que estar aquí, no debía perderme esto por nada del mundo", aseguró The Greatest a través de su esposa Lonnie, que estos días siempre habla por él. "Los hombros de Obama son anchos y hará un gran papel", afirmó el boxeador, que en la capital ha celebrado su 67 cumpleaños.
Otro de los asistentes a los actos organizados en Washington fue Tiger Woods, que siempre se ha mantenido apartado de la política, pero que en esta ocasión ha querido que el mundo comparta su felicidad: "Es un momento histórico y, siendo un afroamericano con sangre asiática, no podía perderme estas celebraciones".
A lo largo de la NBA y la NFL, las dos únicas ligas profesionales con mayoría afroamericana, la reacción a la ascensión de Obama al puesto de presidente fue recibida con júbilo. De hecho, varios jugadores de la NBA donaron dinero en favor de la campaña del ex senador de Illinois, como Baron Davis, Stephon Marbury o Shane Battier, que contribuyeron con cantidades cercanas a 2.500 dólares. Otros, como Charles Barkley, participaron activamente en varios mítines celebrados en Alabama.

Seguimiento.
En Nueva York, las pantallas del Madison Square Garden ofrecieron en directo la retransmisión del juramento, la primera alocución como presidente y los festejos. Muchas universidades y colegios retrasaron los entrenamientos vespertinos para que los estudiantes siguieran la ceremonia.

Barack Obama, todo un campeón estatal de baloncesto, llega a Washington con las zapatillas puestas y con un equipo de colaboradores muy aficionado a la NBA. Además, sus dos hijas menores son jugadoras de soccer y se espera que comiencen a jugar en algún parque capitalino.

"ONLY EN AMERICA": DON KING EN LA TOMA DE POSESIÓN DE BARACK OBAMA