Desmiente De la Hoya combate contra Chávez Jr

(Notimex)

El boxeador méxico-estadounidense Oscar de la Hoya desmintió una pelea contra Julio César Chávez Jr. como se ha mencionado en medios impresos en las últimas semanas.
De la Hoya, quien se encuentra en esta ciudad en el marco de la velada en la que intervendrán Víctor Ortiz y el ex campeón mundial Robert Guerrero, quienes son promocionados por la empresa Golden Boy Promotions, hizo la aclaración.
"Ya quiero detener esto. Su papá (Julio César) fue un gran peleador, pero ya paren con eso, por el momento no voy a pelear contra el junior, estoy analizando mi futuro después de la paliza que recibí de Manny Pacquiao", afirmó.
La versión de que Chávez Carrasco buscará vengar las derrotas que sufrió el legendario JC ante el Golden Boy ha salido de la promotora Top Rank y de los dirigentes del junior, pero no hay nada firme en eso.
"Yo respeto al hijo de Chávez, es un joven peleador que promete, pero no voy a pelear contra él", sostuvo De la Hoya, quien puso punto final a ese tema.
En relación a su futuro, mencionó que se siente motivado por los triunfos de Juan Manuel Márquez y sus socios Bernard Hopkins y Shane Mosley, quienes son más grandes de edad que él.
"Platicaré con mi familia si vuelvo a subir al ring o me retiro. En las próximas semanas determinaré mi futuro porque tuve mala noche contra Pacquiao o no hice un entrenamiento adecuado", finalizó.

LA INTELIGENCIA DE MÁRQUEZ CONSIGUE ATRAER A PACQUIAO

Inteligencia, astucia y experiencia mostró el gran campeón mexicano, Juan Manuel Márquez, tras acabar en nueve asaltos con Juan Díaz, el pasado 28 de febrero. A pesar de tener la adrenalina en todo lo alto, y de contar las pulsaciones de su corazón por cientos, tuvo la sangre fría de declarar a los micrófonos de la HBO, que “como Pacquiao no quiere saber nada de mi, ahora quiero pelear con Mayweather”. Tal afirmación nos dejó estupefactos, puesto que son peleadores de distintas divisiones, y porque sabíamos, y así lo expresamos en nuestra crónica de aquel súper combate, que su gran y único deseo es ganar, de una vez, al filipino, y quitarse esa “china” de su zapato. Bien, en los días posteriores la pelea con Díaz, desde el entorno del mexicano y desde Golden Boy Promotions, comenzaron a fomentar la supuesta pelea contra el “Pretty Boy”. Pero, una semana más tarde, el actual número 1 mundial libra por libra, ha confesado en la prensa de su país que “si él (por Márquez), desea pelear conmigo, le daré satisfacción otra vez.”. Después del polémico nulo en el primer combate entre ambos, con tres caídas de “Dinamita” en el primer asalto y una espectacular remontada de este en el resto del combate, y una segunda pelea, con una decisión cerradísima a favor del asiático, todo el mundo, seguidores y promotores, ansían el tercer choque entre ambos, para dilucidar cual de los dos es el mejor boxeador del peso ligero del mundo. “Pienso que habrá más acción en el ring, después de nuestras dos batallas y nosotros necesitamos poner en claro a la gente cual de los dos es el mejor”, “declaró Pacquiao, que se está preparando para su combate del 2 de mayo con el boxeador británico Ricky Hatton. Mientras, Juan Manuel Márquez, de homenaje en homenaje en su país, sonreirá en su casa y pensará que Pacquiao le entró al “capote” y que la cabeza está para algo más que para sostener el tronco. Pacquiao-Márquez III habemus. No me la quiero perder. ¿Y ustedes?

JOSÉ MANUEL MORENO. BOXEO VELEÑO.

Ser campeones de boxeo: El pasaporte para la libertad

EFE.

Los internos de la prisión de Thonburi, situada en las afueras de la capital tailandesa, han encontrado en el boxeo no sólo una puerta hacia la libertad sino también el billete para los Juegos Olímpicos de 2012.
Bajo un inclemente calor tropical, cerca de un centenar de prisioneros condenados por delitos relacionados con las drogas, robo o asesinato se entrenan en el ring de la cárcel, bajo la atenta mirada de los guardas y resguardados por altos muros de hormigón coronados con alambre de espino.
Tras la senda de Amnat Ruenroeng
El sueño de todos ellos es emular a su ídolo Amnat Ruenroeng, un ex convicto tailandés que ganó la medalla de bronce en el Campeonato Mundial de Boxeo Amateur de 2007, celebrado en la ciudad estadounidense de Chicago, y llegó los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Pekín.
Ruenroeng, sentenciado en 2005 a 15 años de cárcel por varios delitos de robo a mano armada, comenzó a entrenarse en el ring de la prisión, donde demostró sus habilidades para este deporte.
Cuando apenas había cumplido dos años de su condena, las autoridades penitenciarias le concedieron la libertad condicional después de ganar un campeonato nacional en la categoría de los pesos pluma.
El duro día a día
Los internos se levantan todos los días de madrugada y tienen su primer entrenamiento entre las seis y las nueve; tras un descanso para almorzar, continúan con los ejercicios y los combates entre las dos y las cuatro de la tarde.
Este duro entrenamiento significa un privilegio frente a la rutina carcelaria del resto de los prisioneros, que pasan la mayor parte del tiempo en las celdas o realizando trabajos en la cocina o en el patio.
Para el director de la prisión de Thonburi, Preeda Nilsiri, "los prisioneros están entrenando para obtener la libertad y ser campeones, para lo que recibirán la ayuda del centro", porque así contribuyen a su rehabilitación.