martes, 15 de septiembre de 2009

El boxeador irlandés Sutherland, encontrado muerto en su casa


EP

El irlandés Darren Sutherland, medallista olímpico de boxeo, fue encontrado muerto en su hogar en Londres, según informó la emisora nacional de Irlanda.
Sutherland, quien ganó el bronce en el peso medio en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, fue encontrado colgado en su departamento por su agente Frank Maloney, informó la página en internet de RTE. "Es muy triste e inesperado. Es una tragedia para Irlanda y el mundo del boxeo", explicó Maloney, citado por RTE

Gabriel Campillo: «Subir los impuestos es un izquierdazo al hígado»


Gabriel (Madrid, 1978) cree que el boxeo da juguetes rotos porque «mucho dinero y poca cultura no se llevan bien». Él es un boxeador que lee. Le gusta Rocky Balboa, «pero si boxeáramos como aparece en el cine, nos mataríamos». Lo de pegar con odio (Alí dixit) dice que es una metáfora: «El odio ciega y en el ring hay que tener la cabeza fría; se pega con el corazón». Es tímido y apolítico. Para él, el sonido de la campana es como el del despertador: «Hay que salir a trabajar». Sólo se pega en el ring.

AMILIBIA LA RAZÓN.

-Acaba de retener su título de campeón del mundo frente a Shumenov y casi nadie se ha hecho eco de su triunfo. ¿Eso duele más que un golpe bajo?
-Duele, sí, pero ya estamos acostumbrados al vacío que se nos hace.

-Casi no se habla de boxeo en los medios...
-Es un síntoma de la hipocresía de esta sociedad: creen que no dando combates en la televisión se evita la violencia. El boxeo no es violencia ni genera violencia. Violencia es pegar sin reglas.

-Entonces, ¿qué es el boxeo?
-Pegar con reglas y sin odio.

-Pero no parece políticamente correcto...
-No lo es, pero solamente en España. Sólo aquí no se televisa el boxeo. No sé si es por motivos políticos o por qué...

-Ah, los políticos. Primero levantan el puño y luego nos golpean con los impuestos...
-Subir los impuestos es un izquierdazo al hígado. A los políticos hay que tenerles respeto: los que tienen el poder son los que más duro pueden pegar.

-Pozuelo: los jóvenes se divierten pegándose con la Policía en la calle...
-Mucho mejor sería que se desfogaran boxeando. Lo de Pozuelo es terrible: no me entra en la cabeza que eso les parezca una diversión.

-Por cierto, ¿usted se divierte pegando?
-Me satisface ganar, pero en un ring no se divierte nadie. Se sufre.

-¿Diría que es un valiente?
-Sí, y no sólo para pegarme, sino en todos los aspectos. Mi lema: quien no se arriesga, no gana.

-Su alias es «chico guapo». ¿Teme que le estropeen la cara?
-Trato de defenderla, pero no me preocupa especialmente. No soy un modelo, no vivo de la belleza.
-Ya. ¿No le hace gracia que le peguen en...?
-De cintura para abajo. Está prohibido, pero siempre cae algo al sur de la frontera.

-¿Se puede ser boxeador y homosexual?
-Claro. Dentro del ring todos somos hombres, y tan fuerte pega un homosexual como un heterosexual.

-Zapatero y Rajoy. ¿Quién le parece más peligroso en un ring?
-Rajoy. Tiene más peso físico que Zapatero.

-¿Le ha dado pena alguna vez pegar a un adversario?
-Nunca he visto a ninguno tan mal como para eso. Además, si está mal, el árbitro para el combate.

-Veinte victorias y dos derrotas. ¿Sabe por qué perdió?
-Una, en Alemania, fue un robo. La otra pelea no debí aceptarla: estaba poco entrenado después de unas vacaciones.

-Un robo. Parece que el boxeo no se libra de ese olor a corrupción...
-Bueno, ya no tiene ese halo mafioso, pero sigue habiendo cosas feas. Hay una parte del boxeo que hay que limpiar.

-Se supone que un campeón del mundo debe ser rico...
-Todavía no lo soy. Yo me conformo con poder comprarme una casa sin tener que meterme en una hipoteca. Estoy en el camino.

-En tiempos de crisis no se puede tirar ni la toalla...