ÁLVARO CARRERA
AS.com
El
1 de diciembre de 2018 Deontay Wilder (42-0-1, 41 KO) y Tyson Fury (29-0-1, 20
KO) se cruzaron en Los Ángeles por el Campeonato del Mundo WBC del peso pesado.
Firmaron nulo en un combate vibrante y la revancha era una obligación. La
habrá, pero hasta que se vuelvan a subir al mismo ring el 22 de febrero habrán
pasado 448 días en los que cada uno ha llevado un camino muy diferente. Este
lunes, ambos púgiles se encontraron por primera vez en la ciudad en la que todo
comenzó. Fue la rueda de prensa previa a su pleito, que esta vez será en Las
Vegas, y tanto el campeón como el aspirante dejaron claro que a la hora de
calentar un combate son los números uno. Fury fue claro, quiere acabar antes
del límite.
"Todo
el mundo piensa que o me noquea o gano a los puntos. Por lo general, cuando las
personas tienen esa opinión, es al revés. Él piensa que voy a salir con mi
famosos estilo herky-jerky, pero quiero que se encuentre conmigo en el centro
del ring y tenga una pelea. El mejor hombre gana. No tuve el gas suficiente
parra acabar con él en la última pelea, pero esta vez voy por el KO. Es la
única manera, estaremos en Las Vegas y no quiero otra decisión dividida. No me
darán nada así. He soñado con el número 2 y quiere decir que lo derribaré en
dos asaltos", espetó confiado el Gipsy King, quien tras el nulo firmó con
Top Rank y ha realizado combates 'sencillos' a priori, pero el último, ante
Wallin se le complicó por un corte.
Además,
el británico hizo una aparición en la WWE, algo que Wilder no olvidó en su
contestación. "¿Creéis que de verdad pueda hacer eso en dos asaltos? Lo
visualizo en la lona, en una posición incómoda… ni siquiera dentro, sino fuera.
Porque como le interesa la WWE lo haré un poco más realista para él”, replicó
el campeón. Podría quejarme de muchas cosas y estar 15 minutos explicando por
qué no aceptó la revancha antes y cambió de entrenadores. A ambos nos dio la
oportunidad de tener dos combates previos. Aunque los suyos fueron más fáciles.
Personalmente llego con más experiencia y seguridad. Es el momento perfecto y
me alegro”, añadió Wilder, quien en este tiempo noqueó en un asalto al retador
oficial WBC, Dominic Breazeale, y durmió con una única mano a Luis Ortiz en su
pleito de revancha.
Ese
duelo con el cubano en noviembre tampoco lo olvida Wilder, quien asegura que
con él maduró. "Aprendí de la primera pelea que necesitar estar más
tranquilo. Voy a ser mucho más paciente en esta pelea, igual que lo fui en la
segunda con Ortiz. El objetivo del boxeo es ganar, no solo ganar asaltos… y lo
hago de manera devastadora", apuntó. No se quedó callado Fury, que
respondió a sus cambios de entrenadores y volvió a reiterar su deseo:
"Subiré al ring, daré una lección de boxeo y le noquearé. Cambié de
entrenadores porque quise, creo que no somos un artículo terminado y siempre
podemos mejorar. No es necesario poner excusas. Subiré allí y le haré sentir la
furia”, concluyó. La temperatura sube a falta de 39 días para la revancha.