El méxico-estadounidense Óscar De la Hoya mencionó que analiza su retiro del boxeo después de la derrota que sufrió ante el filipino Manny Pacquiao en diciembre pasado en Las Vegas, Nevada.
El Golden Boy se encuentra en esta ciudad para promocionar un shampoo que previene la caída del cabello y en conocido foro de la colonia Polanco fue cuestionado de su futuro en los encordados.
"Después de la paliza que me dio Pacquiao estoy confundido. Amo este deporte y lo respeto y es muy difícil para mi divorciarme del boxeo. Mi familia me dice que tuve mucho éxito y debo decir adiós", comentó.
El peleador originario del este de Los Ángeles, afirmó que nació para pelear y lo hace desde los cinco años de edad y que siente pasión por este deporte por lo que tomará la decisión correcta de que sigue o se retira.
Recalcó que el retiro es algo que meditará muy bien pues aunque la derrota ante el llamado Devora Mexicanos fue muy dura, aseguró que todavía tiene la pasión para seguir, por lo que no se quiere ir con un fracaso después de obtener seis campeonatos mundiales en diferente división.
Del momento actual del boxeo mexicano, mencionó que está muy bien y que sólo le faltan peleas a jovencitos que en dos o tres años más serán campeones del mundo y destacó al jalisciense Saúl El Canelo Álvarez, quien es una promesa azteca.
De la Hoya viajará este jueves a Houston, Texas, para estar en la función de Golden Boy Promotions, que estelarizará Juan Manuel Márquez contra Juan Díaz en el Toyota Center.
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