El maestro del ring

Por Brian Doogan
Especial para ESPN.com

Wladimir Klitschko fue atrevido, audaz y completamente dominante en su desmantelamiento del ex campeón del mundo de los pesados Hasim Rahman en el SAP Arena, pero lo que esto demostró fue difícil de discernir.
En la superficie, Klitschko boxeó agresivamente y completó su trabajo sin piedad. Rahman fue sistemáticamente suavizado durante cinco rounds por un jab consistente, manos derechas y ganchos izquierdos que lo dejaron en el piso en el sexto round y el árbitro Tony Weeks intervino 44 segundos de entrado el séptimo round, una movida que no fue detenida por el estadounidense de 36 años de edad.
El entrenador de Klitschko, Emanuel Steward, no fue forzado ni una sola vez a pedirle a su muchacho que incremente su poder o su ritmo, como sucedió repetidas veces cuando Klitschko dio una performance de seguridad contra el ruso Sultan Ibragimov en febrero en el Madison Square Garden. Klitschko hizo bien su trabajo, lastimando a Rahman, castigándolo y terminando con el cuando se presentó la oportunidad.
Pero fue capaz de atacar con impunidad, ya que Rahman ni siquiera amenazó con dar pelea, con lo que algunas de las cuestiones aún perduran. ¿Puede Klitschko pelear cuando también está siendo castigado? ¿Acaso su energía sería la misma contra un oponente que lo golpee duramente y que lo lleve a los últimos rounds?
Claro está, su actitud autoritaria también dio pie a otra cuestión. A los 32 años de edad, ¿Está Klitschko madurando mentalmente y físicamente en el boxeador pesado que un categorizado luchador de 6'6 ½ y 244 libras debiera ser?
Lennox Lewis dijo que su mejor momento fue luego de pasados los 30 años. Lewis elevó a Rahman por sobre su estación cuando el británico tomó a Rahman con liviandad y cedió el campeonato de los pesados por nocaut de quinto round en el 2001.
Quizás Klitschko finalmente esté llegando al tope de su juego. "Como destacó Lennox, cuando pasas los 30 años mejoras y eso es lo que siento está sucediendo con mi carrera", dijo Klitschko.
O quizás, como varios críticos dicen, la división está en un estado tan dilapidado que Primo Carnera podría reinar como campeón, si aún estuviera entre nosotros.
Un testigo que estaba al costado del ring que no quedó impresionado fue el británico David Haye, el ex campeón crucero del mundo que subió a la categoría de pesados y detuvo a Monte Barrett de Nueva York en noviembre. En cuanto concierna a Haye, Klitschko fue el mismo de siempre.
"La pelea fue poco espectacular para mi gusto", dijo. "Hubo demasiados jabs y esperó demasiado para que el muchacho se derrumbara. Quería que el muchacho se cayera antes de dar un golpe fuerte".
Hubo incógnitas en torno a Haye como pesado. ¿Puede genuinamente padecer el golpe de un pesado? ¿Pudo superar desventajas físicas masivas contra Klitschko? ¿Puede permanecer firme en los últimos rounds contra un boxeador más grande?
Su velocidad, movimiento y output de golpes serían superiores a los de Rahman.
"Hay que recordar que esta noche estuvo en el ring contra Hasim Rahman, un muchacho que no pone demasiado, un muchacho fuera de estado que estaba ahí para cobrar un cheque", dijo Haye. "Ese no es el tipo de boxeador que soy. A mi me gusta dar una buena pelea".
Klitschko está ansioso por el desafío. "Se acerca un momento emocionante para el boxeo de los pesados", dijo. "Tenemos a Haye, Alexander Povetkin, contra quien esperaba pelear esta noche antes de que se lesionara, y Chris Arreola en America, con lo que hay mucha emoción para el año que viene".
Aunque hubo pocos fuegos artificiales en Mannheim, Steward quedó impresionado por el trabajo de Klitschko.
"Wladimir no fue negativo en ningún aspecto", dijo Steward. "Boxeó con paciencia, inteligencia y agresión controlada. Rahman fue un oponente peligroso pero Waldimir removió el factor peligro con su efectividad".
Klitschko se perdió un par de ganchos izquierdos en el round de apertura pero conectó con una serie de jabs izquierdos o manos derechas, y su jab demostró ser un golpe clave. Rahman no pudo meterse del lado de adentro, donde podría haber sido capaz de causar disconformidad a Klistchko.
En cambio Rahman sufrió mientras continuamente soportaba el jab de Klitschko. Cuando se retiró a las cuerdas, desplegando su propia versión de enredo de cuerdas de Muhammad Ali, fue castigado un poco más.
Rahman fue apaleado hacia fines del quinto round por otro jab y una fuerte derecha al mentón. Klitschko noqueó a Rahman co un par de ganchos izquierdos al comienzo del sexto round. Cuando Weeks intentó detener la acción en el séptimo round, Rahman se mostró sumiso.
"Hasim Rahman fue realmente castigado y esta es mi función en el ring", dijo Klitschko. "Tengo que mostrar que soy el maestro cada vez que peleo"