PACQUIAO Y MARGARITO ESTAN LISTOS

ESPN.com

Manny Pacquiao y Antonio Margarito ya están en la ciudad y con ellos llegó la parafernalia previa a la pelea de boxeo más grande del año.
Son los protagonistas del combate por el título mediano Jr. del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), que se disputará el sábado en el Cowboys Stadium de Arlington, Texas.
"Vengo listo. Estamos al 100 por ciento", dijo el ex campeón mundial Margarito. "Este campamento me salió muy bien, ya sólo estoy esperando la hora. Estamos preparados para ganar".
Margarito fue el primero que llegó -- el sábado por la noche -- un día antes de realizar actividades promocionales, agenda que incluyó una práctica abierta al público ante miles de aficionados, en su mayoría mexicanos.
"Vengo a ver a Margarito porque sé que será quien detenga al filipino", dijo Juan González, un mexicano residente de Dallas. "Ya es momento de que un mexicano le pegue. Le ha ganado a todos".
Pacquiao (51-3-2, 38 KO's), de 31 años de edad, aterrizó en vuelo privado durante la madrugada del martes en Dallas, acompañado de alrededor de 200 personas, como hizo previo a su combate del pasado 14 de marzo contra Joshua Clottey, también en el Cowboys Stadium.
"A pesar de lo mucho que se habló de que no tuve una buena preparación, que no estuve enfocado, me siento mejor que nunca", dijo Pacquiao vía telefónica antes de viajar a Dallas. "Este es mi trabajo y siempre lo he hecho a mi máxima capacidad".
Personas allegadas al siete veces campeón mundial filipino, encabezados por su entrenador Freddie Roach, señalaron distracciones durante el campamento en su país por sus obligaciones como congresista.
La del sábado será la primera pelea de Pacquiao desde que fue electo congresista de Filipinas y la primera desde que venció por decisión unánime al ghanés Joshua Clottey, en Arlington, el 14 de marzo pasado.
"Tuvimos demasiadas distracciones porque Manny tiene sus ocupaciones como representante popular", indicó Roach la semana pasada. "No estuvo concentrado al 100 por ciento y creo que eso nos puede costar".
Sin embargo, Margarito (38-6, 27 KO's), de 32 años, llegó con sus propios problemas y más complicados que los de su rival.

El Tornado de Tijuana peleará por vez primera en Estados Unidos desde que fue suspendido en enero del 2009 por un supuesto vendaje adulterado previo a su derrota contra Shane Mosley.
Desde entonces, sólo peleó una vez en su país, en mayo pasado, contra una púgil mexicano de poco cartel, Roberto García (28-2).
En agosto recibió la aprobación de Texas para recuperar su licencia de boxeador, luego de las reiteradas negativas de California y Oklahoma.
"Me siento afortunado de tener la oportunidad en esta súper pelea, cuando mucha gente pensaba que mi carrera estaba acabada", dijo. "Yo ya no hago caso a todo eso, sólo me dedico a prepararme. Y eso sólo es una motivación más".
La promotora Top Rank, organizadora de la función, reiteró que esperan más de 60 mil aficionados, que podría acercarlos a la marca para un combate de boxeo bajo techo en Estados Unidos, impuesto en el Superdome de Nueva Orleáns en 1978 con 63,315 asistentes, quienes se dieron cita para ver a Muhammad Ali contra Leon Spinks en combate por el cetro mundial pesado.
En marzo, Pacquiao y Clottey metieron 50,994 personas, la tercera mayor cantidad bajo techo en la historia de este país.
"La respuesta en la venta de boletos ha sido grandiosa", dijo Bob Arum, presidente de Top Rank. "Vamos bien adelante comparado con la pelea de Clottey, así que estoy muy optimista de que llegaremos a la meta".
Arum fundamentó su optimismo con la gran cantidad de mexicanos en Texas y la cercanía con el vecino país del sur que considera apoyarán a Margarito.
"La vez anterior, fue Pacquiao solo (el que llenó Cowboys Stadium)", añadió Arum en referencia a los 50,994 personas que presenciaron su pelea contra Clottey, la tercera mejor marca bajo techo. "Ahora viene un rival muy apoyado en su país".
Pacquiao y Margarito sostuvieron por separado un entrenamiento abierto para los medios el martes, un día antes de su última conferencia de prensa, y el viernes será su último acto público, el pesaje oficial en el estadio, previo al enfrentamiento.
"Esta semana ya sólo necesitamos cuidar el peso y seguir con la velocidad", explicó el entrenador de Margarito, Robert García. "Estamos listos. Créeme que nunca vi a nadie prepararse como él".
Dos fuentes de Top Rank aseguraron que como consesión a Pacquiao, quien busca convertirse en el primer campeón mundial en ocho categorías diferentes, ninguno de los dos podrá pesar más de 150 libras el viernes.