LOS EXPERTOS DICEN NO A LA VUELTA DE MARGARITO

DAN RAFAEL

Desde que el miércoles reporté que Top Rank estaba planeando una pelea para el ex titular wélter Antonio Margarito y que se creía que iba a recibir una licencia de la Comisión de Texas, la reacción de la gente de la industria del boxeo ha sido muy dura.
Varios miembros de la industria me llamaron o enviaron e-mails el jueves para ventilar su disgusto tras leer la historia y no puedo culparlos. Yo mismo me enojé un poco cuando tuve que reportar los hechos, que indican que Margacheato probablemente reciba una licencia para pelear en Texas contra Carson Jones en el semi fondo de la tarjeta Manny Pacquiao-Joshua Clottey, que tendrá el título wélter en juego y se llevará a cabo en el Cowboys Stadium el 13 de marzo (HBO PPV).
Todos sabemos la historia a esta altura, sobre cómo Margacheato y el entrenador Javier Capetillo vieron sus licencias revocadas por la Comisión Atlética de California en febrero pasado, pocas semanas después que se descubriera que los guantes de Margacheato habían sido cargados con protecciones ilegales y una sustancia parecida al yeso antes de pelear (y perder) contra Shane Mosley.
Pocos creyeron en la ignorancia de Margachito y muchos pusieron en duda la legitimidad de sus otros victorias, incluyendo la victoria por nocaut ante Miguel Cotto en la pelea previa a enfrentar a Mosley. Los fanáticos del boxeo alrededor del mundo se vieron disgustados con el descarado intento de hacer trampa y el potencial daño que podría haberle causado a Mosley en una pelea injusta.
Si quieren ver lo que puede suceder en ese tipo de situaciones, simplemente miren el reciente documental de HBO "Assault in the Ring" (acaba de salir en DVD) el cual repasa la historia de la escandalosa pelea de 1983 en el Madison Square Garden en la cual el mediano júnior Luis Resto y diabólico entrenador Panama Lewis quitaron las protecciones de los guantes antes que Resto desfigurara a Billy Collins Jr. en 10 rounds.
Resto y Lewis fueron suspendidos de por vida y cumplieron tiempo en prisión, como merecían. Margacheato, ahora que ha pasado un año desde que le revocaron la licencia, estará elegible para que las comisiones del país puedan otorgarle una nueva chance. Sin embargo, Texas está considerando darle una licencia sin hacerlo pasar por la comisión de California para pedir una. Técnicamente está dentro de las reglas, pero será un horrible decisión si Texas le da la licencia a un tramposo. Es también perturbador que Top Rank y su director, Bob Arum, apoyen esto, especialmente considerando que Arum promovió también la pelea Resto-Collins y sabe mejor que nadie lo que podría haber sucedido si Margacheato entraba al ring con guantes cargados. El director de Main Events Kathy Duva describió la posibilidad de que Margacheato reciba una licencia como algo "¡muuuy errado!" en un e-mail que me escribió. Incluso el mánager de Jones, Bobby Dobbs, expresó sentimientos encontrados.
"Si mi boxeador no recibiera la oportunidad de su vida y un gran cheque, no estoy seguro si pensaría que debe pelear", me escribió.
El e-mail más frontal que recibí fue el del promotor Jeff Wald del show "The Contender".
"De todas las cosas desagradables que he visto en el boxeo, esta está cerca de lo peor", me escribió. "No hay forma que no supiera lo que había en sus guantes. No puedo creer que Arum apoye a este muchacho y lo haga pelear luego de ser responsable de destruir a Cotto, quien también es manejado por Arum. & El resto de los Estados Unidos nunca debería devolverle la licencia y California debería suspenderlo de por vida sin chance de apelación. A Texas obviamente no le importan los boxeadores ni su salud. Panama Lewis fue suspendido de por vida, y lo mismo debería ocurrir con Magarito".