JACKIE KALLEN, LA PIONERA DEL BOXEO

Autor: CÉSAR PANCORVO

Jackie Kallen, se podría decir, ha hecho historia. Es una de esas caras reconocibles, su nombre salta cuando son mencionados boxeadores como Hearns o Toney, es una adelantada a su época que tuvo la perseverancia requerida hasta volverse una pionera. Pasó de periodista del show business a periodista deportiva, de periodista deportiva a publicista, de publicista a manager. Trabajó con Tommy Hearns en los ochentas y, luego, fungió como manager de campeones como Toney –en épocas donde el sobre peso no era problema– y Bronco McKart. En el 2004, Meg Ryan la interpretó en Contra las cuerdas, una suerte de biografía novelada, en una experiencia que ella considera “surrealista”. Es sonriente y sencilla, y responde sin tapujos, sinceramente.
Cuéntanos un poco de tu época como periodista de espectáculos…
Recuerdo con mucho cariño los 25 años que tuve como periodista de entretenimiento. Conocí muchas personas maravillosas y pude viajar a lugares muy interesantes en ese tiempo.

¿Qué hizo que te interesaras por el boxeo, a finales de los años setenta?
Por esos años le hice una entrevista a un boxeador, a Thomas Hearns, y me enamoré del deporte. Todavía sigo enamorada, ¡después de 31 años!

Trabajaste con Tommy Hearns por varios años. ¿Le diste algún consejo luego de sus derrotas contra Leonard, en 1981, o Hagler, en 1985? ¿Fue difícil reestablecer su imagen?
Siempre traté de animar a Thomas después de una derrota. Fue difícil, porque él es un guerrero tan orgulloso, y un profesional dedicado, pero le dije que todos los grandes sufrieron pérdidas y lo importante es cómo te levantas después de eso. Además, es mucho más fácil cuando, tras esas derrotas, te llevas millones de dólares a casa.

¿Cuál fue el problema más grande que afrontaste al ser una mujer manager en un deporte dominado por los hombres?
Pienso que fue difícil tratar de ganar respeto y, además, mucho del hostigamiento sexual fue innecesario y molesto. Pero persistí y permanecí ahí hasta que pude ganarme mi respeto. Mi amor por el deporte era más grande que cualquier molestia hacia algunos de los hombres que estaban en la cima.

¿Cuáles son los cambios más dramáticos que has visto en el boxeo en estas tres décadas?
El boxeo parecía interesar más a la gente hace 30 años. Había solo tres estaciones para escoger, y todas ellas ofrecían boxeo en su programación. Ahora hay estaciones de cable encargadas del boxeo; además, el MMA ha surgido. Muchos fanáticos de boxeo prefieren peleas dentro de jaulas en estos días. Las decisiones de los jueces han estado bastante malas, también, y eso ha apagado el interés de muchos fanáticos. Necesitamos más peleas como Mayweather/Pacquiao.

Has trabajado con muchos boxeadores… ¿Con cuál de ellos te fue más fácil el trato?
La mayor parte de ellos han sido agradables. Bronco McKart fue siempre muy dulce, y también Pinklon Thomas. Damian Fuller es un caballero, así como lo es Jimmy Lange. Me crucé con muy pocos que presentaran problemas.

¿Y cuál boxeador que tú conociste tenía la personalidad más complicada?
Eso es simple: James Toney.

Toney acostumbraba a usar una Estrella de David en los shorts con los que peleaba durante sus años como peso mediano. ¿Influenciaste en esa decisión, no?
James y la mayoría de mis peleadores de los noventas usaron la Estrella de David en honor a mis antepasados judíos. Fue algo que pareció funcionar, así que todos continuaron poniéndoselas en sus shorts.

Cómo tu sabes, Toney todavía es un contendiente peso pesado. ¿Cuál sería tu consejo para él? ¿Crees que puede ganar un título, o debería retirarse?
Yo quiero lo mejor para James. Siempre será como un hijo para mí y tengo un sitio especial en mi corazón para él. Espero que se retire antes que ya no pueda ser capaz de hablar claramente y espero nunca tenga algún daño permanente por los muchos muchos rounds que ha peleado en el cuadrilátero. Ha tenido una carrera increíblemente larga.

¿”Contra las cuerdas”, la película inspirada en tu vida, está más cerca de la ficción o de la realidad?
Es más cercana a la ficción.