La esperanza no se pierde

DAN RAFAEL

El contendiente de peso pesado Cristobal Arreola ha escuchado las innumerables bromas e interrogantes sobre su peso y acondicionamiento, y es el primero en reconocer que nunca va a ganar una competencia de Mr. Universo.
Pero no es que eso sea un problema para él. Habla abiertamente de su amor por las Oreos y le gusta bromear con que una de las formas de perder peso durante el campo de entrenamiento fue dejar de tomar cerveza.
"No tengo un cuerpo musculoso. No soy fisicoculturista y nunca tendré un cuerpo esculpido", dijo Arreola. "Ese simplemente no soy yo. Algunos tipos están armados como Adonis. Parece que yo acabo de venir del campo de juntar naranjas".
Aunque se ha divertido bastante con su humor autocrítico, Arreola también parece haber trabajado duro para ponerse en forma frente a una tarea sobrecogedora. Casi nadie cree que podrá ganar su pelea titular de peso pesado ante Vitali Klitschko en el Staples Center este sábado por la noche (HBO, 10 ET en Estados Unidos, junto con una repetición grabada del combate del sábado pasado entre Floyd Mayweather Jr. y Juan Manuel Márquez).
Arreola, quien apunta a convertirse en el primer campeón de peso pesado de descendencia mexicana, incluso se rió de sí mismo el jueves al subirse a la balanza durante la pesada. Klitschko, de 6'7 pies de altura (37-2, 36 nocauts), arrojó un peso perfecto con 252 libras, pero, Arreola, de 6'4 pies (27-0, 24 nocauts) pesó 272 libras. El público que se había congregado afuera del Staples Center para la pesada soltó una exclamación de horror cuando el presentador del ring Michael Buffer anunció el peso de Arreola.
Pero, aguarden un momento, Arreola sólo estaba bromeando.
De pronto, el residente de Riverside, California, desplegó una gran sonrisa al quitarse la camisa para revelar un chaleco de pesas, el mismo que había utilizado durante sus entrenamientos para ayudarlo a ganar fuerza. Sin el chaleco, Buffer anunció el verdadero peso de Arreola: 251 y listo para la acción.
Nada mal para un hombre que entró en campaña para bajar de peso hace unas 10 semanas, cuando pesaba un poco más de 290. Pero Arreola trabajó. Mientras el entrenador Henry Ramírez se enfocaba en el boxeo, Arreola trabajaba con el entrenador de fuerza y acondicionamiento Darryl Hudson.
"Entrenar para esta pelea ha sido diferente con la ayuda de Darryl Hudson", dijo Arreola, quien rara vez trabajó en la calle antes de ligarse con Hudson. "Tuvimos que subir un nivel y nos encontramos en una posición en la que debíamos entrenar más fuerte. Soy afortunado de tener la oportunidad de pelear por el título, he estado trabajando con todo y seguiré haciendo lo que haga falta para ganar ese título.
"Lo más importante para mí han sido los entrenamientos dobles. Y dejé la cerveza. Simplemente he estado comiendo bien, muchas verduras y vegetales, pollo, pescado y carne. Y la cantidad justa. Tengo muchísima energía y me siento genial. En lo que hace a mi peso en el pasado, es todo culpa mía. Mía y de nadie más".
Arreola, de 28 años, tal vez no haya tenido el físico de un púgil pesado de primera en muchas de sus peleas, pero eso no le impidió noquear a la mayoría de sus adversarios y protagonizar combates emocionantes con sus golpes dobles y su estilo pendenciero.
Pero mientras que Klitschko, de 38 años, tiene una vasta experiencia ante adversarios de elite, el currículo de Arreola es ligero en adversarios de renombre. Su rival más notable fue el ex cuatro veces desafiante Jameel McCline, un contendiente venido q menos quien estaba prácticamente retirado antes de aceptar una pelea de abril contra Arreola, cuando casi no impuso resistencia y fue noqueado en el cuarto round.
Entre su aspecto físico y su falta de experiencia ante luchadores de primera, Arreola tiene todas las de perder ante Klitschko, quien estará compitiendo por tercera vez y defendiendo su título por segunda vez desde que regresó de un retiro de cuatro años (inducido por lesión) hace 11 meses.
"Salimos desfavorecidos 6-1, pero está bien", dijo Dan Goossen, el promotor de Arreola. "No hay nada como salir ahí y demostrarles a las personas que están equivocadas".
Dijo Ramírez, "Muchas personas dicen que sólo estamos haciendo pelear a Cris contra Klitschko por dinero. Puedo asegurarte que no es así. Vamos a quebrar el banco con un triunfo. Cris va a estar a la altura de las circunstancias y traerá a casa el título mundial a los EE.UU.".
Sin embargo, Klitschko está haciendo todo lo posible por minimizar su rol de favorito.
"Cris Arreola es un luchador fuerte", dijo Klitschko. "Es el contendiente oficial, y no es fácil ser el No. 1. Debes demostrar tus habilidades. Lo he estudiado muy bien, sé que tuvo una buena base amateur y, como profesional, sigue invicto. Se mueve muy bien. Tiene combinaciones muy buenas y explosivas. Tiene un golpe fuerte. Tiene todo lo necesario para ser un campeón mundial, excepto una cosa: No tiene la experiencia que tengo yo".
Aunque Klitschko no quiera hablar del tema, su equipo recientemente comenzó a trazar planes para una pelea en diciembre, posiblemente ante el estadounidense Kevin Johnson.
Klitschko lo niega: "No sé nada de una pelea en diciembre. Yo también acabo de leerlo en Internet".
Klitschko insistió que está enfocado en la pelea del sábado.
"Algunas personas me preguntan si estoy subestimando a Arreola y pensando en el futuro", dijo. "Voy paso por paso. No pienso en el futuro porque no hay futuro sin una victoria el sábado por la noche. Nunca he peleado contra alguien con tan buenas marcas como Arreola. Sé que es un buen luchador y me he preparado para la pelea más difícil de mi carrera. ¿Arreola puede vencerme? No lo creo. ¿Puede golpearme fuerte? Tal vez. Podrá golpear fuerte, pero yo lo esquivaré. No me noqueará".
Sin embargo, los rumores sobre los planes de Klitschko para disputar una pelea en diciembre han fastidiado a Arreola.
"Ahora me estoy tomando esta pelea como algo personal", dijo. "Lo que me molesta es que Klitschko me esté tomando a la ligera. Acabo de enterarme de que Klitschko ha fijado una fecha para pelear en diciembre. Aún no me ha vencido y ya está pensando en pelear contra alguien más. Lo considero una falta de respeto. No soy un paseo por el parque. Sí, peleará en diciembre, pero no será por el título mundial. Eso puedo garantizarlo.
"Tengo la oportunidad de ganar. Esta pelea no es por dinero. Estoy aquí para hacer historia. Para mí eso vale mucho más. Me enojó mucho lo de su pelea en diciembre, pero es algo bueno porque me ha motivado para patearle el trasero".