En combate que subió de intensidad en su etapa final, el capitalino Édgar Sosa se recuperó de una caída -que posiblemente él mismo propició ante su afán de agradar más a su público- y terminó por doblegar mediante una amplia decisión unánime en 12 episodios al peligroso noqueador filipino Sonny Boy Jaro, con lo que cumplió su sexta defensa del título universal de peso minimosca del CMB, este sábado por la noche ante una gran entrada en la Arena México.
La izquierda en jab, así como en gancho al hígado o a la cabeza, combinada con su certera derecha, estaba rindiendo frutos y puntos para el muchacho de la colonia Constitución de la República.
Desde el inicio, Jaro se mostró rápido y conocedor del oficio y replicaba con golpes al cuerpo y ocasionales derechas -muchas de ellas fueron esquivadas por el monarca-, y así fueron transcurriendo los asaltos, en los que Edgar tuvo buen cuidado de evitar que la famosa diestra del campeón de Asia y el Pacífico entrara plena a su rostro.
Sosa cometió el error de voltear en los descansos de distintos rounds ante los gritos de un sujeto en ringside que decían que "era su tío". En el noveno round, confundido entre las instrucciones de su esquina y los gritos del imprudente, pero animado en obsequiar a su gente con un triunfo espectacular, de pronto fue sorprendido por un gancho de izquierda que le estalló en la mandíbula y que lo mandó de espaldas a la lona, notoriamente lastimado.
Sosa escupió el protector mientras escuchaba la cuenta de amparo del réferi panameño Héctor Afu. A los ocho segundos se reanudaron las acciones y Afu llevó a Édgar a su esquina para que le enjuagaran el adminículo bucal. Jaro fue por él, pero Édgar evadió su ataque y amarró, lo que le permitió recobrarse y hasta cerrar el round con fuertes descargas a dos manos sobre su retador.
El décimo episodio fue muy emotivo. Édgar se apoyó en su jab y sus bien dominadas fintas para, con ataques intermitentes, recuperar el control del combate. Su iniciativa dio paso también a lucidos intercambios en los que el mexicano sacaba la mejor parte y así se encaminó a un triunfo con tarjetas de 118-109, 117-110 y 117-110.
Sosa, quien en todo momento contó con el aliento de los más de 10 mil espectadores, mejoró a 33-5, 17 nocauts, con 21 triunfos consecutivos. Jaro bajó a 28-8-5, 17 noqueados.
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