jueves, 24 de enero de 2013

GABRIEL CAMPILLO, EL INOCENTE ENTRE LOS CULPABLES

Gabriel Campillo, el inocente entre los culpables
DANIEL MARTÍN
VAVEL.com

Llamó a mil puertas, y solo se abrió una, tras ella estaba Gabriel Campillo mal asesorado por su promotora. A la bestia rusa no la quería nadie, y una luz se debió de iluminar por ahí, en alguna cabeza, que dijo: "Éste, éste para nosotros". Gabriel debió de tener la iniciativa suficiente para negarse, mucho peligro y poco o ningún beneficio. Así estaba la cosa cuando salió al ring lleno de problemas y dudas, ante un Kovalev con las ideas muy claras, ganar.
El mismo promotor que acepta un killer para su protegido es el que luego rechaza a un kazajo con pegada por miedo. Es así, mejor resumido, imposible. No es un palo ni se atiza a nadie, es una realidad demostrada. Gabriel Campillo tuvo que combatir contra una máquina, un pegador con alternativas, mientras que el jefe de su promotora rechaza este tipo de combates para él.
Se ha visto por tanto el vallecano a ofrecer una carta a los compañeros de Prensaboxeo.es donde mostraba gran parte de la realidad, no toda, por respeto y por supuesto, por privacidad. Mientras otros se dedicaban a vender la moto asegurando que "esto era fácil" y que "Gabriel estaba bien preparado", la realidad parecía que poco a poco, se iba a ir imponiendo a las fantasías que se formaron en algunas cabezas.
Pasamos de "Gabriel está bien preparado" al "no se entrenó en Oxnard (EEUU) y eso le pasó factura". "Kovalev es un simple pegador" a "Kovalev es un gran pegador". La gente que cree que el trabajo de Sergio como boxeador (un trabajo excelente, de los más serios, incluso de los que más, del mundo del boxeo) es igual al de director de una promotora se equivoca, y es que aún no ha acumulado ningún mérito positivo, apropiándose de un Campillo ya formado y un Kiko Martínez campeón.
El boxeo no es el fútbol, en un ring se suben dos personas que se juegan algo más que un combate y la respectiva bolsa, son dos guerreros que arriesgan su salud. No podemos permitir que nuestros colores o nuestro pasaporte dicten el juzgar a uno de estos dos combatientes. Gabriel no se merece todas las críticas que le han llovido, pero sí que merece un tiempo de reflexión, pensar. Otros, mánagers y "colaboradores" con complejo de estrellas de cine, deberían replantearse si hacen algún bien al boxeo nacional.

Nota de "Boxeo Veleño": esta es una opinión que como todas las que publicamos con firmas distintas a la nuestra, nos limitamos a exponer en este blog, sin tener que estar de acuerdo ni todo lo contrario en lo que se expone en el artículo, aunque en el caso que nos ocupa y a título orientativo, diré que una persona importante del boxeo nacional e internacional me dijo textualmente horas después de la pelea de Campillo, que a este "le habían llevado ante Kovalev para perder". Así de tajante y así de enigmático.

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