jueves, 2 de junio de 2011
CHAVEZ JR. QUIERE SU PROPIA HISTORIA
DAN RAFAEL ESPN.com
A lo largo de su carrera de ocho años, cuando Julio César Chávez Jr. camina desde el vestuario al ring de boxeo con ese famoso pañuelo rojo alrededor de su cabeza, al igual que su padre, la gente enloquece.
Los fanáticos mexicanos y méxico-americanos del boxeo han seguido fielmente a Chávez desde el día 1. Es por eso que Bob Arum, de Top Rank, tomó un peleador aún no desarrollado y sin ninguna dura prueba, con una reputación de no ser tán activo a la hora de entrenar, y ganar dinero con él encabezando tarjetas de PPV contra oponentes desconocidos.
Esos aficionados fieles han sido un apoyo increíble para Chávez, particularmente a causa de su adoración por Julio César Chávez padre y su deseo de seguir cualquier cosa que tenga que ver con el ex campeón en tres divisiones, que ampliamente es considerado como el mejor boxeador en la historia mexicana.
¿Cómo no iban a apoyar al hijo de su héroe?
La verdad fue, sin embargo, que Chávez no era considerado por muchos en el boxeo como material de campeonato o incluso una perspectiva estelar, razón por la que Top Rank, lo fue dearrollando muy lentamente.
A medida que fue madurando, sin embargo, Chávez, de 25 años de edad, se ha enfrentado a un mejor nivel de competencia, incluyendo una victoria por decisión unánime ante John Duddy, en junio pasado.
"Me motiva y me hace mejor -- todas aquellas personas que me están dudando", dijo Chávez. "Lento pero seguro he mejorado mi competencia, mejorando todo el tiempo, y quiero demostrar a todos que soy capaz de ganar un campeonato mundial".
Chávez tendrá la oportunidad. Él está a punto de unirse a su padre como un campeón del mundo si puede derrotar al campeón mediano Sebastian Zbik de Alemania el sábado por la noche en "Boxing After Dark" (HBO, 10 ET / PT) en el Staples Center en Los Ángeles. Se convertirían en el quinto dúo de padre-hijo en ganar títulos en la historia del boxeo.
Chávez estará apuntando al título, aunque es un cinturón devaluado que le fue despojado al campeón lineal Sergio Martínez y fue entregado al titular interino Zbik a principios de este año, en la misma ciudad donde su padre ganó su primer campeonato del mundo, dando a la tarjeta llamada "El Hijo también asciende ", aún más significado.
"Esto es por todo o nada. Esto es todo. Esta es la grande y lo sabemos y estamos listos para ella", dijo Freddie Roach, quien estará en su tercera pelea como entrenador de Chávez.
En la primera pelea televisada, el peso pluma Miguel Ángel Mikey García (25-0, 21 KOs) de Oxnard, California, regresa a HBO por segunda pelea consecutiva, para hacer frente al mexicano Rafael Guzmán (28-2, 20 KOs), que reemplazó al lesionado Miguel Beltrán Jr. el miércoles.
Top Rank transmitirá los combates no televisados a partir de las 7 pm ET en www.toprank.com, incluyendo la eliminatoria por el título mediano Jr. entre Vanes Martirosyan (29-0, 18 KOs), de Glendale, California, y Saúl Román de México (34 - 8, 29 KOs) y el regreso de la estrella femenina de peso mediano Jr. Christy Martin (49-5-3, 32 KOs) en una pelea de seis asaltos contra Dakota Stone (9-8-5, 1 KO), a quien Martin superó en 10 rounds en septiembre de 2009, la última pelea de cada una. Martin está intentando un regreso después de haber sido baleada, apuñalada y dada por muerta, presuntamente por su marido, Jim Martin, en noviembre.
“México es un país que tiene una gran tradición de boxeo y en este momento el boxeo está en auge en México. Que Julio gane un título mundial sería enorme para el pueblo de México. ” -- Bob Arum, promotor de Chávez Jr.
Chávez padre tenía récord de 43-0 -- el mismo número de peleas que tiene su hijo ahora -- cuando noqueó a Mario Martínez para ganar un título vacante de peso ligero Jr., en el Auditorio Olímpico de Los Ángeles en 1984. Chávez padre pasaría a tener una carrera ilustre, ganando los títulos ligero y welter Jr.
Chávez Jr. conoce la historia, pero ciertamente no está enfocado en ella.
"Se trata de diferentes épocas y lugares diferentes", dijo Chávez. "Él ya ha hecho su historia y yo quiero hacer mi propia historia. Espero que los fans estén ahí y espero que tengamos una buena noche histórica en el Staples Center el sábado".
Chávez padre consiguió su 107ª victoria, y última de su carrera, contra Ivan Robinson en el Staples Center en el 2005. Y sólo una semana después de que su hijo pudiera ganar un título mundial, Chávez padre, elegido en su primer año de elegibilidad, será inducido al Salón de la Fama Internacional del Boxeo en Canastota, NY.
Con un padre tan famoso, sin mencionar que comparten el mismo nombre, Chávez Jr. (42-0-1, 30 nocauts) siempre estuvo en el centro de atención y ha mantenido un alto nivel. Él acepta eso, pero dijo que está listo para ganar un título y salir de la sombra de su padre, por lo menos tanto como sea posible.
"Este es el campamento de entrenamiento más duro en el que haya estado", dijo Chávez Jr.. "Me estoy preparando como nunca antes lo hice para una pelea y sé lo importante que es [la pelea] para mí y mi carrera. Esto es muy bueno para mí y estoy muy emocionado y feliz que estoy luchando por mi primer título mundial en la misma ciudad donde mi padre ganó su primera [corona]. Mi padre también entrará al Salón de la Fama y él se ganó ese derecho, y estoy contento por él. Pero en este momento ni siquiera estoy pensando en eso. Estoy pensando en mi pelea y en ganar un título mundial. Esta es la oportunidad perfecta para mí para crear mi propia historia. Mi nombre es Julio César Chávez, ahora y siempre lo será, y estoy muy orgulloso de llevar ese nombre. Estoy listo para ganar el título y decidir mi propia historia y mi propio legado".
Parte de crear su propio legado fue la decisión de Chávez el año pasado de buscar a Roach.
"Siempre he creído en el talento de mi hijo y pensé que podía llegar a este punto, pero yo sabía que necesitaba un muy buen entrenador, alguien como Freddie Roach, que pudiera sacarle todo el jugo", dijo Chávez padre. "Me siento muy confiado que puede ganar esta pelea porque sé cuan duro ha trabajado con Freddie".
Entrenaron durante aproximadamente un mes antes de la pelea de Duddy y sólo durante tres semanas antes de la última pelea de Chávez, una decisión de 10 asaltos contra Billy Lyell en enero. Este campo de entrenamiento ha sido mucho más largo y más intenso.
"Este ha sido un campamento largo y mi condicionamiento es excelente", dijo Chávez. "Me siento muy bien y pasé tanto tiempo con Freddie que ahora nos conocemos mejor. Para mí, mi mejora general ha sido excelente. Todo ha sido mejor, sobre todo mi condición física. [Roach y el entrenador de fuerza Alex Ariza] me han llevado a otro nivel. Estoy aprendiendo algo nuevo cada día. Con la condición en la que estoy ahora puedo hacer lo que me pidan y eso es un gran paso".
Roach, un entrenador exigente, dijo que estaba complacido con la ética de trabajo de Chávez.
"Será fantástico ganar el título mundial", dijo Roach. "Hará que su padre y yo nos enorgullezcamos. Sé que Julio está en gran forma parar hacer eso y ha hecho todo lo posible para estar listo para esta pelea. Ha respondido muy bien a todo lo que le he pedido. Julio es una gran persona y será un gran campeón para el deporte. Creo que va a tener el título con honor y lo va a defender bien".
Zbik (30-0, 10 KOs) se ha enfrentado a varios de los pesos medianos más importantes de Europa, pero aún no ha sido probado contra los mejores boxeadores de las 160 libras del mundo.
"Será una noche de primeras veces para mí -- mi primera defensa del título de peso mediano del CMB, mi primera pelea en los EE.UU. y mi primera pelea en HBO," dijo Zbik. "Sé que Julio estará listo para el reto, pero voy a estar listo para él. Será una noche de primeras veces para él también. Su primera derrota".
Zbik, de 29 años de edad, entrenado por el ex campeón de peso ligero Artur Grigorian, clamó un título interino en el 2009 y tuvo tres defensas antes de que le entregaran el título de Martínez. A pesar de la forma extraña que Zbik obtuvo su cinturón, Chávez dijo que le toma muy en serio.
"Creo que es peligroso porque es un campeón del mundo", dijo Chávez. "Sé que es un gran boxeador y sé que él viene a pelear. Esta es la pelea más importante de mi carrera y él piensa que es la pelea más importante de su carrera también. Él quiere ser conocido y esto le dará la oportunidad".
Por popular que Chávez ya sea -- Top Rank espera una multitud de cerca de 10.000 personas -- ganar un título probablemente aumentaría su mirada en los ojos de los aficionados mexicanos y le daría mayor credibilidad en los Estados Unidos.
"México es un país que tiene una gran tradición de boxeo y en este momento el boxeo está en auge en México. Que Julio gane un título mundial sería enorme para el pueblo de México", dijo Arum. "Diecisiete por ciento de la población en los EE.UU. es de origen hispano de los cuales la gran mayoría son mexicanos, así que obviamente, si Julio gana el título, eso mejorará su marketing no sólo en México sino en Estados Unidos.
"Según recuerdo, antes que Julio César Chávez padre peleara por un título tuvo muchas peleas no titulares y era muy conocido por los aficionados mexicanos, y cuando finalmente peleó por el título mundial [en el Olympic Auditorium], salieron a apoyarlo. Poco a poco, fue tomando más y más fanáticos hasta convertirse en una de los más grandes atracciones de su época en el boxeo. Con suerte, Julio Jr. alcanzará el nivel en el que tenga el mismo tipo de fieles fanáticos".
Chávez cree que está listo.
"Yo crecí en el boxeo. Toda mi vida he visto cómo el boxeo fue bueno para mi padre y yo siempre quise ser parte de ese mundo", dijo. "Quiero hacer un nombre para mí. Tengo mucho hambre de dejar mi huella en este mundo, para ser alguien en este mundo y creo que el boxeo me ha dado la oportunidad de hacerlo. Estoy tan hambriento como cualquier otro muchacho y quiero ganar un título mundial al igual que cualquier otro boxeador".
No es cualquier otro boxeador sin embargo. Él es el hijo de la JC Superstar. Las comparaciones siempre estarán presentes.
"Las expectativas de un montón de gente dicen que debiera ser como yo, pero no es como yo", dijo Chávez padre. "Es un peleador diferente y tiene diferentes herramientas. Quiero que gane el campeonato por su propio legado, no el mío. Sin duda alguna, que mi hijo pelee por un título mundial es más importante que yo entre en el Salón de la Fama. Mi carrera ha terminado. Su carrera comenzará el sábado por la noche".
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