miércoles, 9 de marzo de 2011

"ME PLANTEARÁ UN DESAFÍO AÚN MAYOR"


CLARÍN.COM

En sus valijas, esas que están en su hogar estadounidense de Oxnard, ya no hay mucho espacio. Pero no hay caso. Sergio Maravilla Martínez (46-2-2; 25 KO) ya avisó que el sábado, en Mashantucket, Estados Unidos, ganará otro cinturón. “Voy a traerme ese cinto aunque no sepa dónde guardarlo, je”, le anticipó a Clarín el quilmeño rival del ucraniano Sergiy Dzinziruk (37-0-0; 23 KO) por el cetro mediano diamante del Consejo Mundial de Boxeo (WBC).
Martínez, a los 36 años, busca y encuentra. Su presente es mejor que su apodo. Tras el furibundo nocaut que le propinó en noviembre a Paull Willimas -recibió un zurdazo y cayó como un poste -, tocó el cielo con los puños. El CMB lo eligió el mejor boxeador peso por peso del año (sobre Manny Pacquiao o Floyd Maywether, por ejemplo), fue tapa de la mítica revista estadounidense The Ring , lo elogió Freddie Roach (entrenador del Salón de la Fama), pelea por bolsas millonarias y sueña con Manny Pacquiao, Floyd Mayweather y Miguel Cotto.
Ante Dzinziruk será un combate difícil, pero no riesgoso. Así lo certifica Martínez. “Es que Dzinziruk no vendrá a buscarme, su estilo es conservador y defensivo y eso me planteará un desafío aún mayor”, dice. Y si de desafíos se trata, ahí está él parando la oreja.
Es que hace ya ocho semanas que se está entrenando a las órdenes de los hermanos Pablo y Gabriel Sarmiento. Los entrenadores argentinos, muy reconocidos en España, le sacan más brillo a este diamante experimentado. No descuidan detalles.
Tanto que el estadounidense Austin Trout (campeón superwelter de la Asociación Mundial de Boxeo) y el puertorriqueño Daniel Santos (ex campeón welter y superwelter) fueron sparrings de Martínez porque ambos son zurdos, al igual que Dzinziruk. El se esmera por seguir escalando. Dijo siempre que se levantaba a las 5 de la mañana. Pero ahora revela que arranca la jornada de triple turno ¡a las 4! Estudioso y disciplinado, ve mucho boxeo, de antaño y de ahora. Y, lógico, ya le hizo una radiografía a Dzinziruk, quien es campeón supewelter de la Organización Mundial de Boxeo. Observó algunos videos y revela: “Lo voy a ir a buscar en los cruces y, fundamentamente, en las contras; le haré mucho daño”. El pesaje del viernes será casi un trámite. Está sólo 500 gramos excedido. Sí, sus dos guantes de 280 gramos pesan un poco más.

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