Por GUSTAVO NIGRELLI
La semana pasada, un nuevo triunfo afuera -en Connecticut, Estados Unidos- del nacido en Quilmes, Provincia de Buenos Aires, Sergio Maravilla Martínez, por KOT 7 ante el armenio Anchak Tel Meliksetian, volvió a despertar la silenciosa admiración de toda la población boxística argentina, aunque -como de costumbre- tuvo poca repercusión.No fue un triunfo más, ya que Maravilla es el retador oficial al título mundial superwelter, nada menos que del CMB -la entidad más prestigiosa-, al que se hizo acreedor el año pasado ganando una eliminatoria. Por entonces el campeón era el estadounidense Vernon Forrest, quien le había ganado el título vacante a quien clonó boxísticamente a Maravilla en cuanto a manejo empresarial, el santafesino Carlos Baldomir.Pero en la misma velada de Connecticut de la semana pasada, Forrest, quien tenía la obligación de darle la chance en breve al argentino, resignó su corona CMB ante el invicto mexicano-estadounidense Sergio Mora, que no es otro que el vencedor del reality El Contender I. Y -según dicen- Maravilla, que está radicado en España, pero es manejado internacionalmente por el promotor yanqui Lou Di Bella, ya tendría firmada una pelea titular para este año contra Mora, ya que no es casualidad que ambos hayan participado de la misma velada.Mora, con su boxeo especulativo y contraofensivo le ganó por puntos en fallo mayoritario a Forrest, mientras que Martínez por KOT 7 a un lungo armenio de 16-6-0, 13 KO, que había comenzado bien su carrera y se desbarrancó en los últimos dos años perdiendo 6 combates, uno de ellos ante el propio Mora, casualmente por idéntico resultado que ante Maravilla, es decir, KOT 7.Hasta aquí, todo informativo. Hay quienes calculan que Mora será más accesible para Martínez que lo que podía serlo Forrest, pero a decir verdad, será un duelo de estilos similares, en el que tal vez prevalezca quien mejor padrino tenga, o más atractivo sea para alguna cadena de TV.EXPORTACION PELIGROSA.
Lo cierto es que Maravilla, quien a lo largo de su extensa carrera sólo perdió un combate, y lo hizo ante el azteca Antonio Margarito -un top mundial-, cuando aún estaba verde, desde hace mucho que se desarraigó de nuestro país, y lo seguimos con señales de humo, o como si fuera un extranjero.Lo mismo va a pasar dentro de poco con el resto, y camino a ello va otro con similar -aunque incipiente- situación a la de Maravilla, el santafesino Marcos Maidana, del que nada se sabe hasta que llega el día del combate, incluso si está o no en el país, o dónde (Santa Fe, Pergamino, Panamá).Está llegando el momento en que el boxeo argentino exporta la carne de 1°, y acá quedan los cortes. Salvo excepciones -de una vez al año-, a los que pelean afuera ya no se los puede ver más, como si hubiera una cláusula. Maidana se cansó de pelear ayer nomás contra cada bagre, y ahora no puede ni asomarse. Lo mismo pasa con el resto de los que llegan. Nadie pide Maidana-Matthysse, o Maidana-Cuenca -aunque debiera-, pero hay para elegir dentro del montón. Por supuesto, dirán que estos piden sumas astronómicas para enfrentarlos, pero no menos cierto es que generalmente le agrandan los colmillos al león.Y para Maidana, Maravilla -o los que sean, Narváes, Barrios, Garay, Mamani, Luján, sólo por hacer menciones-, lo mismo da entrenarse gratis que subir a pelear a nivel casero y ponerse a punto contra cualquiera, sin exigir fortuna, evitando hacer que ayer por la noche peleen por TV Javier Maciel -fondista de apenas 6 peleas- y Leonel Murature -de 10-, encabezando la programación, que el miércoles estaba desierta y cada vez cuesta más armar. Lo hicieron en su momento Coggi, Vásquez, Castro, cómo no lo van a poder hacer estos.
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