VERSIÓN DE JOAN: Durante el fin de semana también tuve la oportunidad de escuchar en un canal de TV local la versión de Joan Guzmán sobre su decisión de abandonar la faja mundial de las 130 libras. Fue una exposición muy sosa, muy desabrida, con poca credibilidad; él alegaba en medio de un vacío mental que dura mucho tiempo entrenando, que nadie quiere pelear con él, que se disgustó con las constantes posposiciones del pleito en Escocia y otros argumentos de ese tipo, pero ¿qué? Qué tiene que ver eso con renunciar a la corona del mundo, si nadie lo está obligando a hacerlo, supuestamente. Sólo porque se pospuso el pleito y todos le huyen supuestamente; si fuese así, entonces en todas las categorías le ocurrirá lo mimo y tendrá que retirarse. Yo no puedo inventarme una versión ni crearle una a Joan, pero todo el mundo sabe de las malas relaciones existentes entre la OMB y el monarca dominicano a raíz de un sometimiento a la justicia del presidente del organismo por una supuesta violación a una joven menor de edad, aquí en Santo Domingo hace cuatro años, caso que terminó en una supuesta trama preparada por el antiguo manejador de Joan, Rafael Guerrero, y el propio campeón, contra Francisco ‘Paquito’ Valcárcel. Todo está ahí, en ese problema personal, del cual ninguna de las partes se librará nunca.OTRA VEZ: Ahora Joan es colocado No.1 del peso ligero por la OMB, el campeón es Nat Campbell, quien también reina en la AMB y FIB. Creo que es una gran oportunidad para que el problema llegue a su final o por lo menos se disipe, si el dominicano puede vencer a Campbell podría darle las “gracias” a Valcárcel y simultáneamente devolverle su corona ligera OMB y continuar lo que le quede de carrera con las correas de las demás entidades. Si es que puede lograrlo, frente a Campbell es posible. Remover esta historia, muy asquerosa por cierto, no le conviene a Valcárcel como hombre público y prestigioso abogado internacional, pero nadie es tonto y cuando se toman este tipo de medida hay que irse al fondo. Tampoco le conviene al humilde “Hijo de Guachupita”, pero mientras ocurran estos despojos por venganza hay un país de por medio, por encima de Joan y eso podría traer otro tipo de repercusiones. Es bueno que la OMB tenga bien claro que un campeón mundial representa una bandera, es un embajador deportivo de un país y que en dos ocasiones ha ocurrido igual. ¿Tendremos que esperar la tercera? Quizás Joan y su séquito estén esperando ese momento para desahogarse, yo no tengo que esperar tanto para recordarle a todos ese caso tan vergonzoso que salió de los estrados dominicanos al ring, para imponer una marca: es la única ocasión en que un boxeador ha sido despojado de dos coronas mundiales en categorías diferentes y en tiempo diferente, teniendo el boxeador que fingir que renuncia a ellos.
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