El campeón del peso completo de la Organización Mundial de Boxeo, Wladimir Klitschko, recibió hoy un cinturón que lo coloca en el selecto grupo de púgiles galardonados por la OMB con la faja de supercampeón. Para sorpresa de Klitschko, el cinturón de supercampeón no fue el único premio que recibió durante su visita hoy a los Centros Sor Isolina Ferré en el sector La Playa de Ponce, ya que los organizadores del evento aprovecharon para celebrar el cumpleaños número 32 del boxeador. Durante su visita a los Centros Sor Isolina, Klitschko compartió atento y amigable con un grupo de jóvenes y niños participantes de los programas de esa institución, mientras que los niños observaban con admiración al fornido boxeador que mide seis pies y seis pulgadas de altura.
Con sencillez, Klitschko agradeció al presidente de la OMB, Francisco “Paco” Valcárcel, por la invitación que le cursó ese organismo deportivo para visitar Puerto Rico para recibir el cinturón y participar en varias actividades junto a otros campeones y boxeadores de Puerto Rico, tales como Iván Calderón, Juan Manuel López, Carlos “El Indio” Quintana, y leyendas como José “Chegüi” Torres. Klitschko dijo sentirse muy a gusto por la calidez con la que fue recibido durante sus comparecencias públicas en Puerto Rico.
“Quien iba a pensar hace poco más de un mes atrás cuando estaba entrenando y recibí la llamada de Paco, que estaría estos días en Puerto Rico”, indicó Klitschko refiriéndose a una llamada telefónica que le hizo el Presidente de la OMB, previo al combate celebrado el pasado 23 de febrero en el que Klitschko se alzó frente al ruso Sultan Ibragimov, y recuperó así el título de peso completo de la OMB. Fue en esa conversación telefónica que surgió la posibilidad de que Klitschko viniera a Puerto Rico.
Anterior a su victoria de febrero pasado, Wladimir Klitschko había ostentado el título de campeón de la división pesada de la OMB entre 2000 y 2003. El púgil mantiene récord de 50 peleas, 44 ganadas con KO, y tres derrotas.
Para Klitschko compartir con grupos de niños y jóvenes que le prodigaron admiración no es una experiencia nueva ya que el púgil concentró sus estudios doctorales en la Universidad de Kiev en examinar cómo los controles pedagógicos sobre estudiantes amateur entre las edades de 14 a 17 inciden en el desarrollo deportivo de los jóvenes atletas. En sus estudios doctorales, Klitschko encontró que los sistemas de entrenamiento demasiado rígidos en jóvenes atletas que están en crecimiento y en desarrollo de su personalidad, pueden incrementar el grado de inseguridad y frustración más que ayudar a desarrollar el potencial deportivo de esos atletas. El balance está, a juicio de Klitschko, en que los entrenadores sepan encaminar a los jóvenes con una estructura de formación deportiva disciplinada, pero también tomando en cuenta fortalecer la personalidad de los jóvenes en la consecución de las metas deportivas.
“Hemos querido que Wladimir comparta con los niños del Centro Sor Isolina porque él representa el desarrollo pleno que puede obtener un atleta, destacándose no sólo en el boxeo, sino también como estudiante. Wladimir es un gran ejemplo para los jóvenes sobre lo que es tener disciplina y amor por el deporte y los estudios. Nosotros también apreciamos el gran sentido de amistad que nos otorgó durante su visita”, indicó Valcárcel.
Wladimir, y su hermano Vital Klitschko, se han convertido cada uno por sus propios méritos en dos figuras reconocidas del boxeo internacional, ocupando ambos los escalafones más altos en las divisiones de pesos completos en diversos organismos que sancionan el boxeo mundial.
Con sencillez, Klitschko agradeció al presidente de la OMB, Francisco “Paco” Valcárcel, por la invitación que le cursó ese organismo deportivo para visitar Puerto Rico para recibir el cinturón y participar en varias actividades junto a otros campeones y boxeadores de Puerto Rico, tales como Iván Calderón, Juan Manuel López, Carlos “El Indio” Quintana, y leyendas como José “Chegüi” Torres. Klitschko dijo sentirse muy a gusto por la calidez con la que fue recibido durante sus comparecencias públicas en Puerto Rico.
“Quien iba a pensar hace poco más de un mes atrás cuando estaba entrenando y recibí la llamada de Paco, que estaría estos días en Puerto Rico”, indicó Klitschko refiriéndose a una llamada telefónica que le hizo el Presidente de la OMB, previo al combate celebrado el pasado 23 de febrero en el que Klitschko se alzó frente al ruso Sultan Ibragimov, y recuperó así el título de peso completo de la OMB. Fue en esa conversación telefónica que surgió la posibilidad de que Klitschko viniera a Puerto Rico.
Anterior a su victoria de febrero pasado, Wladimir Klitschko había ostentado el título de campeón de la división pesada de la OMB entre 2000 y 2003. El púgil mantiene récord de 50 peleas, 44 ganadas con KO, y tres derrotas.
Para Klitschko compartir con grupos de niños y jóvenes que le prodigaron admiración no es una experiencia nueva ya que el púgil concentró sus estudios doctorales en la Universidad de Kiev en examinar cómo los controles pedagógicos sobre estudiantes amateur entre las edades de 14 a 17 inciden en el desarrollo deportivo de los jóvenes atletas. En sus estudios doctorales, Klitschko encontró que los sistemas de entrenamiento demasiado rígidos en jóvenes atletas que están en crecimiento y en desarrollo de su personalidad, pueden incrementar el grado de inseguridad y frustración más que ayudar a desarrollar el potencial deportivo de esos atletas. El balance está, a juicio de Klitschko, en que los entrenadores sepan encaminar a los jóvenes con una estructura de formación deportiva disciplinada, pero también tomando en cuenta fortalecer la personalidad de los jóvenes en la consecución de las metas deportivas.
“Hemos querido que Wladimir comparta con los niños del Centro Sor Isolina porque él representa el desarrollo pleno que puede obtener un atleta, destacándose no sólo en el boxeo, sino también como estudiante. Wladimir es un gran ejemplo para los jóvenes sobre lo que es tener disciplina y amor por el deporte y los estudios. Nosotros también apreciamos el gran sentido de amistad que nos otorgó durante su visita”, indicó Valcárcel.
Wladimir, y su hermano Vital Klitschko, se han convertido cada uno por sus propios méritos en dos figuras reconocidas del boxeo internacional, ocupando ambos los escalafones más altos en las divisiones de pesos completos en diversos organismos que sancionan el boxeo mundial.
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