"MARAVILLA" Y SU RENUNCIA EQUIVOCADA

DIEGO PILATTI ESPN.com

Luego de la conferencia de prensa que ofreció Sergio Martinez desde Buenos Aires, antes de terminar el 2011, muchos nos preguntamos qué papel hizo con sus renuncias. De héroe, de villano o de tonto.
El argentino campeón mediano, como ustedes recordarán, anunció que no volverá a pelear para el Consejo Mundial de Boxeo, ni tampoco lo hará para la cadena HBO, tras anunciarse la pelea entre Julio Cesar Chavez Jr. y Marco Antonio Rubio para el 4 de febrero próximo.
Hay que recordar que en el último congreso del CMB se había decidido ordenar la pelea obligatoria entre Martinez, legítimo campeón de las 160 libras, y el campeón ocupante o de papel o como Uds. quieran llamarle. Nos referimos a Chavez Jr.
Martinez dice que José Sulaimán le pidió que diera un paso al costado y su reacción fue la ya conocida. Desde el punto de vista ético, estamos de acuerdo con Martinez, al menos en dar la patada contra el CMB. El organismo ratificó que es un barco sin timón, abierto a cambiar de rumbo según el lado en que sople el viento. Sin embargo no coincidimos con su renuncia a HBO, una cadena privada de TV que compra lo que le conviene y poco o nada le importan los títulos o merecimientos. Para la TV importa la taquilla y punto. El rating manda. El desaire de Maravilla Martínez es como darse un disparo en su propio pie y considero que si eso fue una estrategia, la misma nació equivocada.
El reclamo al CMB es correcto, pero no veo razones para abandonar el barco. ¿No hubiera sido más adecuado recurrir a la justicia para pelear por sus derechos? ¿Cuánto dinero ha perdido y perderá Martínez por las erradas decisiones del CMB?
A Martinez ya no le quedaban rivales de taquilla, excepto Chávez Jr. Era su última gran bolsa y se la birlaron en forma injusta. En la conferencia, incluso, aseguró que el presidente del CMB mintió al informar que Martinez había autorizado la pelea entre Chávez y Rubio. ¿No amerita eso para un reclamo como otros ya lo han hecho en circunstancias similares y la justicia les dio razón? Aún más, en sus más recientes declaraciones a ESPN, el presidente del CMB volvió a caer en contradicciones al reconocer que con Martinez se cometió una injusticia y dijo, además, que el CMB desconoce oficialmente esa pelea (Chavez Jr vs. Rubio) porque no se comunicaron los organizadores con el Organismo. Si esto último es verdad o bien miente Martinez al declarar que Sulaimán le pidió que diera un paso al costado o miente el presidente del CMB al salir a negar una pelea ya autorizada. ¿Quién tiene razón? ¿Tal vez no le asiste al CMB algo de razón, si autoriza una batalla entre el campeón y el primer clasificado? ¿No habrá sido mal asesorado Martinez cuando aceptó ese título de Diamante, el que probado está solo sirve para complicarle la carrera al que lo ostenta?
Lo que sí está claro, es que Lou Di Bella, el representante de Martínez, no supo manejar el momento con astucia y visión comercial. La conferencia de Martínez, en pocos días será historia y lamentablemente su decisión no cambiará el curso de los acontecimientos. El 2012, tal vez como nunca, nos va a demostrar que este deporte ha cambiado para siempre y se ha convertido apenas en un gran espectáculo de circo, donde valdrán los nombres y no los títulos. Y no importan las decisiones por grotescas que parezcan, solo importara la rentabilidad del negocio como tal. Chávez Jr. enfrentará al rival que le elijan con el dedo, el mundo no se detendrá, Maravilla será olvidado, en algún momento del futuro cercano colgará los guantes y se transformará en una estadística.
Me suena absurdo hasta reconocerlo, pero el boxeador que para muchos merece ser considerado el mejor libra por libra, terminó el 2011 noqueándose a sí mismo. ¡Vaya manera de empezar el año!