lunes, 11 de febrero de 2008

LA HISTORIA DE RUBIN "HURACÁN" CARTER





No estoy en la cárcel por asesinato. Estoy en la cárcel porque soy un negro
en Estados Unidos de América, donde quienes ostentan poder sólo
permitirían a un negro ser un bufón o ser un criminal.”
Rubin Carter, entrevista en 1975.

Corría el año de 1966 cuando la carrera del púgil Rubin “Huracán” Carter subía como la espuma. Al menos dentro del cuadrilátero, pues su condición de negro en Estados Unidos le seguía haciendo sufrir problemas de racismo. En ese mismo año hubo un triple asesinato en un bar cercano en donde el “Huracán” había estado esa misma noche. Era el principal sospechoso de las autoridades. Algunas investigaciones apuntaban a su culpabilidad. Era un ex-convicto. Era negro.
Catorce años, y tras conocer la biografía del boxeador, un muchachillo decide estudiar su caso. Tal es su interés y tan poderosas las evidencias que encuentra, que sus esfuerzos abren de nuevo la investigación.
Rubin “Huracán” Carter: campeón mundial de peso medio.
Rubin tuvo una infancia difícil. Cuando tenía 11 años un hombre blanco adinerado y viejo se acercó al grupo de amigos de Rubin intentando seducir a uno de ellos —en ese tiempo era muy común que personas adineradas buscaran cometer ese tipo de crímenes, pues los niños negros eran presa fácil. ¿Quién le iba a hacer caso a un niño negro denunciando un abuso sexual de parte de un miembro distinguido de la comunidad? (blanco obviamente). Rubin defendió a su amigo lanzando una botella de vidrio que le pegó en la cabeza al acosador. Ambos forcejearon, pero Rubin huyó tras clavarle una navaja en el brazo. Una semana después lo arrestaron; el policía que lo interrogó —se llamaba Della Pesca—,aprovechó para amenazarlo y humillarlo por ser negro. Llevaron a Rubin a una corte para menores y le dictaron sentencia de permanecer en un reformatorio hasta los 21 años.

En ese violento reformatorio aprendió a sobrevivir, entre peleas y abusos sexuales. Rubin se escapó dos años antes de cumplir su sentencia. Se enroló en el ejército y se hizo paracaidista. Superó problemas personales como su tartamudez (por la que lo discriminaban aún más) y se hizo boxeador profesional.

Cuando volvió a su pueblo natal era ya campeón de peso Welter europeo. En cuanto pisó de nuevo su territorio Della Pesca, ahora convertido en Sargento, lo encarceló para que cumpliera su condena.
Rubin salió de la cárcel el 21 de septiembre de 1961, tras entrenar mucho para convertirse en boxeador profesional, y al salir juró nunca más volver a pisar una prisión. Contrajo matrimonio con una joven de su vecindario, con quien tuvo un hijo, y al siguiente año fue nombrado púgil del año.

Aún cuando era una figura pública reconocida, sufría por ser de raza negra. Uno de los ejemplos más escandalosos sucedió el 24 de diciembre de 1964, día en que le propinó una paliza al entonces campeón mundial de peso medio (Joey Giardello); sin embargo, el cinturón se lo dieron a Giardello después de una deliberación de 35 minutos. El motivo: un negro no podía ganarle a un blanco.

En 1966 ocurrió el suceso trágico que llevó a Rubin a la cárcel: Estaba bebiendo en un bar para relajarse, donde uno de sus fans –John Artis (también negro) – lo reconoce y más tarde se ofrece llevarlo a su casa (aproximadamente a las 2:30 de la madrugada). Ya encaminados, una patrulla los detiene y sin interrogarlos, son forzados a acompañar a los policías.
Después se enterarían que se había cometido un asesinato a sangre fría en otro bar, y se reconoció a dos negros en un auto blanco como los agresores. Rubin y Artis eran sospechosos.

Sin decirles la razón por la cual los llevaban detenidos, Rubin y Artis fueron conducidos al bar donde estaban los testigos, quienes aseguraron que ellos no eran los negros que habían visto. Posteriormente los llevaron al Hospital St. Joseph para que una
de las víctimas los reconociera, y aunque estaba mal herido aseguró que ni Rubin ni Artis habían sido los agresores. En ese lugar estaba el sargento Della Pesca, quien parecía inducir al herido para que los reconociera. Rubin “Huracán” Carter se dio cuenta que aquel sargento que lo había discriminado y humillado, quería involucrarlos en el asesinato a como diera lugar.
Ese mismo año juzgaron a Rubin Carter y a John Artis, en un juicio lleno de mentiras y prejuicios raciales, condenándolos a tres cadenas perpetuas. Cabe hacer mención que el jurado estaba conformado solamente por hombres blancos.

Al leer su vida y las injusticias que cometieron con el Huracán, vinieron muchos recuerdos de mi vida y automáticamente me identifiqué con él, pues yo fui y sigo siendo víctima del racismo. Me dolieron enormemente los prejuicios raciales en contra de los negros y las injusticias que se cometen cuando alguien no aplica la justicia de igual manera para todos.¿La policía no está para defendernos a todos?, era frustrante que ellos mismos fueran los agresores. Me di cuenta que lo que yo había vivido en mi vida era sólo una muestra de los alcances del odio hacia una raza minoritaria. Aunque son derechos universales la vida, la libertad y la seguridad de la persona, hay quienes pasan sobre ellos impunemente.
Inspirado por su vida e indignado por la injusticia que le habían cometido le escribí al Huracán. Rubin me contestó, y entablamos una amistad por correspondencia que duró meses. Después tuvimos un primer encuentro en la cárcel. Esa plática marcó mi vida, y me impulsó más a encontrar la justicia para ese hombre.

No me enteré hasta después cuántas dificultades tienen los reclusos para recibir visitas familiares, dificultades que rayan en la humillación. Por ejemplo, desnudan a todos los presos que reciben visitas y los “revisan” minuciosamente para que no guarden
nada. Sobra decir que los métodos de “buena conducta” que la autoridad administraba no eran sino golpizas, aislamiento, privación de los alimentos, y cosas innombrables. Me pregunto si hay alguna justificación para que se les trate así. ¿Es justicia no tratar a los reclusos como personas? Los delincuentes cometieron un delito, pero ¿cuál es la medida para que la sociedad pase de la justicia a la venganza? Muchas personas piensan que es más fácil encerrarlos y olvidarse de ellos, no importando las condiciones en que vivan, pues si son injustas o deshumanizadas, “se lo ganaron a pulso”.

Yo era sólo un muchacho, pero les pedí a Terry, Sam y Lisa que me ayudaran. Ellos no tenían prejuicios raciales. Dedicamos todo nuestro tiempo y esfuerzos para sacar al Huracán de la cárcel, comenzando por las investigaciones. Visitamos también a los abogados de Rubin, quienes nos recibieron desanimados: llevaban ya una década con el caso del Huracán.
Descubrimos que había personas influyentes e importantes a quienes íbamos a exponer, el tipo de persona que por un prejuicio no se tientan el corazón para destruir la vida de un hombre inocente encarcelándolo. En la investigación encontramos todo tipo de declaraciones falsas e incongruentes con las que se culpaba al Huracán.

En la cárcel el Huracán volvía a recibir amenazas. En esta ocasión fue el director del reformatorio quien le aclaró que, en caso de que alguien quisiera hacerle daño, él no podría protegerlo. Yo mismo fui amenazado por el sargento Della Pesca, quien ahora
a la hora en la que se llamó para denunciar los asesinatos, Rubin y Artis estaban aún en el otro bar; sin embargo los policías declararon que había sido antes.
Uno de los testigos que estaba en el bar, declaró esa noche que no reconocía a Rubin ni Artis como los asesinos. Sin embargo, como tenía problemas con la autoridad, mintió en el juicio a cambio de su propia libertad.
Patty Valentine —otra testigo—, dijo que el auto en que se alejaban los asesinos era un Dodge Monaco; sin embargo el modelo que conducía Artis era un Dodge Polaro.

Había ido en ascenso en puestos públicos. Como ven, las presiones de las autoridades en turno porque no se supiera la verdad eran muy grandes.
Reunimos pruebas de corrupción policial y ministerial, de los prejuicios raciales de los tribunales que juzgaron el caso de Rubin “Huracán” Carter.
Hubo entonces que hacer una elección difícil, pues si se presentaban las pruebas al Tribunal Estatal podrían pasar años antes de la resolución; en cambio, si se presentaban al Tribunal Federal, el juez tendría la oportunidad de rechazar esas pruebas (por saltar al Tribunal Estatal) y entonces se perderían para siempre. Todo dependía de si el juez se daba la oportunidad de revisar las pruebas y de su aceptación.

Teníamos miedo, pues ya en los dos juicios anteriores se había chantajeado a jueces, fiscales y abogados. Todos tenemos derecho a un justo proceso, pero ¿cómo podríamos confiar en las autoridades estatales si había de por medio la idea generalizada de la inferioridad de la raza negra?, ¿podríamos confiar nuevamente en las instituciones judiciales, si no estatales, federales, ante el caso de un negro? No lo sabíamos…
Pero sí sabíamos que de haber justicia, el esfuerzo de civiles comunes y corrientes en busca de la verdad daría fruto. Comprobaríamos que si la ley busca la verdad sin prejuicios, se puede ejercer la justicia; y sobre todo, que denunciando la corrupción se puede realizar el ideal de una sociedad justa. Cualquier persona que deje pasar una injusticia, se hace cómplice, pues el silencio o la apatía frente a hechos injustos dañan a la sociedad enormemente. Una sociedad callada y apática frente a la injusticia es una sociedad corrupta.
Durante nuestras investigaciones sufrimos un “accidente”. Al ir por la autopista inexplicablemente se salió una llanta y tuvimos un choque fuerte; la intención era matarnos, estoy seguro.
Todos los jurados eran personas de raza blanca.
En noviembre de 1985 se le da la oportunidad a Carter de presentar las pruebas.
El juez, tras revisar las pruebas, le concedió a Carter la libertad inmediatamente. Se reconocieron los elementos de racismo durante el proceso penal. Se reconoció la corrupción de la fuerza policial con la que se coercionaron declaraciones y se manipularon pruebas.
Carter fue puesto en libertad.

26 comentarios:

Unknown dijo...

muy buena, y veridica la historia, llevada muy bien al cine por Denzel Washington, y los estadounidense se dicen defensores de lod D:D:H:H, ja!

lech dijo...

hola, soy lech davila en verdad me gusto la historia del señor carter fue algo que de verdad no me voy a olvidar mis respetos a el de verda porfavor como pudiera escribirle a el o responderme a mi correo lechdavila@hotmail.com soy de peru y que estados unidos siendo prinsipal de los derechos humanos no es justo pero les digo que viva rubin carte ok chauuuu

jose luis dijo...

no es una forma de pelear po derechos humanos si no tambien de del derecho de uno mismo representa en esta vida de lo que eres capaz de formar, pensar o hasta contruir como persona, el huracan no se permitio negarse de la libertad que se le fue negada si no con la ayudas de un grupo de amigos que si creyeron en el derecho de la duda y el derecho de conocer la verdad como la justicia es ciega la vida no y DIOS tampoco lo ¨es¨ el gano la pelea de su vida creyo en que no todos somos injusto y que hay fe y vida en los que cree en ello, tuvo victorias como se la quitaron pero al final siempre se supo que era es y lo sera siendo un ganador como en el año en el que le dieron el cinturon que le pertenecia, dios es justo

david zerrizuela dijo...

Me parecebien lo que lesra de 14 años cuando leyo la historia del "Huracan".
Ojala alguna vez se termine el racismo en todo el mundo

Unknown dijo...

Estoy de acuerdo con todos hasta cuando el racismo en el mundo todos somos iguales seamos blanco o negro o moreno o lo que sea...!!!

jessica dijo...

hoy vimos la pelicula en mi casa. Casi nos desidratamos de tanto llorar.Es una exelente pelicula pero la historia es triste y muy injusta.

yadis dijo...

hola sr,carter espero que algun dia usted tenga la amavilidad de leer esto, tuve la oportunidad de ver su pelicula y la verda me parecio conmovedora y trajo mucho sentimentalismo hacia mi ya que mi padre esta preso injustamente sin que haya una sola prueba lo condenaron a 10 anos en pricion se ha perdido de conocer a sus nietos de verlos creser y todo por una injusticia y por nuesro gobierno incapasitado para seer su trabajo que esta danando a nustra sociedad ..... solo puedo flicitarlo por la gran valentia que ha tenido para seguir adelante y a este muchacho que confio en udted aun sin conocerlo y la verdad usted lo dijo en la pelicula 'no fue casualidad que esrra lo contactara y el amor lo hiciera libre'solo espero que algun dia mis hijos y yo veamos salir a mi padre de esa prision!!!!!! que dios lo bendiga ...

Miguel dijo...

Que paso con el policia corrupto, lo metieron a la carcel.

sandra liliana urbano dijo...

hola ayer vi por primera vez la pelicula de rubin uracan carter y dejenme decirles que es algo muy conmovedor y triste saber que alguien paso la mayor parte de su vida en una prision solo por el hecho de ser negro como que sir ser de raza negra fuera un pecado y perdonen por lo que boy a decir pero ese della pesca hojalas se pudra en el infierno porque no se que fuera mi destino si ese desalmado hubiece sido de colombia porque yo tambien soy negra gracias denzel washington por esa excelente interpretacion bueno chaoo

zully rivas dijo...

DIOS MIO CUANTA INJUSTICIA EXISTE EN EL MUNDO CUANTA MALDAD... Y LO MAS ESTUPIDO ES QUE LOS BLANCOS NOS RECRIMINAN POR SER NEGROS NOS HAN HECHO LA VIDA IMPOSIBLE DESDE SIGLOS LO BUENO DE TODO ES QUE EN NOMBRE DE DIOS SE HIZO JUSTICIA LO MALO ES QUE ESTA GENTE LE ROBO PARTE DE LA VIDA A RUBI EN DONDE PUDO COMPARTIR CON SU FAMILIA

Vivi dijo...

hola me parecio muy interesante su historia pienso que usted es un heroe al enfrentarse a las malicias de la gente, usted es un ejemplo para las personas que tienen problemas, espero que a ese infeliz que le puso a ud preso se pudra en la carcel y el si que nunca salga, espero que tenga muchos exitos en su vida y que siga ayudando a las personas que lo necesitan....éxitos....quisiera qu eme cuente mas sobre su vida.

Ricardo dijo...

Solo puedo comentar que vi la historia del "huracan" y se me hace una mam...de toda esa gente que no tiene vida ni corazon en las epocas del razismo, al Sr. Rubin lucho desde niño en busca de una estabilidad emosional y de vida, las cosas y el desagradable policleto que lo encarcelo le dieron ua vision difente a la vida, lo importante fue que hasta despues de muchos años se le hizo justicia...!!!!!!"""Arriba Rubin Huracan Carter"""!!!!!!!!!!!

Abuela dijo...

HACE UNOS DÍAS VI LA PELÍCULA QUE NARRA SU VIDA Y LE PIDO PERDÓN, COMO PARTE DE ESTA HUMANIDAD "CIVILIZADA" QUE ES CAPAZ DE JUZGAR POR EL COLOR DE PIEL.
ADMIRO SU VALOR Y SU ENTEREZA Y, TAMBIÉN, A LOS QUE PUDIERON AYUDARLO!

Unknown dijo...

< buenísima película para contar estar dramática historia, me quedo sobre todo con la frase que dice Huracán Carter :" El Odio me llevó a la cárcel, El Amor me dará la libertad ".>

Unknown dijo...

yo entiendo todo lo que tubo k pasar el huracan y lo admiro por k no se rindio facilmente y es una gran persona k todo el mundo deveria aprender de el porque una persona por ser negra ou otra raza nadies tene derecho a que burle por ser diferente k solo queria decir k te admiro mucho rubin hurancán carten y por ti boy a luchar como nadie y admiro ala pesonas k te ayudaron a que se haga justicia en ese pais racista espero que aya cambiado amor y paz

Unknown dijo...

te admiro por ser mi heroe y eres una gran persona por que nunca te rendiste y solo luchastes creyendo en ti y admiro a todas hecas personas que te apoyaron hacer justicia y que solo quiero decirte que por ti luchare como tu en todo te lo juro.

Anónimo dijo...

que historia tan verdadera. me siento enormemente conmovida por todo lo que le paso al huracan y a la misma ves estoy feliz por que este historia es otra demostración de que la verdadera justicia tarda pero siempre llega. DIOS lo hizo otra ves..

Anónimo dijo...

QUE HISTORIA TAN BUENA. LA JUSTICIA TARDA PERO SIEMPRE LLEGA

Unknown dijo...

Vamos por parte con un poco de información, que nunca viene mal:

Una de las mayores mentiras y falsedades que han hecho en una película. Nada de lo que aquí se cuenta es cierto. Es todo una burda parodia como se puede ver en muchas webs que existen sobre el tema. Al primero que le metieron un gol por toda la escuadra fue a Bob Dylan que hizo una canción mundialmente conocida: "Hurricane". Está en su aclamado álbum "Desire". Dylan dio dos Conciertos benéficos a favor de Rubin Carter, uno en Nueva York y el otro en Houston. Cuando vio que todo era una mentira dejó de cantar la canción. No la canta desde el 25 de Mayo de 1976. A Carter lo juzgaron tres veces y las tres veces lo condenaron. No estuvo en el reformatorio por defender a un amigo suyo de un pederasta como aquí se ve. Estuvo en el reformatorio por atracar a punta de navaja. Del ejército lo echaron. Nunca fue aspirante a ningún título y su historia como boxeador es muy mediocre. En resumen: una gran falsedad.

Unknown dijo...

Probablemente sea la manipulación de los hechos más grosera de la historia del cine. Cualquier parecido con lo realmente ocurrido y el verdadero Rubin Carter es una casualidad. La historia está basada en la supuesta autobiografía que éste escribió en la cárcel, un libro tan lleno de falsedades que hace muchos años que fueron puestas de relieve. Y si eso no fuera suficiente, además Jewison (como tuvo que admitir poco después del entreno) se inventó otros detalles de no poca importancia, como el personaje del ubicuo policía racista que aquí persigue a Carter desde crío y que nunca existió.

Especialmente emotivo es ver cómo una agresión y posterior robo cometidos por el reputado jefe de una banda de delincuentes juveniles como Carter cuando tenía 14 años, se convierte aquí en la defensa propia de un niño de 11 años frente a un pedófilo; o cómo se silencia que fue expulsado del ejército, su extenso historial delictivo, los informes psiquiátricos que acreditaban su personalidad paranoide y embustera, que en los días que fue liberado entre los dos juicios (el segundo, con dos negros en el jurado y que aquí ni aparece, también resolvió su culpabilidad de forma unánime) le dio de hostias y mandó al hospital durante semanas a una mujer que recaudaba dinero para su defensa, que sus testigos de coartada admitieron en el segundo juicio que habían mentido, que sus asesores intentaron comprar a Bello (quien lo había identificado sin duda alguna y además pasó la prueba del detector de mentiras), que en el coche se encontraron cartuchos que encajaban con las dos armas utilizadas, que cambió de versión como de chaqueta y aún así no coincidía con la de Artis (amigo de Carter, pese a que aquí parezca que se habían conocido esa noche), que, pese a lo que aquí se cuenta, Marins sí lo identificó tanto en el hospital como días después y por ello los matones de Carter lo acojonaron tanto que en el juicio se negó a identificarlo pero también se negó a decir que Carter no fuera el asesino, que Artis volvió a la cárcel por otro delito tiempo después, que tenía acojonados a Marins, Bello y Bradley a través de su banda de matones, y tantos otros "pequeños" detalles.

Unknown dijo...

El fiscal del segundo juicio (un reputado antirracista) se comprometió a dejarlos libres si pasaban con éxito el detector de mentiras y a no utilizar los resultados si no lo pasaban. Carter y Artis rehusaron. Tampoco aparece aquí que Carter sucumbió al detector horas después de los asesinatos, cuyos resultados dijeron que había mentido en todas las preguntas clave y que estaba involucrado en unos asesinatos cometidos a cuatro manzanas escasas del garito en donde decía estar (tampoco aparece en la peli este significativo detalle).

Lo más parecido a la realidad es que Carter era boxeador; un boxeador cuya carrera había entrado en barrena para 1966 (su record después de la derrota con Joey Giardello en 1964 es 7 victorias, 7 derrotas y 1 nulo, una derrota que aparece aquí como un robo racista cuando los artículos periodísticos del combate cuentan que Giardello, a quien la productora tuvo que indemnizar para que retirara la demanda que les había presentado, ganó con claridad). Poco más hay de cierto en una cinta basada en las patrañas de un notorio mentiroso subido a los altares por una recua de ignorantes (Dylan el primero, que basó la letra de la canción no en los hechos, sino en el libro de Carter) dispuestos a creer cualquier cosa que les afirmara en sus convicciones. Dylan y los demás hermanos mártires lo abandonaron con rapidez, antes incluso del segundo juicio, cuando se hizo público la paliza de Carter a aquella mujer, pero por lo visto Jewison y D. Washington son de reacciones lentas. Carter nunca fue unos activistas pros derechos civiles; sólo fue un matón que, inteligentemente y tiempo después de los asesinatos, se hizo pasar por tal.

En internet se pueden conseguir desde los resultados de su test con el detector hasta los audios de los juicios, para informarse sobre este mentiroso compulsivo, pintado aquí como un cruce entre Buda y Jesucristo y que acabó a gorrazos con los canadienses (quienes, por lo demás, nunca encontraron prueba de importancia alguna -la excarcelación de Carter no se basó en la aparición de nuevas pruebas-), a los que puso a caldo en un libro posterior y que hoy también son buenos conocedores de sus trolas.
Saludos y KO técnico. ;)

Unknown dijo...

By pachito y chinoman de Hispashare.

Yenis Adelaira Ochoa dijo...

Roy Jones, que tristeza que todavia queden racistas como tu, Dios te perdone tanta mentiras y calumnias. espero no paguen por tanta maldad tu descendencia

Miriam dijo...

Podrías dar el nombre del libro posterior donde habla mal de los canadienses? No voy a opinar ya que, para hacerlo, deberé informarme objetivamente. Gracias.

Naturalmente Enamorada dijo...

Muchas injusticias se comenten, por el hecho de no ser blanco. en muchas ocasiones, me avergüenza de ser de raza blanca.

Unknown dijo...

Muy buena película y los racistas como tu roy jones jr no deberian existir nunca debemos juzgar a las personas x su color d piel ni x su nacionalidad asi k si estas libre d pecado arroja la primera piedra solo dios nos puede juzgar solo las personas k emos sufrido x racismo lo podemos entender asi k no juzges a la lijera