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Joana
Pastrana (15-2, 5 KO) no sufre una lesión de gravedad. La española perdió el
domingo el Mundial IBF del peso mínimo ante Yokasta Valle, un duelo en el que
acabó lesionada en su mano derecha. Sufrió una capsulitis en uno de sus
nudillos, lo cual le impidió golpear con normalidad, aunque “no es excusa”.
“Cometimos errores, nos ha hecho aprender y mejoraremos en el futuro”, asegura
a As Álvaro Gil-Casares, manager de la madrileña.
La
dolencia no requiere una intervención, y con un tratamiento conservador la
española necesitará solo un mes y medio para regresar a los entrenamientos. El
diagnóstico se demoró debido a que era la misma mano que se fracturó en 2016,
por lo los médicos quisieron realizar múltiples pruebas para descartar algo más
grave. “Estamos contentos porque no ha sido grave. La idea es antes de final de
año hacer una gran pelea”, concluyó Gil-Casares.
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