UN REPASO A LO MEJOR DE LA SEMANA

DAN RAFAEL ESPN.com

Sábado en Las Vegas

Timothy Bradley Jr. G12 Juan Manuel Márquez
Retiene un título de los pesos welter Tarjetas: 116-112, 115-113 Bradley, 115-112 Márquez Récords: Bradley Jr. (31-0, 12 KOs) Márquez (55-7-1, 40 KOs)
Comentario de Rafael: Bradley y Márquez han estado ambos involucrados en decisiones cerradas en Las Vegas, y dado su estilo de pelea fue poco sorprendente que ésta fuese otra pelea cerrada y competitiva que llegara a la distancia. Pero cuando eso sucede, el perdedor sale siempre decepcionado, y ése fue el caso con Márquez. El gran peleador mexicano sintió nuevamente que había sido robado por los jueces, quienes le otorgaron a Bradley, de 30 años y oriundo de Palm Springs, California, la decisión dividida, especialmente porque casi todas las 13.111 personas que llenaron el Thomas & Mack Center alentaban a Márquez, de 40 años de edad. Pero a diferencia de las otras derrotas de Márquez, especialmente sus dos controversiales caídas por puntos ante Manny Pacquiao, ésta no está al nivel de ser considerada como controversial. ¿Cerrada? Sí. ¿Controversial? No. Márquez estaba metido en la pelea, claro, pero Bradley, defendiendo su título por segunda ocasión, mostró mejor movimiento, se mostró más ocupado y conectó un poco más. Fue lo suficiente como para convencer a dos jueces de que estaba haciendo un mejor trabajo. Pero eso no detuvo a Márquez, un notorio mal perdedor, a la hora de señalar que fue un robo similar al regalo que recibió Bradley ante Pacquiao en junio del 2012. Luego de que Bradley recibiera el regalo ante Pacquiao -- pero sin recibir respeto de fanáticocs o medios por esta victoria -- era lógico que quisiera probar su valía. Por eso, en lugar de hacer un encuentro de boxeo hábil en marzo pasado cuando enfrentó al fajador ruso Ruslan Provodnikov, Bradley se plantó mano a mano y casi paga el precio cuando fue sacudido duramente por todo el ring, sufrió una concusión, casi fue noqueado en varias ocasiones y fue derribado en el 12do asalto. Bradley terminó logrando una cerrada decisión pero se lo vio en mala forma por un par de meses después del combate. Para este choque ante Márquez, Bradley regresó al estilo de boxeo que lo ayudó a ganar un título mundial welter junior, subió exitosamente al peso welter, y logró acceder a la lista de los mejores libra por libra. Fue ese estilo de boxeo que lo que le resultó suficiente para ganar la mayoría de los rounds ante Márquez. Márquez, quien noqueó a Pacquiao en seco en el sexto asalto del cuarto combate entre ambos en diciembre pasado para asegurarse el único resultado definitivo de aquella serie, eligió enfrentar a Bradley por menos dinero ($6 millones garantizados) en lugar de hacer una pelea con Pacquiao (tal como se lo ofrecieron) porque quería el título de Bradley. Una victoria hubiese transformado a Márquez en el primer peleador mexicano en ganar títulos mundiales en cinco divisiones, y esa fue la motivación para él en este combate. Bradley también rechazó una revancha con Pacquiao, prefiriendo en su lugar lograr otro nombre grande como el de Márquez en su currículum por menos dinero ($4.1 millones). Por eso, con esta victoria, combinada con su triunfo oficial ante Pacquiao, Bradley es ahora el único peleador en tener victorias ante esos dos futuros miembros del Salón de la Fama. Bradley usó su derecha, su ventaja en altura y sus movimientos de entrada y salida para mantener a Márquez fuera de balance. Los mejores rounds de Márquez llegaron a comienzos de la pelea, pero para los asaltos finales Bradley pareció haber entrado en ritmo. Sacudió a Márquez con un derechazo en el 10mo round y casi lo derriba con un gancho de izquierda limpio en los minutos finales del 12do asalto. Y aún así cuando se anunciaron las tarjetas, fue Bradley quien celebró en medio de una avalancha de abucheos de fanáticos de Márquez, mientras el mexicano se marchaba rápidamente del ring tal como lo hace siempre tras una derrota. Cuando finalmente aceptó una entrevista con el comentarista de HBO PPV Max Kellerman en su vestuario, Márquez dijo que no estaba seguro de si continuaría su carrera, que es lo mismo que siempre dice cuando pierde. A pesar de que fue superado, Márquez sigue siendo un peleador de primer nivel y no parece haber razón para que se retire a menos que quiera hacerlo. Para Bradley, es la victoria más importante de su carrera, incluso más satisfactoria que la de Pacquiao, porque esta vez mucha gente pensó que se merecía claramente la decisión. Lo que viene, empero, está por verse. No va a lograr una pelea con el campeón Floyd Mayweather Jr., debido a conflictos de promoción y televisación que hacen imposible esa pelea por el momento. Una revancha ante Márquez es poco probable también. Una revancha con Pacquiao podría darse, pero primero Pacquiao tiene una dura asignación pendiente con Brandon Ríos el 23 de noviembre. Una revancha con Provodnikov podría darse en algún punto, pero ¿realmente quiere Bradley hacer eso nuevamente? Haga lo que haga a continuación, lo hará después de haber logrado una buena actuación y una merecida victoria.

Orlando Salido KO7 Orlando Cruz
Gana un título vacante de peso pluma Récords: Salido (40-12-2, 28 KOs) Cruz (20-3-1, 10 KOs)
Comentario de Rafael: Después de la pelea, Salido dijo que su carrera había sido una montaña rusa. Y es cierto. Salido, de 32 años y oriundo de México, sufrió la mayoría de sus derrotas como adolescente, en la parte de su carrera en la que estaba aprendiendo a pelear. Continuó teniendo altibajos en el resto del trayecto, como ganar un cinturón ante Robert Guerrero en 2006 y luego ser despojado (con su victoria borrada de su récord debido a una prueba positiva de drogas). Dos años más tarde ganó un título por primera vez y luego perdió su siguiente pelea ante Yuriorkis Gamboa. Luego, en 2011 y 2012, llegarían sus grandes triunfos cuando noqueó a Juan Manuel López en su tierra en Puerto Rico en dos sorpresivas victorias de campeonato. Pero en enero pasado, Salido lució envejecido al caer cuatro veces y perder por amplia decisión técnica ante Miguel Ángel "Mikey" García. Pero cuando García no logró dar el peso para una defensa en agosto pasado y fue despojado de la faja, eso abrió el camino para que Salido reciba una oportunidad inesperada al título vacante al enfrentar al puertorriqueño Cruz, de 32 años, cuya historia personal de ser el primer peleador abiertamente gay en el boxeo llegó a los titulares del mundo el año pasado, y fue el foco central de su pelea. Eso no le cayó mal a Salido, quien casi no recibió atención en los días previos al combate, pero luego se subió al ring y superó a Cruz para rejuvenecer su carrera de gran manera. Cruz fue un rival duro per fue superado en potencia por un Salido más grande y fuerte, quien hizo la mayoría del daño con un duro castigo al cuerpo. Pero Salido también conectó fuertes golpes a la cabeza y uppercuts, todos los cuales le quitaron a Cruz su habilidad para moverse bien por el ring. Fue un rival estático para muchos de sus golpes, con su ojo izquierdo muy castigado, y todo indicaba que sería cuestión de tiempo antes de que Salido lo quite del medio. Cruz no trató de correr o sobrevivir, en lugar de salir de su escudo y tratar de combatir. Eso jugó a favor de Salido. Atrapó a Cruz cerca de las sogas con una tremenda derecha a la quijada y una izquierda al cuerpo que castigó duramente a Cruz, quien cayó de rodillas y luego cayó de frente a las lonas. El réferi Kenny Bayless no se molestó en terminar el conteo, deteniendo el pleito al minuto con 5 segundos. Cruz tiene un gran historia personal, pero Salido había tenido una gran pelea. Es posible que la primera defensa de Salido llegue en enero próximo en Nueva York ante el dos veces medallista olímpico Vasyl Lomachenko, quien hizo su debut profesional en la cartelera con el plan armado por Top Rank para que pelee por el título en su segunda pelea. Salido siempre ha estado dispuesto a pelear con quien sea, y si la pelea con Lomachenko se hace sería un encuentro fascinante.

Vasyl Lomachenko KO4 José Luis Ramirez
Pesos plumas Récords: Lomachenko (1-0, 1 KO) KO4 Ramirez (24-3-2, 15 KOs)
Comentario de Rafael: Lomachenko, de 25 años y oriundo de Ucrania, es uno de los grandes amateurs de la historia del boxeo, una carrera que culminó con medallas olímpicas consecutivas, en el peso pluma en 2008 y en el peso ligero en 2012. Con tanta experiencia y con tantos dones físicos y técnicos, tanto él como sus manejadores no ven la razón para recorrer la ruta usual de un prospecto subiendo al profesionalismo, que consiste en aplastar a peleadores sin chances en peleas a cuatro asaltos y luego seguir consecutivamente con ocho, diez y doce rounds. Lomachenko no sintió la necesidad de curtirse más todavía luego de 400 peleas en un currículum brillante. Por eso cuando llegó al profesionalismo insistió en que quienquiera que lo contratara lo mueva con mucha rapidez, algo que fue aceptado por el jefe de Top Rank, Bob Arum. Por eso, en lugar de enfrentar a un total desconocido en su primer pleito, Lomachenko fue directamente a una pelea de 10 asaltos ante un veterano muy experimentado como Ramírez, de 25 años y oriundo de México, quien venía de una impresionante victoria por fallo dividido ante el retador filipino Rey Bautista en la tierra natal de éste último. Lomachenko hubiese preferido pelear por un título mundial en su debut, pero estaba convencido de que podía enfrentar a un oponente sólido primero y luego recibir un combate de campeonato. Entonces, Lomachenko conmovió a Ramírez, demostrando su velocidad y su mortal puntería. Fue una actuación sensacional en la que Lomachenko derribó a Ramírez en el primer asalto con una izquierda al cuerpo y una derecha a la cabeza. Lomachenko domino el pleito el resto del camino hasta que lo liquidó de manera total en el cuarto asalto cuando le conectó un duro gancho de izquierda al cuerpo de Ramírez y lo derribó de rodillas mientras el réferi Russell Mora le propinaba un conteo a los 2 minutos con 59 segundos. Si Lomachenko hace lo que desea, y todavía lo quiere, Arum planea enfrentarlo con el recientemente coronado campeón pluma Orlando Salido (quien ganó un título vacante en la pelea previa) quizás en enero. A más largo plazo, Arum quiere enfrentar a Lomachenko con el campeón pluma junior Guillermo Rigondeaux, ex dos veces medallista dorado olímpico cubano. Por grande que haya sido Lomachenko como amateur, está por verse si realmente está listo para una asignación tan dura como lo será probablemente Salido.